Mendoza y Montero, Agustín. Conde de la Corte de la Berrona (VI). Zafra (Badajoz), 28.III.1895 – Madrid, 18.VI.1964. Ganadero de reses bravas y fundador de la ganadería del conde de la Corte.
Nació en el seno de una importante familia aristocrática extremeña, poseedora de importantes predios rústicos, pues era hijo de Agustín de Mendoza y Ramírez de Arellano, V conde de la Corte de la Berrona, y de María de la O Montero López.
Fruto de su gran afición por el mundo de la tauromaquia, decidió hacia el año 1919 hacerse ganadero de reses bravas y aconsejado por su inefable amigo Marcial Lalanda, se interesó por la ganadería de la marquesa viuda de Tamarón, propiedad de la familia Mora Figueroa y encastada en lo más puro de la sangre Parladé. Eligió para la divisa de sus toros los colores de su escudo familiar: verde, encarnado y oro. El hierro fue un círculo cortado por la mitad en forma transversal rematado por una corona condal, tal y como correspondía a su merced nobiliaria. Sus toros pasaron a pastar en la dehesa Los Bolsicos, antiguo señorío medieval extremeño situado en el término de Jerez de los Caballeros.
Su primera corrida como ganadero fue lidiada en Badajoz el 17 de mayo de 1921. Pronto comenzaron sus éxitos como ganadero y el 17 de mayo de 1928 la ganadería tomó la antigüedad en Madrid.
Habiendo estallado la Guerra Civil, con la ayuda del ganadero charro Atanasio Fernández, el conde de la Corte y Marcial Lalanda huyeron a exiliarse en Portugal en un cajón de toros. La ganadería fue expropiada y el bando republicano comenzó a herrar y a lidiar los toros con las siglas de la Unión General del Trabajo: UGT.
Tras la contienda, los toros “condesos” cosecharon éxitos importantes en plazas de primera categoría como Pamplona, Bilbao, Madrid, o Valencia y las principales figuras del toreo elegían a los toros del conde para sus mejores momentos. Así, diestros de la altura de Manolete, Pepe Luis Vázquez o Antonio Ordóñez mataron las camadas enteras del conde.
Lo más significativo de este ganadero es que creó un tipo de toro de gran calidad y bravura, destacando sus impresionantes cornamentas y sus excepcionales trapíos.
Toros como Cara ancha, Campanario, Talador, Verduguillo, Nueve Cosechas, Arábigo, Noche triste, u Ocho Picos lograron premios al mejor toro en Pamplona, Madrid, Granada, Sevilla o Valencia.
Admirando sus éxitos ganaderos, muchos criadores de España, Portugal y América acudieron a Los Bolsicos a comprar sangre condesa. Obviamente Atanasio Fernández, de quién nunca olvidó el favor que le había hecho, pero también ganaderos como Juan Pedro Domecq, Pinto Barreiros y otros muchos, adquirieron vacas y sementales del conde de la Corte, estos a su vez esparcen la semilla de su bravura, pudiendo hablarse de que casi el noventa por ciento de las ganaderías actuales proceden, de una u otra manera, de aquello que fundó Agustín Mendoza.
El conde de la Corte falleció en Madrid el 18 de junio de 1964, pasando sus restos a reposar en el panteón familiar de Zafra. Soltero y sin descendencia directa, heredó la ganadería Luis López Ovando, un sobrino nieto que con anterioridad había prohijado.
Bibl.: A. Vera Areva, Orígenes e Historia de la ganadería brava, Madrid, Artes Gráficas EMA, 1961; F. Mira, El toro bravo, Hierros y encastes, Barcelona, Seix Barral, 1979; C. Carrasco Sanabria, Conde de la Corte. Ganadería Madre de la sangre brava, Badajoz, Diputación, 2004.
Cristina Carrasco Sanabria
