Ramírez, Estefanía. ¿León?, p. m. s. xii – Carrizo (León), 4.X.1183. Religiosa cisterciense (OCist.), noble, fundadora de los monasterios de Sandoval y Carrizo.
Hasta época bien moderna ha sido confundida por la mayoría de historiadores con otra dama ilustre del mismo nombre y también muy vinculada al Císter, Estefanía Armengol, fundadora de Santa María de Valbuena (Valladolid), pero se trata de dos mujeres distintas que vivieron en la misma época.
Estefanía Ramírez fue hija del conde Ramón Froilaz, uno de los magnates más importantes del Reino de León en el siglo xii cuyo nombre figura en la documentación de aquellos tiempos en los que desempeñó cargos de relieve en la Corte. De su matrimonio nacieron tres hijos: Alfonso, Froila y Estefanía.
Se ignora la fecha del nacimiento de ésta. Sólo por conjeturas se puede situar entre 1115 y 1120, suponiendo que tendría una edad aproximada a su futuro esposo Ponce de Minerva, de quien consta era un muchacho necesitado de una institutriz especial, cargo desempeñado por la propia Sancha, hermana de Alfonso VII el Emperador, fundadora de Santa María de la Espina y gran protectora del Císter.
Se cree que esta princesa intervino de manera decisiva en concertar el matrimonio entre Ponce de Minerva y Estefanía Ramírez, en fecha no bien dilucidada por los historiadores, pero que debió de ser hacia 1140 o el año siguiente, en que está fechado un documento de Alfonso VII por el que otorga al conde Ponce de Minerva y a su mujer la condesa Estefanía el lugar de San Pedro del Páramo. Fruto del matrimonio fueron tres hijos: Ramiro, María y Sancha. El primero parece que ejerció el cargo de alférez mayor de Fernando II hacia 1164-1167. María llegó a ser primera abadesa de Carrizo. En cuanto a Sancha, parece ser que contrajo matrimonio con Pedro García de Lerma, personaje destacado en la Corte de Fernando II.
La primera obra importante llevada a cabo por el matrimonio Ponce de Minerva y Estefanía Ramírez fue la fundación del monasterio de Sandoval, en la misma provincia de León. Ya recogió la noticia Ángel Manrique: “Yo, el conde Ponce de Minerva y mi esposa la condesa Estefanía, juntamente con nuestros hijos, Ramiro, María y Sancha, por la salud de nuestras almas damos a Dios y a ti Diego Martínez y a tus hermanos en Cristo, así presentes como futuros, que guardáis la regla de san Benito, según las constituciones del Císter, el lugar de Sot-noval, con sus vasallos, solares, molinos [...]” (Manrique, 1642: 451). Está fechado el documento en 1205 de la Era Hispánica, año de 1167 según la Era Cristiana. Firman el documento los condes, sus hijos y muchos prelados y próceres del Reino. Hay indicios de que en 1174 falleció el conde, posiblemente en 27 de julio, fecha en que celebraban los monjes su aniversario.
Estefanía había recibido en dote de su padre, Ramiro Froilaz, la mitad de la villa de Carrizo, y la otra mitad, que era de realengo, se la otorgó Alfonso VII a su marido para que se la diera como arras. Según la documentación del futuro monasterio de Carrizo, poseían los condes en este mismo lugar un palacio donde planearon la fundación de un nuevo monasterio para religiosas cistercienses, cuyas obras iniciaron el 10 de septiembre de 1176. En este día firmó la condesa Estefanía Ramírez la donación, a la Orden del Císter, de las villas de Carrizo y otras especificadas en el documento, para fundar allí una abadía de monjas del Císter, pero otorgaba poder a su hija María para donarlo a otra orden distinta, si la de San Bernardo no la aceptaba. Se ignora la procedencia de las primeras monjas que llegaron para iniciar la comunidad.
Algún historiador apunta que llegaron de Cataluña, pero lo más probable es que vinieran de Tulebras, al sur de Navarra, ya que en esa época este monasterio surtió de religiosas a otros castellanos.
Estefanía Ramírez, una vez muerto el conde, se unió a ellas abrazando la religión. Las religiosas la urgieron a que las presidiera como primera superiora y aunque ella aceptó, nunca quiso tener el título de abadesa durante el tiempo que vivió, que fue hasta 1183, posiblemente el día 4 de octubre, en que celebraban las religiosas su aniversario. La primera abadesa que ostentó la dignidad fue su hija María, que según algunos, era viuda del conde Diego Martínez de Villamayor. Su gobierno no parece que durara hasta l206 —como quieren algunos— sino hasta 1194 en que ya figura en los documentos el nombre de su sucesora Teresa Ramírez.
Bibl.: A. Manrique, Cisterciensium seu verius ecclesiasticorum Annalium a condito Cistercio, t. II, Lugduni, sumpt. Haered. G. Boissat & Laurentii Anisson, 1642, col. IX, pág. 451; A. Verjón y Vázquez, Real Monasterio de Carrizo, Astorga, 1905; J. González, Regesta de Fernando II, Madrid, Instituto Jerónimo Zurita, 1943, pág. 185; H. Flórez, Memorias de las reinas católicas, t. I, Madrid, Aguilar, 1945, pág. 272; T. Moral, “Sandoval, Santa María”, en Q. Aldea Vaquero, T. Marín Martínez y J. Vives Gatell, Diccionario de Historia Eclesiástica de España, vol. III, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Instituto Enrique Flórez, 1973, págs. 1660 y 1161; D. Yáñez Neira, El monasterio de Santa María de Carrizo, Orense, La Región, 1976; M. Concepción Casado, Colección diplomática del Monasterio de Carrizo, t. I, León, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Centro de Estudios e Investigación San Isidoro, 1983.
Damián Yáñez Neira, OCSO
