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Francisco Castro Pascual

Biografía

Castro Pascual, Francisco de. Benavente (Zamora), 31.V.1871 – 18.VIII.1949. Farmacéutico.

Primer catedrático de Microbiología de la Universidad española en la Facultad de Farmacia de Madrid.

Académico de número de la Real Academia de Medicina.

Cursó la enseñanza secundaria en el Instituto de Zamora, obteniendo el grado de bachiller el 28 de junio de 1887. Ese año comienza los estudios de Derecho en Valladolid que abandona en 1890 por los de Farmacia en la Universidad Central de Madrid, licenciándose el 3 de julio de 1895. Al curso siguiente comienza los estudios de doctorado en esta universidad y debido a su vocación por la Bacteriología trabaja en el Instituto microbiológico de seroterapia y antirrábico, que acababa de ser fundado por el doctor Vicente Llorente Matos, donde en 1901 era jefe del laboratorio.

Allí trabajó en el diagnóstico y tratamiento de la rabia, difteria y tuberculosis. En 1900 pertenecía a la Comisión Científica del Colegio de Farmacéuticos de Madrid, donde, en 1901 impartió una serie de cuatro conferencias sobre: “Microbiología y sueroterapia en sus relaciones con la profesión farmacéutica” y que fueron el primer acto académico celebrado en España sobre esta materia. Para completar su formación, en octubre de ese año, realiza en el Instituto Pasteur de París un curso de Microbiología aplicada, asistiendo también a diferentes secciones de Bacteriología del Laboratorio Municipal de París. De vuelta a España, el 10 de septiembre de 1902, es nombrado auxiliar interino de la cátedra de Microbiología de la Facultad de Farmacia de la Universidad Central de Madrid, que había sido creada en julio de 1900 para los estudios de doctorado. Obtiene el grado de doctor en Farmacia con premio extraordinario, el 15 de noviembre de 1902, con la tesis titulada “Estudio de los venenos microbianos y en especial del diftérico”.

Casado con Carolina Núñez no tuvo descendencia.

Nuevamente en 1904, como alumno particular, y en 1906 y 1907, pensionado por el Gobierno español, realiza estancias en el Instituto Pasteur de París y de Lille, siendo también asistente en el Hospital de San Luis de París. En Francia trabajó con microbiólogos de gran prestigio, como Roux, Metchnikoff, Calmette, Noguchi, Sabouraud, Sergent y Pinoy. Entre los trabajos científicos realizados destacan los estudios sobre tripanosómidos, rabia, fiebre amarilla, fiebre de Malta, tiñas y sueroterapia. Visitó también otros centros científicos europeos como el Instituto Koch de Berlín, donde asistió a las clases del doctor Wasserman y la Universidad de Dublín.

En 1908 es nombrado jefe de la sección de rabia del Instituto Municipal de Higiene de Madrid que dirige el doctor César Chicote del Riego, cargo que ocupó hasta 1914. El 22 de mayo de 1910 obtiene en reñidas oposiciones la cátedra de “Microbiología, técnica bacteriológica y preparación de sueros medicinales” de la Facultad de Farmacia de la Universidad Central, convirtiéndose así en el primer catedrático de esta disciplina en España. El resto de su vida científica lo dedicó a difundir estas enseñanzas creando una escuela con numerosos discípulos de reconocido prestigio como lo demuestran las cincuenta y cuatro tesis doctorales que se presentaron en esta cátedra durante su permanencia en ella. Hay que destacar la de la primera mujer doctora en Farmacia, Zoe Rosinach, leída en 1920, titulada “Bacilos diftéricos y pseudodiftéricos”.

También demostró una gran capacidad por las tareas administrativas ocupando los cargos de secretario de la Facultad de Farmacia de 1913-1915 y secretario general de la universidad durante doce años, de 1915- 1927, siendo rector José Rodríguez Carracido. Durante este tiempo introdujo importantes innovaciones, como la ficha con la historia académica de cada alumno realizada por la secretaría de las facultades y la tarjeta de identidad escolar, creada por Real Decreto en 1914. En 1931 y 1935 fue nombrado representante de la Facultad de Farmacia en la Junta de Gobierno de la Universidad.

Ingresó como académico de número en la Real Academia de Medicina el 14 de octubre de 1923 con un discurso sobre antígenos y anticuerpos de las enfermedades tóxico-infecciosas. En ella desarrolló una intensa labor científica y fue presidente de la sección de Terapéutica. A lo largo de su vida profesional intervino en diversos Congresos, como el XIV Congreso Internacional de Medicina (Madrid, 1903), V Congreso Internacional de Ciencias (Valladolid, 1915), I Congreso Nacional de Medicina (Madrid, 1919), II Congreso Nacional de Ciencias Médicas (Sevilla, 1924). También fue un prolífico conferenciante pronunciando numerosas conferencias en diversos ámbitos: “Avariosis, neiseriosis y tuberculosis” (Facultad de Derecho, 1919), “Microbiología aplicada a la Farmacia” (Colegio de Farmacéuticos, 1922), “Neurosis postcatastrófica y crisis universitaria” (Universidad Central, 1932).

En 1937, durante la guerra civil, pasa a la condición de “jubilado forzoso” por lo que vuelve a su villa natal, donde en el Centro de Higiene preparó las vacunas antitíficas que se administraban al ejército y la población civil. En el curso 1939-1940 se incorporó a la cátedra en Madrid jubilándose en 1941. Desde entonces vivió en Benavente, donde falleció en 1949.

 

Obras de ~: Estudio de los venenos microbianos y en especial del diftérico, tesis doctoral, Facultad de Farmacia, Imprenta Corrales, Madrid, 1903; “El veneno diftérico”, en Farmacia Española, XXXV (1903), págs. 705-737; Orientación al conocimiento de antígenos y anticuerpos de las enfermedades tóxicoinfecciosas, discurso, Real Academia Nacional de Medicina, Artes Gráficas Plus Ultra, Madrid, 1923; Neurosis postcatastrófica y crisis universitaria, discurso Universidad Central, Imprenta Colonial, Madrid, 1932.

 

Bibl.: Redacción, “Nuevo catedrático”, en La Farmacia Moderna, n.º 12 (1910), pág. 167; R. Roldán y Guerrero, Diccionario Biográfico y Bibliográfico de Autores Españoles, t. I, Madrid, Imprenta Valera, 1958, págs. 642-647; M. A. Mosso Romeo, Un siglo de Microbiología en la Universidad Española, Madrid, Universidad Complutense, 2000, págs. 65-94.

 

María del Carmen de la Rosa Jorge