Sánchez de Funes, Diego. ?, p. m. s. xiii – 1296 ant. Ricohombre castellano y adelantado mayor de la Frontera (Andalucía).
Diego Sánchez fue hijo de Sancho Fernández, a su vez hijo ilegítimo de Fernando II de León. Su apellido toponímico, “de Funes” o “de Fines”, como lo llaman algunos privilegios reales, le fue atribuido por haber conquistado —efímeramente— el castillo de Fines (en la actual provincia de Almería).
Las primeras noticias de su vida pública lo sitúan en las huestes de Fernando III de Castilla y León, durante las operaciones que llevaron a las tomas de Carmona y Sevilla a los andalusíes. Como premio a sus servicios en esta guerra, recibió de la Corona un donadío de unas 300 hectáreas en el término de Tejada. Hasta 1259 poseyó la aldea de Heliche en el Aljarafe, en régimen de pro indiviso con su hermano Fernando Sánchez, y disfrutaba de la propiedad de un cortijo en Alcalá del Río. Aparte de estas tierras en los alrededores de Sevilla, Diego Sánchez también fue beneficiado con una bodega en el interior del casco urbano de aquella ciudad. Vasallos suyos, que militarían a sus órdenes en la campaña, participaron asimismo de las recompensas. En el Reino de Jaén le fueron concedidos a Diego Sánchez los castillos de Cárchel y de Cazalla, enclaves estratégicos en el paso del río Guadalbullón, afluente del Guadalquivir y vía de acceso de Jaén a Granada.
Entre abril y junio de 1258 fue nombrado por Alfonso X “adelantado mayor de la Frontera”, con competencias judiciales sobre los Reinos de Sevilla, Córdoba y Jaén. Dejó el oficio entre enero y marzo de 1261, sustituido por el adelantado mayor de Murcia, Alfonso García de Villamayor.
En mayo de 1264 se produjo una revuelta de los mudéjares andaluces contra el dominio castellano, apoyada por los nazaríes. Los rebeldes fueron derrotados en octubre de aquel año, pero persistió en la frontera la amenaza granadina. Con el fin de coordinar los esfuerzos contra los musulmanes, y de reafirmar la fidelidad a la casa real castellana, en abril de 1265 Diego Sánchez de Funes rubricó un acuerdo de hermandad con los concejos de Córdoba, Jaén, Baeza y otras localidades del alto Guadalquivir, así como con Sancho Martínez, señor de Jódar.
Después del aplastamiento de la revuelta mudéjar, Diego Sánchez tomó parte en la reestructuración del territorio abandonado por los islamitas. En junio de 1269 actuó como partidor, a las órdenes de Alfonso Fernández El Niño (hijo natural de Alfonso X), en el deslinde de términos realizado entre Medina Sidonia y Jerez, Vejer, Tarifa, Algeciras y Alcalá de los Gazules.
En el principio de la década de 1270, Diego Sánchez se contaba entre los consejeros de Alfonso X. Eran años en los que la situación política y militar castellana volvía a ser delicada. En 1272 los nobles más importantes del Reino se habían sublevado y se habían exiliado en Granada. Los nazaríes y sus correligionarios norteafricanos, aprovechando esta circunstancia, se mostraban cada vez más activos en su hostigamiento de la frontera andaluza. El infante Fernando de la Cerda, primogénito del Monarca, se hallaba en el sur intentando solucionar por delegación de su padre estos problemas. En este contexto, Diego Sánchez de Funes regresó al cargo de “adelantado de la Frontera”, auxiliando al infante heredero.
Está constatado su desempeño del oficio desde junio de 1272 hasta marzo de 1273.
Hacia marzo de 1274 Diego Sánchez fue uno de los notables castellano-leoneses que se despidieron en Burgos de Alfonso X, que partía a entrevistarse con el papa Gregorio X en Beaucaire en un último intento de verse reconocido como emperador de Alemania.
Después de esta última fecha, se deja de contar con testimonios cronísticos y documentales alusivos a la actividad de Diego Sánchez. Se sabe que murió antes de 1296.
Bibl.: P. de Barcelos, Livro de Linhagens (ed. de J. Mattoso del ms. del s. xiv), vol. II, Lisboa, Publicaçôes do II Centenario da Academia das Ciéncias, 1980, pág. 191; G. Argote de Molina, Nobleza de Andalucía, Jaén, Instituto de Estudios Giennenses, 1957 (1.ª ed., Sevilla, 1588), págs. 279-280, 341 y 344-345; A. Ballesteros-Beretta, Alfonso X el Sabio, Barcelona, Salvat, 1963, págs. 557-558; M. González Jiménez (ed.), Crónica de Alfonso X, Murcia, Real Academia Alfonso X el Sabio, 1999, pág. 68, n. 112; B. Vázquez Campos, “Sobre los orígenes del Adelantamiento de Andalucía”, en Historia. Instituciones. Documentos, 27 (2000), págs. 333-373 (espec., págs. 337-340, 356-358 y 363-365); Los adelantados mayores de la Frontera o Andalucía (siglos xiii-xiv), Sevilla, Diputación Provincial, 2006.
Braulio Vázquez Campos
