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Juan Pérez de Munébrega

Biografía

Pérez de Munébrega, Juan. Munébrega (Zaragoza), ú. t. s. xvi – Zaragoza, 30.VI.1660. Religioso de la Orden de la Merced (OdeM), teólogo, filósofo, jurista, catedrático de Teología en la Universidad de Zaragoza, procurador general de su Orden, orador sagrado y escritor.

Vistió el hábito de la Orden de la Merced en el Convento de Calatayud, el 15 de julio de 1617; y, al año siguiente, hizo la profesión de los votos religiosos en el Real Convento de San Lázaro de Zaragoza.

Siendo ya ilustre catedrático de la Universidad de Zaragoza, con aplaudidos comentarios a santo Tomás de Aquino y a Juan Duns Scoto, fue nombrado procurador general de la Merced ante la Santa Sede el 10 de mayo de 1636, en el capítulo general de Murcia; y se trasladó al Convento de San Adrián de Roma, sede de los procuradores de la Orden de la Merced, en el que tomó posesión de su cargo el 30 de septiembre de dicho año. Para el desempeño de su delicado y grave cometido en la Ciudad Eterna mucho le sirvieron su excelente dominio de la lengua latina y su sólida formación jurídica.

Juan Pérez de Munébrega estuvo al frente de la Procuración General nueve años, del 1636 al 1645, porque, cumplido el primer sexenio (1636-1642), el nuevo maestro general Marcos Salmerón lo confirmó en el cargo de procurador, tomando posesión del mismo, por segunda vez, el 17 de agosto de 1642.

En el tiempo de su misión en Roma, el padre Juan Pérez prestó inestimables servicios a la Orden, consiguiendo de la Santa Sede numerosos “breves”, para el buen gobierno de la institución mercedaria, en general, y para casas y religiosos particulares merecedores de especial atención. Entre las gracias y privilegios debidos a su gestión, que refiere el padre Amerio Sancho en su Catálogo de los Procuradores Generales, están, por citar algunos: el breve de Urbano VIII Exponi Nobis del 24 de enero de 1637, creando maestro en Teología a fray Gabriel Téllez (el famoso literato Tirso de Molina), definidor de Castilla y cronista general de la Orden; la instancia del cardenal protector de la Orden para enviar religiosos mercedarios a Irlanda con el fin de recuperar los antiguos conventos y fundar otros nuevos; y la bula de Urbano VIII Exponi nobis nuper del 14 de julio de 1645 con la autorización para fundar y erigir el Colegio de San Pedro Nolasco, en la ciudad de Zaragoza. Durante su estancia en Roma como procurador general, desempeñó también el cargo de vicario general de Italia y de Sicilia, es decir: de los conventos mercedarios de Italia y de Sicilia.

Elegido comendador del Convento de San Lázaro de Zaragoza y elector general, en 1645, el padre Juan Pérez se ausentó de Roma y regresó a Zaragoza, para encargarse del gobierno de su encomienda. Y, en la ciudad del Ebro, gracias a su consolidado prestigio y a su habilidad diplomática, consiguió el beneplácito del Ayuntamiento de la ciudad para la erección del Colegio de San Pedro Nolasco, que se inauguró, con toda solemnidad, el 2 de junio de 1647. El capítulo provincial del 26 de junio de 1655, celebrado en Calatayud, nombró el padre Juan Pérez de Munébrega, comendador de dicho Colegio, que fue el primero que usó el título de rector y fue reelegido para el mismo cargo en el capítulo de Huesca del 1 de junio de 1658.

Juan Pérez de Munébrega falleció el 30 de junio de 1660, en el Colegio de San Pedro Nolasco de Zaragoza, antes de concluir su segundo trienio de rector.

Del insigne munebreguense mercedario Juan Pérez hizo relación de cargos y méritos su coetáneo y amigo el padre Francisco Neyla Martínez, en la obra Gloriosa Fecundidad de María [...] en los siguientes términos: “El R. P. M. Fr. Juan Pérez de Munébrega [fue] Catedrático de Escoto y Santo Tomás en la Universidad de Zaragoza, Vicario General de la Provincia de Italia y Sicilia, Procurador General de Curia Romana, dos veces Definidior y Elector General, Comendador de este Real Convento de San Lázaro.

Examinador Sinodal del Arzobispado de Zaragoza y Rector dos trienios del Colegio de N. P. S. Pedro Nolasco de la misma Ciudad, sujeto eminente en letras y gobierno, grande en cátedra y singular en el púlpito, como lo denotan muchas de sus obras, que salieron a luz pública, y las continuas Cuaresmas que predicó en las iglesias de El Pilar, Calatayud, Tarazona y Tudela...

Murió este gran varón antes de concluir el [segundo] trienio por los últimos de junio de 1660, con universal sentimiento de esta Ciudad [Zaragoza] y Universidad, que le veneraba por uno de los primeros Maestros y Catedráticos de ella, donde obtenía la cátedra de Vísperas de Teología”.

 

Obras de ~: Sermón del Espíritu Santo [...] en la Santa Iglesia Metropolitana de Çaragoça [...], Zaragoza, Diego de Dormer, 1633; Defensa de la Univesidad de Zaragoza, trabajada por su comisión y ofrecida a la misma ciudad [...], Zaragoza, 1634; Apología pro exceptione Religionum a solutione cujusdam tributi in Aragonia, Caesaraugustae, 1636; Defensa de las Religiones que viven en la imperial ciudad de Zaragoza [...], Zaragoza, 1644; Sermón predicado en la Iglesia de Ntra. Sra. del Pilar [...], Zaragoza, Diego Dormer, 1645; Oración fúnebre en las honras del Príncipe don Baltasar Carlos de Austria, Zaragoza, Diego Dormer, 1646; Discurso y dictamen sobre que el Procurador General de la comunidad de Calatayud, por ser Seglar, no es incapaz de recibir las décimas que la Sede Apostólica le tiene concedidas a los vecinos de la Señoría de Terrer, Zaragoza, Diego Dormer, 1647; Lágrimas de la imperial ciudad de Zaragoza [...] y Diligencias celosas que hizo la justicia para castigar la mano sacrílega que robó a Santa María del Pilar las joyas que la adornaban el 22 de abril de 1647[...], Zaragoza, Pedro Lanaja, 1647; Parecer sobre unas censuras intimadas a varios canónigos de la Seo de Zaragoza [...], Zaragoza, 1649; De percusione Clerici et ejus absolutione, Caesaraugustae, 1655; Quaetio apologetica seu ad quaestiones de Charitate appendix, Zaragoza, Diego Dormer, 1656; Consulta sobre el Fuero de Aragón, comunmente llamado del 9 por cien, del Dr. Arbués, en Memorias Literarias de Zaragoza, Zaragoza, 1768, pág. 80.

 

Bibl.: F. de Neyla Martínez, Gloriosa Fecundidad de María en el campo de la Católica Iglesia. Excelencias e ilustres hijos del Real Convento de San Lazaro de la Ciudad de Zaragoça del Real y Militar Orden de nuestra Señora de la Merced [...], Barcelona, Rafael Figueró, 1698; J. A. Garí y Siumell, Biblioteca Mercedaria o sea Escritores de la Celeste, Real y Militar Orden de la Merced, Barcelona, Herederos de la Viuda Pla, 1875; A. Sancho Blanco, Catálogo de los Procuradores Generales de la Celeste, Real y Militar Orden de la Merced, Roma, C. Lucci, 1929; G. Placer López, Bibliografía Mercedaria, t. II, Madrid, Imprenta Pueyo, 1968.

 

Juan Devesa Blanco, OdeM

 

 

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