Folch de Cardona, Pedro. ?, s. m. s. xv – Alcover (Tarragona), 1530. Arzobispo de Tarragona y virrey de Cataluña.
Pertenecía a una de las familias de mayor rango aristocrático en Cataluña, descendiendo de una de las ramas ilegítimas del conde Juan Ramón Folch de Cardona.
Como gran señor feudal, secundó durante el período de la postguerra, en el último cuarto del siglo xv, las campañas reales contra el conde del Pallars, las campañas de represión definitiva contra los campesinos remences sublevados, hacia los años ochenta de la misma centuria, en cuyas acciones se encontraba junto a las huestes de toda su familia, así como también participó en la defensa del principado frente a las incursiones francesas que tenían lugar en la frontera del Rosellón. Su carrera eclesiástica tuvo como colofón la sede arzobispal de Tarragona, a la cual accedía en el año 1515, habiendo ocupado previamente en el año 1472 el obispado de Urgel, en el que sucedía a un pariente suyo, el cardenal Jaime de Cardona y de Gandía, así como también había ejercido el abadiato y la administración de la abadía de Solsona, entre los años 1473 y 1515. Fue también abad de Lavaix y de Bages. De su tarea eclesial destaca fundamentalmente la convocatoria y celebración de tres concilios provinciales, en 1517, 1523 y 1529. Su involucración en las instituciones de gobierno de Cataluña discurrió paralela a los cargos mencionados. De ahí que su residencia habitual fuera la ciudad de Barcelona, donde disponía de un lujoso palacio en lo más distinguido de la misma, donde se cuenta celebraba las victorias de sus campañas con grandes banquetes, e incluso donde llegaron a hospedarse en el año 1522 el papa Adriano VI en su viaje de camino a Roma y, tres años más tarde, el rey de Francia Francisco I, que salía de su reciente cautiverio de Pavía para dirigirse a Madrid. En la esfera de la Diputación del General, como diputado eclesiástico llegó a ser presidente en el trienio de 1482 a 1485, y en la esfera de la Administración real, antes de ser elegido como lugarteniente y virrey de la Corona en el principado, ocupaba el cargo de canciller y consejero real en la Real Audiencia de Barcelona, que la presidía. Su gobierno como virrey, muy bien recibido por la clase dirigente catalana por tratarse de un miembro natural del principado, se inició el 10 de abril de 1521, con carácter provisional según constaba en su credencial de nombramiento, y se prolongó hasta el año 1523. La complicada encrucijada de Cataluña ante el avance de la revuelta de las Germanías en buena parte del territorio de la Corona de Aragón, había constituido el detonante de su nombramiento como virrey, aprovechando la ausencia de su predecesor, Hurtado de Mendoza, retenido en campaña en Valencia. En este sentido pudo sofocar algunos movimientos populares. Durante su tiempo, la guerra contra Francia planteaba delicados retos, a la vez que aumentaba la presión de la piratería turca.
Dio orden para organizar en el principado la relación comercial del gremio de la lana con Milán a fin de fomentar que se uniera con la cofradía de paraires. Cual exponente de la nueva cultura renacentista, hizo editar él mismo una serie de libros de carácter litúrgico, como el Breviario de Urgel (Venecia, 1487 y 1509) o el Misal de Urgel y publicó el Ordinarium Sacratorum en la Barcelona de 1530. De ahí que ya en 1505 se le dedicara la edición de los Usatges y en el año 1512 Martín Ivarra hiciera lo mismo en su libro de Epigramas, en los que celebraba su espléndida biblioteca, de la que se encargaba el erasmista Vicente Navarra.
Bibl.: J. Mateu i Ibars, Los virreyes de los estados de la antigua Corona de Aragón. Repertorio biobibliográfico, iconográfico y documental, vol. I, tesis doctoral, Barcelona, Universidad, 1960; J. Reglà i Campistol, Els virreis de Catalunya: els segles xvi i xvii, Barcelona, Vicens Vives, 1961; F. Soldevila, Història de Catalunya, vol. II, Barcelona, Alpha, 1962; J. Lalinde, La institución virreinal en Cataluña, 1471-1716, Barcelona, Instituto de Estudios Mediterráneos, 1964; J. M. Sans i Travé (dir.), Dietaris de la Generalitat de Catalunya, 1411-1539, vol. I, Barcelona, Generalitat de Catalunya, 1994; R. Corts, J. Galtés y A. Manent (dirs.), Diccionari d’Història Eclesiàstica de Catalunya, vol. I, Barcelona, Generalitat de Catalunya, 1998; P. Molas Ribalta, L’alta noblesa catalana a l’edat moderna, Vic, Eumo, 2003.
Mariela Fargas Peñarrocha