López de Maturana y Ortiz de Zárate, María Pilar. Beata Margarita María. Bilbao (Vizcaya), 25.VII.1884 – San Sebastián (Guipúzcoa), 23.VII.1934. Mercedaria, fundadora de las mercedarias misioneras de Bérriz (MMB), beata.
María Pilar, que éste era su nombre de bautismo, nació en el seno de una familia acomodada y, junto con su hermana gemela Leonor, fue bautizada en la parroquia de San Antón. Sus padres poseían una tienda de comestibles en Bilbao y recibió una esmerada educación.
En 1901 ingresó como alumna interna en el monasterio de la Vera Cruz de las mercedarias de Bérriz (Vizcaya). Regresó a casa al año siguiente, pero ya tenía decidida su vocación religiosa. En 1903 volvió de nuevo a Bérriz, esta vez de novicia, mientras su hermana gemela, Leonor, ingresó en las carmelitas de la Caridad. En su toma de hábito cambió su nombre por el de Margarita María. Desde el primer momento se entregó a vida de monja de clausura, dedicada durante veinte años a la educación de las alumnas. Dos fueron las características que la distinguieron: su afición a la oración y su caridad exquisita. En esta vida de oración constante, en su intimidad con el Señor, su vocación mercedaria de redención de cautivos fue adquiriendo nuevos y amplios horizontes. Animada de gran espíritu misionero, a pesar de la estricta clausura de su monasterio, fundó en 1919, en el colegio que regentaban las monjas, una asociación a la que llamó “Juventud Mercedaria misionera de Bérriz”, y a través de ella formó en el espíritu misionero a varias generaciones de jóvenes que, bien religiosas o casadas, supieron vivir el ideal misionero. Al mismo tiempo, modernizaba la enseñanza que en él impartían, introduciendo esquemas pedagógicos más acordes a los tiempos.
En 1924 la comunidad pidió permiso a la Santa Sede para poder convertirse en misionera. Pío XI las apoyó y encaminó hacia China. El 19 de septiembre de 1926 salió una primera expedición hacia el vicariato apostólico de Wuhu. Al año siguiente, madre Margarita María fue elegida superiora de su monasterio y fundó una revista, Ángeles de las misiones, para la difusión de la conciencia misionera entre los fieles. Ese mismo año salió una segunda expedición de monjas con destino a Ponapé, en las islas Carolinas. En agosto de 1928 la madre Margarita María partió al Japón con un tercer grupo de religiosas, visitando además el resto de las fundaciones del Extremo Oriente, para hacerse cargo de las exigencias apostólicas de la nueva vida misionera, y con la mirada puesta en transformar el convento de clausura en instituto misionero —transformación que tuvo lugar en 1930, por petición de las noventa y cuatro monjas, petición sellada con un “si” unánime en votación secreta, como pedía Roma—. Lo mismo hizo al año siguiente, en 1929, consolidando así el nuevo instituto misionero. El 30 de julio de 1931 la madre Margarita María fue elegida, por unanimidad, madre general del nuevo instituto. A su muerte —dos días antes de cumplir los cincuenta años—, había logrado crear cuatro centros de misión: en Wuhu (China) un colegio y un dispensario; en Tokio (Japón) un colegio; en Saipán (Islas Marianas) una escuela y un grupo de cooperación parroquial; en Ponapé (Las Carolinas) un internado, un dispensario y un grupo de cooperación parroquial. Fue beatificada en la catedral de Bilbao el 22 de octubre de 2006.
El instituto religioso de las mercedarias de Bérriz continúa la obra de Margarita hoy en Taiwán, China, Japón, Micronesia, Filipinas, Estados Unidos, México, Guatemala, Nicaragua, Ecuador, Perú, República Democrática del Congo, Zambia, Italia y España.
Obras de ~: Viaje misionero alrededor del mundo: impresiones, planes, esperanzas, Bérriz, Ángeles de las Misiones, 1948; Alter Christus. Pensamientos sobre Nuestro Señor Jesucristo entresacados de sus escritos, Bérriz, Ángeles de las Misiones, 1958; La Virgen en su vida, Bérriz, Gráficas Bilbao, 1958; Misionera: Pensamientos misioneros entresacados de sus escritos, Bilbao, Gráficas Bilbao, 1959; Pensamientos sobre la Iglesia entresacados de sus escritos, Bérriz, Ángeles de las Misiones, 1964; Margarita M.ª López de Maturana [Cartas 1911-1934 y Escritos], Madrid, Gráficas José Antonio, 1986; T. Postigo y I. Ávila (eds.), El porqué de una transformación, Madrid, Mercedarias Misioneras de Bérriz, 2006.
Fuentes y bibl.: Testimonio de M.ª Isabel Artadi (MMB), julio de 2007.
J. Zameza, Una Virgen apóstol, Bérriz, Editorial Ángeles de las Misiones, 1934 (3.ª ed., Vitoria, Causa de la Madre Margarita- Imprenta Evagraf, 2002); M. Sancho, La Madre Margarita María Maturana. Ángel de caridad, Bérriz, Ángeles de las Misiones, 1945; M.ª B. de Isasi (MMB), La espiritualidad misionera de la Madre Margarita López de Maturana a la Luz de la Teología, Bérriz, Ángeles de las Misiones, 1959; M.ª G. Borobio, La niña que cambió de nombre, Bérriz, Ángeles de las Misiones, 1960; M.ª S. Fernández-Arroyo, La vuelta al mundo de una monja, Madrid, PPC Marsiega, 1961; G. X. Vallejos, La madre Maturana, Bilbao, Gráficas Ellacuría, 1962; P. M. Lamet, La buena noticia de Margarita, Madrid, Marsiega, 1977; Margarita María López de Maturana, Madrid, Mercedarias Misioneras de Bérriz, 1986; L. Fernández Vega (MMB) y M.ª C. López Ramos (CCV), Gemelas en Cuerpo y Alma, Madrid, Imprenta ARTEP, 1997; R. Martín Ribas et al., Sublime itinerario. Guía inédita religiosa, hagiográfica, histórica, artística de España, Madrid, Ramiro Martín Ribas, 2004 (2.ª ed. act.); I. Ávila (MMB) y T. Postigo (MMB), El porqué de una transformación, Madrid, Editorial Mercedarias Misioneras de Bérriz, 2006.
Miguel C. Vivancos Gómez, OSB y José Martín Brocos Fernández
