Rojas y Mendoza, Fernando. España, s. m. s. XVII – Caracas (Venezuela), 1712 post. Caballero de la Orden de Calatrava, corregidor de Arequipa, gobernador y capitán general de la provincia de Venezuela entre los años 1706 a 1711.
Antes de ser gobernador y capitán general de Venezuela, se sabe que Fernando Rojas desempeñó, desde el 9 de abril de 1682, el cargo de corregidor de la ciudad de Arequipa, en el virreinato del Perú, y que fue prorrogado en su nombramiento el 3 de marzo de 1688. Llevaba, pues, varios años en América cuando fue nombrado gobernador por Real Cédula datada en Madrid el 6 de septiembre de 1704, que comenzaba así: “Don Phelipe, etc. – Por quanto atendiendo a lo que vos don fernando de Rojas y Mendoza Cavallero de la Orden de Calatrava me haveis servido y esperandolo continuareis con la fidelidad que sois obligado he resuelto por mi real decreto de este año haceros merced del Gobierno y la Capitania General de la provincia de Venezuela para que le sirvais por tiempo de cinco años luego que cumpla los cinco años por que esta previsto en el Sargento mayor d. Miguel de Anos y Saraza o llegue a vacar por cualquier accidente siendo como es mi voluntad useis y exerçais este empleo en las ciudades villas y lugares que alpresente estan poblados y adelante se poblaren en la jurisdicción de dicha provincia según y de la manera que lo an hecho y devido hazer vuestros antecesores guardando y cumpliendo lo proveido y que se proveyere para el gobierno de la provincia buen tratamiento de los yndios y administracion de justicia y mando al presidente y los de mi consejo de las yndias tomen y rezivan de vos el referido don fernando de Roxas y Mendoza el juramento acostumbrado con la sollenidad que se requiere...”.
Conforme a lo ordenado, Fernando Rojas prestó juramento, no en América, sino en la Casa de Contratación de Cádiz, el 11 de enero de 1706. Cruzó el Atlántico y el 3 de mayo de dicho año llegaba al puerto de La Guaira, encargándose del gobierno efectivo el 8 de mayo; el 15 de mayo murió el “virtuosísimo Obispo de Caracas” (L. A. Sucre, 1928), Diego de Baños y Sotomayor, que llevaba veintidós años en la diócesis, y el nuevo gobernador presidió las solemnes exequias en la catedral caraqueña.
Promovió y consiguió una Real Cédula, de 21 de diciembre de 1706, que ratificaba al Cabildo de Caracas el gobierno de Venezuela en los casos de necesidad (en general, interinatos). Dictó bandos de buen gobierno, que ampliaban las de su antecesor, Berrotarán; así, ordenó que después del toque de Ánimas se recojan todos en sus casas; “que cualesquiera serujano o Barbero que fuere llamado para curar alguna herida, sea obligado a dar cuenta a la Real Justicia, dentro de dos horas”; y así, otras disposiciones prohibiendo los garitos, el porte de armas, venta de bebidas alcohólicas sin permiso (no el consumo de bebidas alcohólicas, como dicen otros historiadores). Otro bando reguló las costumbres del pueblo durante la Semana Santa, que se habían desmandado.
El 6 de julio de 1711 traspasó el mando al nuevo gobernador, José Francisco Cañas Merino. Fernando de Rojas se quedó a vivir en Caracas, donde murió años después.
Bibl.: R. M. Baralt, Resúmen de Historia de Venezuela [...], vol. I, París, Imprenta de H. Fournier y Cª, 1841, pág. 443; L. A. Sucre, Gobernadores y Capitanes Generales de Venezuela, Caracas, Litografía y Tipografía del Comercio, 1928, págs. 205-207; VV. AA., Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo- Americana [...], vol. LVII, Madrid, Espasa Calpe, 1929, pág. 1066; N. E. Navarro, Anales Eclesiásticos Venezolanos, Caracas, Tipografía Americana, 1951 (2.ª ed.), pág. 149; Títulos de Indias, Valladolid, Archivo de Simancas, 1954, pág. 531; J. Llavador Mira, La Gobernación de Venezuela en el siglo xvii, Caracas, Academia Nacional de la Historia, 1969, págs. 8, 21, 25-26, 42, 83 y 231-234; G. Morón, Historia de Venezuela, Caracas, Italgráfica, Impresores, Editores, SRL., 1971, vol. II, pág. 37, vol. III, págs. 168-169, vol. IV, pág. 176, en vol. III, Diccionario de Historia de Venezuela, Caracas, Fundación Polar, 1988, págs. 472-473; L. Vaccari San Miguel, Sobre Gobernación y Residencias en la Provincia de Venezuela (siglos XVI, XVII, XVIII), Caracas, Academia Nacional de la Historia, 1992, págs. 29, 119 y 195.
Fernando Rodríguez de la Torre
