Andrade Blázquez, Ángel María Isidro. Ciudad Real, 15.V.1866 – 18.XI.1932. Pintor.
Nacido en una familia de clase media, desde muy joven sintió inclinación por la pintura y el dibujo, siendo su profesor en el Instituto de Ciudad Real, Joaquín María Ferrer, quien aconsejó a la familia le permitiesen formarse en Madrid, donde estudió en los talleres de arte decorativo de Bussato y Bonard, y posteriormente en la Escuela de Artes, donde permaneció hasta 1884, destacando en dibujo artístico e industrial. Entre 1884 y 1887 estudió en la Escuela Superior de Pintura, Escultura y Grabado de San Fernando, ayudado con una beca de la Diputación de Ciudad Real, teniendo en dicho centro entre sus profesores al destacado paisajista Carlos Haes. Tras terminar sus estudios en la Escuela de San Fernando, obtuvo nuevamente de la Diputación una pensión, en esta ocasión, de estancia en Italia, que le posibilitaría visitar Roma, Nápoles, Asís, Orvieto, Pisa, etc., resultando de gran importancia en la formación artística del pintor. Tras volver de Italia, participó por vez primera en la Exposición Nacional de 1890, recibiendo la medalla de tercera Clase. A pesar de no renovársele la pensión, la Diputación de Ciudad Real le encargó, sin embargo, la ornamentación interior de la nueva sede del palacio de la Diputación, en cuyo proyecto trabajó durante los años 1891 y 1892. Tras realizar estos trabajos se trasladó a Madrid, iniciándose la etapa más brillante de su carrera, comenzando a colaborar con las revistas Blanco y Negro y La Ilustración Española y Americana, y entrando en contacto con los círculos artísticos de la capital. En 1894 obtuvo por Paisaje una mención honorífica en la Exposición de Bellas Artes de Alicante, y en 1895 una medalla de tercera Clase en la Exposición Nacional por La Siega.
También en dicho año logró conseguir como pensionado plaza para residir en la Escuela de Bellas Artes de Roma, período en el que perfeccionó sus conocimientos de la técnica pictórica, como se constata a través de sus envíos anuales de pensionado (El Lago Nemi, Piccola Marina de Capri, Lagunas Pontinas, etc.).
Finalizada su estancia en Roma en 1900, ganó las oposiciones por concurso de méritos, de profesor de Dibujo en el Instituto de Tarragona, donde permaneció hasta 1906. Esos años de estancia en Cataluña le permitieron conocer directamente las tendencias paisajistas que por entonces allí se desarrollaban, como la denominada Escuela de Olot fundada por Joaquín Vayreda. En 1905 logró obtener la cátedra de Dibujo, y tras un breve destino en Badajoz, fue trasladado al Instituto General y Técnico de Toledo, en donde permaneció hasta 1915. Durante su estancia en Toledo realizó diversas panorámicas sobre la ciudad del Tajo y de Arenas de San Pedro, donde solía pasar los veranos.
En 1906 recibió en la Exposición Nacional de Bellas Artes una segunda medalla por el cuadro de temática social titulado Los Huérfanos, y en la Exposición de 1908 el jurado le concedió medalla de segunda Clase por la obra El Tajo en Toledo. Posteriormente, ya en 1910, obtuvo un premio internacional en la Exposición Universal de Buenos Aires, como fue la Medalla de Plata por El arrabal y la Puerta del Sol de Toledo; también ese mismo año envió obra a la Exposición Internacional celebrada en Bruselas, y en 1912 a la de Arte Español de Londres. De vuelta a Ciudad Real en 1915, prosiguió impartiendo clases como profesor del instituto, a la vez que continuó realizando encargos tanto de instituciones como de particulares, teniendo el reconocimiento oficial de su ciudad natal. De todos modos, durante esta última etapa, también siguió enviando sus obras a las respectivas exposiciones nacionales, siendo incluso vocal del jurado de la de 1920.
Ya en 1919 participó en la Exposición de Bilbao y en el Pabellón Español de la Exposición Universal de París, y en 1926 en la Exposición General de Bellas Artes de Cádiz, siendo su última contribución al respecto la realizada en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1932. Nombrado en 1923 miembro correspondiente en Ciudad Real de la Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo, falleció en la ciudad que le vio nacer el 18 de noviembre de 1932.
Obras de ~: Idilio Campesino, 1889; El Aniversario, 1890; La Siega, 1895; Piccola Marina de Capri, 1897; Paisaje del norte, 1903; Murallas de Tarragona, 1903; Los Huérfanos, 1906; El Tajo en Toledo, 1908; El arrabal y la Puerta del Sol de Toledo, 1910; Entre dos luces, 1910-1912; Los Sauces, 1927; El Molino de Zuacorta, 1928; Remanso, 1930; El jardín del Instituto de Ciudad Real, 1932.
Bibl.: I. Hervás y Buendía, Diccionario histórico-geográfico, biográfico y bibliográfico de la provincia de Ciudad Real, Ciudad Real, Tipografía Hospicio Provincial, 1899, pág. 291; M. Peñalosa Esteban Fernández, “Artistas manchegos: Andrade”, en Cuadernos de Estudios Manchegos, 2 (1948), págs. 107-116; B. de Pantorba, Historia y crítica de las exposiciones nacionales de Bellas Artes celebradas en España, Madrid, Ediciones Alcor, 1948, pág. 337; E. Valentín, Dos pintores de Ciudad Real: Ángel Andrade y Carlos Vázquez, Tomelloso, 1949; J. Brihuega, Cuadernos de dibujo de Ángel Andrade, Ciudad Real, Diputación Provincial, 1985; J. Brihuega, “Un contexto para un pintor: A. Andrade (1866-1932)”, en Catálogo de la Exposición Antológica en homenaje a Ángel Andrade, Ciudad Real, Diputación Provincial, 1985, págs. 5-24; C. López-Salazar Pérez, Ángel Andrade (1866-1932), Ciudad Real, Diputación Provincial, 1989; M. Antolín Paz, Diccionario de pintores y escultores españoles del siglo xx, t. 1, Madrid, Editorial Forum Artis, 1994, págs. 149-150; G. Prodan, Diccionario del Arte del siglo xx en la provincia de Ciudad Real. Artistas. Entorno. Escuelas y tendencias, Ciudad Real, Diputación Provincial, 1997, págs. 37-41; Ángel Andrade, la aventura del paisaje. 1866-1932, Toledo, Caja de Castilla-La Mancha, 2004.
Gregorio Carrasco Serrano