Herrera y Pedrosa, Teresa Margarita. La Coruña, 10.XI.1712 – 22.X.1791. Benefactora, fundadora en 1791 del Hospital de Caridad de su ciudad natal.
Hija de Domingo Rodríguez de Herrera y de María Antonia Pedrosa de los Santos, fue bautizada en la parroquia de San Jorge. Sus abuelos, Blas Rodríguez y Antonio Pedrosa, ocuparon cargos importantes en las cofradías religiosas de mayor prestigio de La Coruña.
Los datos conocidos sobre su vida son escasos. Proceden de los testamentos de su madre, de las escrituras de partijas, codicilos y contratos que la mencionan y de los Libros de Acuerdos de la Congregación del Divino Espíritu Santo. De origen humilde y huérfana de padre desde la infancia, permaneció veinticuatro años fuera de su hogar “ganando la vida con su trabajo y habilidades” para ayudar a su madre y a sus nueve hermanos, siete de los cuales fallecieron antes de la adolescencia. Regresó para atender a su madre hasta su muerte, acaecida el 12 de enero de 1755. A partir de ese hecho, asumió el cuidado y tutela de su hermana María Josefa, disminuida psíquica. Dedicó su vida al ejercicio de la caridad y las prácticas de devoción. En su tiempo, fue conocida como Teresa dos demos, quizá por su costumbre de recorrer de rodillas la distancia que mediaba entre su casa y la iglesia de San Nicolás, a la que acudía diariamente a rezar. Su fragilidad física —consta que “era lisiada y achacosa”— y su nula preparación intelectual —era iletrada— no le impidieron llevar el proceso que culminó, al final de sus días, con la fundación del Hospital de Caridad.
La muerte de su madre (1755), quien había recibido tres años antes una significativa herencia de su hermana María Pascuala Pedrosa, le permitió sentar las bases de su proyecto benéfico. Uno de los bienes que de esta última procedía era la “casa del Patín”, posteriormente acondicionada y restaurada. En sus bajos y bodega estableció el Hospitalillo de Dios. En él llegó a acoger hasta a catorce mujeres “pobres y enfermas” que recibían cama, comida y una precaria asistencia hospitalaria. En 1777, ante la falta de recursos para sostener este establecimiento, solicitó permiso al Ayuntamiento para pedir limosna por las calles. También recibió el reconocimiento a su labor por el Arzobispado de Santiago de Compostela, quien concedió además ochenta días de indulgencia “a quienes colaboren con esta piadosa obra”.
Según Bernardo del Río, la ciudad contaba con unas dos mil seiscientas familias pero había, a mayores, un censo importante de mendigos —“con frecuencia se detectaban defunciones [...] en la vía pública y en las puertas de las iglesias”— que llegaban atraídos por el auge económico generado en torno a dos concesiones de Carlos III: los Correos Marítimos con América (1764) y la creación del Consulado Marítimo y Terrestre (1785).
Para hacer frente a estas necesidades, La Coruña sólo disponía del Hospital del Buen Suceso, insuficiente por capacidad, limitados recursos y pésima asistencia hospitalaria. Ante esta situación, y mediante escritura pública, Teresa Herrera decidió hacer donación de sus bienes y los de su hermana María Josefa —de la que era su representante legal— a la Congregación del Divino Espíritu Santo para que, tras la muerte de ambas, se fundase un hospital de nueva obra. La Congregación aceptó la donación (22 de noviembre de 1789), pero la Junta de Caridad establecida al efecto vio oportuno el inicio inmediato de los trámites ante el Rey.
Por Real Orden de 20 de marzo de 1790, Carlos IV concedió el permiso de fundación y determinó el emplazamiento, especificando que “por tratarse de un terreno militar, en la zona de fortificaciones se reserva el derecho de demoler la obra en caso de necesidad”.
Mediante Real Orden posterior se obtuvo la licencia de construir un “hospital que contenga pieza para partos secretos e inclusa para recebir niños expósitos”. Días después los presos de la cárcel iniciaron la excavación del terreno “por ser de roca viva” y se consiguió la autorización “para proveerse en las dehesas reales de Ferrol de abundante arboleda para utilizar en la obra del edificio”.
El 14 de junio de 1791, en un acto solemne y con gran entusiasmo de la ciudad, se procedió a la colocación de la primera piedra. Teresa Herrera asistió entre el público alejada de los actos de protocolo. Falleció cuatro meses después, el 22 de octubre de 1791. Sus restos reposan en la capilla de la Congregación del Divino Espíritu Santo, situada en la parroquia de San Nicolás.
El Hospital de Caridad se inauguró en 1794 y mantuvo su actividad hasta 1956. Su labor fue muy beneficiosa para La Coruña y su entorno. Destaca su participación en la expedición Balmis (1803-1806), portadora de la vacuna antivariólica a América, China y Filipinas —primera campaña sanitaria de rango internacional que dio la vuelta al mundo—. A ella contribuyó la Casa de Expósitos, con dieciocho de los veintidós niños que portaron la vacuna “brazo a brazo”, acompañados de la rectora de la institución encargada de su cuidado durante la travesía.
La figura de Teresa Herrera permanece en la memoria histórica de La Coruña. En 1844, la Junta de Beneficencia de la ciudad colocó una placa conmemorativa sobre el portón de entrada del Hospital de Caridad, reconociéndola como fundadora. En 1876 se dio su nombre a una nueva calle en la zona del ensanche coruñés. El 18 de marzo de 1946, en plena posguerra, el Ayuntamiento, para hacer frente a los servicios sociales de la ciudad, creó el trofeo de fútbol Teresa Herrera, el más antiguo de los que se celebran en España en la actualidad. Finalmente, cuando el 18 de julio de 1985 se inauguró el actual Hospital Materno-Infantil —integrado en el Complejo Hospitalario Juan Canalejo— también se le dio su nombre.
Fuentes y bibl.: Archivo Congregación del Espíritu Santo (La Coruña), Libro 4.º de Acuerdos de la Congregación, fols. 155v.-167v.; 191v.-192v., 201-202v.; 203- 204; 204r.-v. Libro 5.º de Acuerdos de la Congregación, fols. 3-8v.; 16v.-29v.; Archivo Diocesano de Santiago de Compostela, Parroquia de San Jorge, La Coruña, Bautizados, libro. 4.º, fol. 409v.; Parroquia de San Nicolás, La Coruña, Difuntos, libro 5.º, fol. 27; Congregaciones, leg. 411; Archivo Histórico Nacional, Consejos, leg. 1058 (18), doc. 27 de febrero de 1788; Archivo Municipal, La Coruña, Donaciones, caja. 2, docs. 23 de octubre de 1777, 9 de mayo de 1970; Acuerdos, 1789, fols. 203-211; Hospital de Caridad, Correspondencia, 17 de abril de 1791; 31 de julio de 1791; Beneficencia Expediente para perpetuar la memoria de los bienhechores, 20 de abril de 1844; Archivo Notarial, La Coruña, Protocolos 3749, fols. 1-2; 3793 (99); 3939, fols. 9-15; 5295 (34); Biblioteca de la Casa Consulado, La Coruña, Libro 1.º Acuerdos del Real Consulado, fols. 155 y 164.
N. Correal y Freire de Andrade, Teresa Herrera, La Coruña, Imprenta Ferrer, 1909; A. Mejide Pardo, “Se cumplen dos siglos de la fundación del Hospital de Caridad por Teresa Herrera...”, en La Coruña, paraíso del turismo, La Coruña, 1991; Medio siglo del trofeo Teresa Herrera, La Coruña, Ayuntamiento- Banco Pastor, 1996, págs. 3-8.
Amparo Hernández Segura
