Orrego y Olalla, Jerónima de. La bella encomendera. Bogotá (Colombia), s. t. s. xvi – p. t. s. xvii. Heredera de la encomienda de Bogotá.
Hija y única heredera de Antonio de Olalla, alférez de Infantería de las tropas del licenciado Gonzalo Jiménez de Quesada, que en 1538 fundaron Santafé, y de María de Orrego, de familia principal de Portugal. Olalla fue recompensado con el título de capitán y la encomienda de Bogotá, estimada en ochocientos o mil indios, considerada como la mayor fortuna de la Nueva Granada.
En Jerónima se reunían belleza y una gran fortuna que despertaron la pasión de hombres notables, con graves consecuencias en la vida de la ciudad recién fundada. Uno de ellos fue el licenciado Francisco de Anuncibay, oidor venido en 1573, quien ganó fama de ambicioso, deshonesto y cruel con los indios. Otro, el joven Fernando Monzón, hijo del licenciado Juan Bautista Monzón, segundo visitador general de la Audiencia enviado en 1578. Según lo explicó éste al Rey, la joven “enloqueció de amor” por su hijo, de lo cual se derivaron sucesos que afectaron la marcha de la Real Audiencia de Santafé, instalada en 1550 y aún bastante desajustada.
Temerosa de una desgracia por el tono de la rivalidad, María de Orrego llamó a Santafé al capitán Olalla, ausente en su extensa encomienda. Decidió éste poner remedio llevándose a la joven fuera de la ciudad; como la Sabana se encontrara inundada y los caminos habían desaparecido bajo las aguas, la instaló sobre una balsa y a la vista de Anuncibay, la trasladó al punto más remoto de su encomienda. En pocos días, el intrigante funcionario consiguió de la Audiencia la autorización y recursos para construir un camellón, que él mismo dirigió, hasta el lugar donde estaban los aposentos de Olalla.
La locura amorosa del oidor originó algunos capítulos en su juicio de residencia y las quejas elevadas al Rey concluyeron con su traslado a Quito. La boda de Jerónima con Fernando Monzón, realizada el 8 de junio de 1580, sin cumplir el requisito de la Aprobación Real, fue un acontecimiento notable, aunque de fatales consecuencias para el visitador, acusado de procurar maliciosamente tal alianza. Fernando murió al año siguiente y Juan Bautista Monzón, acorralado por enemigos cuyos crímenes había denunciado, sufrió maltratos e infamante prisión hasta su muerte.
En 1586 la viuda contrajo nuevo matrimonio con el general y almirante Francisco Maldonado de Mendoza, caballero de la Orden de Santiago y conquistador de La Florida, para lo cual contó con todas las aprobaciones reales. En 1592, con algunos reparos, ella traspasó la encomienda a su marido; años mas tarde, en 1610, la pareja fundó un mayorazgo a favor de Antonio, el primogénito, y de sus descendientes, al cual se vinculó la parte más significativa de la encomienda, denominada “Dehesa de Bogotá”, o “Hacienda el Novillero”, cuya extensión se ha calculado en 45.000 hectáreas. Una posterior modificación levantó a sus sucesores la prohibición de casarse con moros, judíos, indios o negros y permitió a las mujeres del linaje ser herederas. Entre su descendencia por línea femenina, destaca Jorge Miguel Lozano de Peralta, (1731-1791), vizconde de Pastrana y I marques de San Jorge, octavo poseedor del mayorazgo.
Jerónima de Orrego y Olalla representa el rol de la mujer como trasmisora de patrimonio en la sociedad colonial, pero también como defensora de los derechos hereditarios de las mujeres y mediadora de la mezcla de razas que es patrimonio de América.
Bibl.: J. Rodríguez Freyle, El Carnero, conquista y descubrimiento del Nuevo Reyno de Granada y de las Indias Occidentales del mar océano y fundación de la ciudad de Santafé de Bogotá, Bogotá, Imprenta de Pizano y Pérez, 1859; J. Carrasquilla Botero, Quintas y estancias de Santafé y Bogotá, Bogotá, Fondo de Promoción de la Cultura, Banco Popular, 1989, págs. 154-168; J. M. Restrepo Posada, R. Rivas et al., Genealogías de Santa Fé de Bogotá, t. IV, Bogotá, Gente Nueva Editorial, 1995.
Aída Martínez Carreño
