Moreno Merino, Santiago Apolinar. Domingo de Silos. Cañas (La Rioja), 23.VII.1770 – Cádiz, 9.III.1853. Monje benedictino (OSB), abad y obispo de Cádiz.
Nació en la villa riojana de Cañas, patria de santo Domingo de Silos, en el seno de una familia de acomodados labradores. Comenzó el estudio del Latín en la villa de Anguiano y de Filosofía entre los franciscanos de Santo Domingo de la Calzada, pero el 11 de febrero de 1786 tomó el hábito monástico en el Monasterio de Santo Domingo de Silos (Burgos), cambiando entonces su nombre de pila por el de Domingo de Silos, y profesando el 18 de febrero del año siguiente. Estudió la Filosofía y Teología en los colegios de la Congregación benedictina de Valladolid, a la que Silos pertenecía.
En 1801 fue nombrado abad del Monasterio de San Martín de Madrid, cargo que ejerció los cuatro años reglamentarios. Residió después en el mismo monasterio en calidad de definidor de la Congregación y examinador sinodal del arzobispado de Toledo. Al entrar las tropas napoleónicas en Madrid, el padre Moreno decidió huir y refugiarse en el Monasterio de Silos; salió de Madrid el 4 de diciembre de 1808 y, monte a través y por caminos poco frecuentados, llegó a Silos el día 17 del mismo mes. Suprimida la comunidad en agosto de 1809, el padre Moreno logró permanecer en el monasterio como encargado de realizar el inventario de sus bienes. De acuerdo con el famoso cura Merino, simuló un saqueo del monasterio, pudiendo poner así a salvo las alhajas de la comunidad.
Por dos veces fue llamado a Burgos por los franceses para dar cuenta de los bienes del monasterio, pero en ambos casos logró salir airoso gracias a su astucia. El 2 de mayo de 1812 pronunció en Salas de los Infantes (Burgos) la oración fúnebre en memoria de los miembros de la Junta Superior de Burgos, ejecutados en Soria el 2 de abril del mismo año, acción por la cual hubo de andar un tiempo por los montes, huyendo de los franceses.
Acabada la guerra, el capítulo general de la Congregación lo nombró abad de Silos, cargo del que tomó posesión el 5 de junio de 1814. El 18 de septiembre de 1816 fue propuesto como obispo administrador de la diócesis de Caracas (Venezuela), pero las bulas papales no llegaron hasta junio de 1818, siendo consagrado en Silos el 19 de julio del mismo año. Estando en Madrid dispuesto a partir para Cádiz llegaron noticias de la sublevación de las colonias americanas, por lo que hubo de anular su proyectado viaje. Volvió entonces a Silos, hasta que el 21 de marzo de 1825 fue nombrado obispo de Cádiz, ciudad en la que entró el 5 de agosto.
Visitó personalmente la diócesis, construyó iglesias en varios pueblos que carecían de ella y sobre todo, desde 1832 puso gran empeño en terminar la obra de la catedral, comenzada en 1722. Logró consagrar el nuevo templo el 29 de noviembre de 1838, cuando en Cádiz nadie consideraba posible rematar la obra en tan poco tiempo. Pero por encima de todo, fray Domingo de Silos Moreno dejó en su diócesis fama de limosnero, siendo llamado el padre de los pobres.
Murió el 9 de marzo de 1853, asistido por el padre Rosendo Salvado, monje benedictino exclaustrado, misionero en Australia y obispo de Puerto Victoria, acompañado de los monjes con los que iba a embarcar para su misión.
OBRAS DE ~: Oración fúnebre que en las solemnes exequias celebradas por el real monasterio de Santo Domingo de Silos el 12 de mayo de 1804 a la buena memoria de su ilustre hijo, el Rmo. P. M. Fr. Benito Camba, General que fue de la religión de San Benito, dixo el R. P. M. Fr. Domingo de Silos Moreno, Abad del real monasterio de San Martín de Madrid, Santiago de Compostela, 1804; Oración fúnebre que dixo a la buena memoria de los vocales de la Junta Superior de Burgos, del intendente interino y su secretario, el día 2 de mayo del año de 1812 en la función que con orden y asistencia de ella y demás autoridades de la provincia celebró en la iglesia de Santa María de Salas de los Infantes el R. P. M. Fr. Domingo de Silos Moreno, Madrid, 1814; Pastoral del obispo de Cádiz a sus diocesanos, Cádiz, 1826; El obispo de Cádiz a todos sus diocesanos con motivo de la enfermedad llamada cólera morbo, Cádiz, 1832.
Bibl.: I. J. Infante, Oración fúnebre que en las honras celebradas en la iglesia de religiosas concepcionistas de Santa María, por la benerable cofradía de penitencia de Ntra. Sra. de la Soledad y Santo Entierro de N. S. Jesucristo de la ciudad de Cádiz, en sufragio del alma del Escmo. Señor D. Fr. Domingo de Silos Moreno, obispo que fue de esta diócesis, dijo el 17 de abril de 1853, Madrid, s. f.; A. de Castro, Biografía del Excmo. e Illmo. Señor D. Fray Domingo de Silos Moreno, obispo que fue de Cádiz, Cádiz, Librería Española y Estrangera, 1853; M. Férotin, Histoire de l’Abbaye de Silos, Paris, E. Leroux, 1897, págs. 189-191 y 252-254.
Miguel C. Vivancos Gómez, OSB
