Nació en la barcelonesa calle Mayor de Gracia en el seno de una familia oriunda de Lérida, provincia en la que tenía posesiones, concretamente en Vallfogona de Balaguer. Cursó estudios superiores de Derecho en la Universidad de Barcelona, donde obtuvo la licenciatura en 1909. Recién licenciado, en 1895, defendió en los tribunales y en los foros públicos el honor del cura-poeta de Folgueroles Jacint Verdaguer, que había sido víctima de una implacable persecución en la que se ponía en tela de juicio su capacidad de obrar. Movilizó influencias y apoyos, así como reunió los mejores psiquiatras de Barcelona para que examinaran este caso. Desde entonces se selló una gran amistad entre ambos que convirtió a Moles en su consejero y albacea testamentario. El poeta Josep Carner dijo de Moles que fue para Verdaguer el buen samaritano de la parábola de Jesús. Aquí empezó una brillante carrera de abogado y jurisconsulto. Intervino en procesos célebres, como el que incriminaba a los nacionalistas radicales implicados en el atentado a un convoy real en su paso por los túneles del Garraf (1925), y en el que defendió a la familia del futuro presidente de la Generalitat de Cataluña, Francesc Macià, de la confiscación de su patrimonio, en plena dictadura de Primo de Rivera. Como decano del Colegio de Abogados de Barcelona, actuó de forma decidida en favor del gran número de detenidos presos entre la noche del 6 y la madrugada del 7 de octubre de 1934. También se destacó por su faceta de periodista que ejerció como director del periódico republicano de Barcelona La Publicidad. [...]