Martínez de Hervás y Madrid, José. Marqués de La Almenara (I). Ugíjar (Granada), 12.VIII.1760 – Madrid, 3.IX.1830. Banquero, diputado y ministro.
Contrajo matrimonio el 15 de marzo de 1782 con Lucía Rita Delgado Ruiz, natural de Ágreda, que debió de fallecer prematuramente, pues consta que José contrajo segundas nupcias, en París, en 1803, con Louise Catherine Debat de Longuerue.
Se forjó buena reputación como financiero en Madrid, acreditada en 1788, ocupando el puesto de administrador del Banco de San Carlos, tras lo cual se trasladó a París hacia 1789, siendo aún joven, pues no había cumplido los treinta años, como agente del mismo banco, en el que se le tuvo como comisario (1792) y vocal (1794), y ejerciendo también como banquero por cuenta propia. Entre 1795 y 1799 ejerció de comisionado de la Caja de Amortización en París; desempeñando paralelamente varias comisiones relacionadas con la Paz de Basilea. El 26 de junio de 1797 recibió los honores de ministro de la Junta de Comercio y Moneda y el 20 de diciembre de 1798 los de consejero del Consejo de Hacienda.
También en esas fechas, desde el 6 de diciembre de 1798 desempeñó el puesto de director de la factoría del Banco de San Carlos en París, hasta su suspensión de pagos el 17 de diciembre de 1805.
Desde el 9 de octubre de 1799, de regreso en Madrid, fue consejero supernumerario del Consejo de Hacienda (sin sueldo), comisionado de la Tesorería General en el Consejo de Hacienda (1801-1806), socio de la Compañía de las Lanas, para la reventa de lanas finas de España en Francia; quiebra personal y, un mes después, quiebra de la Compañía.
El 2 de diciembre de 1801 ingresó como caballero pensionista en la Orden de Carlos III.
Parece ser que parte de su éxito se debió a su amistad con Godoy. Carlos IV lo nombró cónsul y encargado de negocios de España en Francia en 1803 mientras se sustanciaba el proceso judicial en Madrid por la suspensión de pagos de su casa comercial.
En París secundó al embajador Azara, a quien sustituyó en el cargo a su muerte en 1804, coincidiendo con la proclamación del Imperio Napoleónico. Se integró plenamente en la alta sociedad del París bonapartista, casando su hija con el mariscal Duroc y, en 1805, recibió el título nobiliario de marqués de La Almenara, que no debe confundirse con el homónimo que ostenta el linaje de los Mendoza, con cuya familia no tuvo Martínez de Hervás ninguna vinculación.
El 17 de diciembre de ese mismo año de 1805 fue nombrado ministro plenipotenciario de España en Estambul, adonde llegó el 7 de diciembre de 1806. El año 1807 recibió la Gran Banda del Creciente Otomano, por sus méritos durante la defensa de Estambul frente a la escuadra británica, e ingresó como caballero en la Orden del Santo Sepulcro, por su acción contra el bajá de Damasco, que actuaba en esos momentos contra los Santos Lugares.
En agosto de 1808, una vez producidos los graves acontecimientos que desde primavera se generaron con motivo de la presencia en España de las tropas bonapartistas, negoció desde Estambul con la Junta de Aranjuez su vuelta a España y comenzó su carrera en la administración josefina. El 8 de marzo de 1809 fue nombrado consejero del Consejo de Estado, donde ocupó la presidencia de la Sección de Hacienda, y desde noviembre de 1809 hasta 1811 fue director de la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Madrid. El 22 de noviembre de 1809 José I lo hizo comisario regio en las provincias de Castilla la Nueva, Ávila y Salamanca.
Desde el 20 de diciembre (Gaceta del 21) de 1809 al 27 de junio de 1813, en que ya era irreversible la disolución de la administración josefina, ocupó el puesto de ministro del Interior que a juicio de Mercader Riba, supuso una de las mayores innovaciones introducidas en la Administración española por el intruso José I. Martínez de Hervás encargó a Francisco Martínez Marina la creación de una Junta de Instrucción Pública y Educación.
Desde el 5 de abril al 15 de mayo de 1810 fue ministro interino de Negocios Extranjeros, por ausencia del titular, y, desde el 1 de febrero al 26 de abril de 1810, ministro de Hacienda para los reinos de Andalucía, coincidiendo con la visita de José, a quien acompañaba como ministro de Jornada. Durante este viaje de José Bonaparte por Andalucía, Martínez de Hervás hizo, como queda consignado, de ministro de Hacienda para aquellos reinos, mientras Cabarrús, titular del departamento, quedó en Madrid. Almenara designó durante ese viaje a un personaje de dudosa catadura, Frédéric Quilliet, para escoger obras de arte con destino a cierto museo que se decía que se pensaba montar, siendo la realidad de los hechos que, fruto de aquella gestión, se produjo un auténtico saqueo artístico.
El 9 de enero de 1810 se le condecoró con la Orden Real de España, popularmente llamada La Berenjena, y ese año fue enviado a Francia por José I para tratar de evitar que Napoleón incorporase a su imperio las provincias de Burgos y Valladolid, como ya había hecho con gran parte del norte de la Península. Del fracaso de esta gestión dio cuenta el conde de Toreno, quien se hizo eco de las vanas esperanzas de los españoles de recibir Portugal, o parte de este reino, a cambió de la amputación de estas regiones españolas.
Entre julio y noviembre de 1811, comisario regio de las provincias de Toledo y La Mancha, tuvo la difícil misión de contener los excesos de las tropas de Marmont.
Se mantuvo fiel a José I en el exilio, marchando con el séquito del Rey depuesto a Francia, instalándose en Normandía y, posteriormente, en Viena, aunque volvió a España en 1820 con el inicio del Trienio Liberal, intentando con escaso éxito su difícil defensa, publicándose en 1821 la Defensa del Marqués de Almenara, con el testimonio favorable de Félix José Reinoso. Fue consejero de Hacienda y de Comercio y en ese período escribió Consideraciones sobre el estado actual de España (1822). En 1823 ocupó el cargo de administrador del Banco de San Carlos.
En 1826 el ex rey José escribió desde Estados Unidos a Gonzalo O’Farrill mandándole recuerdos para Almenara, lo que demuestra que, acabado el Trienio Liberal, aún mantenía trato afectuoso con el entramado josefino.
Es autor, además, de las obras políticas escritas en su propia defensa en la quiebra de su banca, y de descargo por su actuación política afracesada, publicadas en el Trienio Liberal, del Elogio del [...] Señor D. Antonio Ricardos Carrillo de Albornoz, Capitán General de los reales exercitos y del Principado de Cataluña [...] leído en la Real Sociedad de Amigos del País de Madrid en la junta de 19 de septiembre de 1795.
El marqués afrancesado de Almenara falleció en Madrid, el 3 de septiembre de 1830.
Obras de ~: Elogio del [...] Señor D. Antonio Ricardos Carrillo de Albornoz, Capitán General de los reales exercitos y del Principado de Cataluña [...] leído en la Real Sociedad de Amigos del País de Madrid en la junta de 19 de septiembre de 1795 [...], Madrid, Imprenta de Sancha, 1795; El Marqués de la Almenara a su defensor y a sus jueces en la causa intentada contra él por el agente de la Hacienda pública en 1813 [...], Madrid, Imprenta Tomás Alban, 1821.
Fuentes y bibl.: Archivo del Congreso de los Diputados, Serie documentación electoral, 3 n.º 1 y 5 n.º 17.
“Un Documento histórico”, en La Ilustración Española y Americana, 22 de noviembre de 1895, pág. 295; M. D. Antigüedad del Castillo Olivares, “Un pleito artístico: Granada y el Museo Josefino”, en Revista de la Facultad de Geografía e Historia (Granada), n.º 2 (1988), págs. 259-285; J. R. Bertomeu Sánchez y A. García Beldar, “Tres proyectos de creación de instituciones científicas durante el reinado de José I”, en J. A. Armillas Vicente (coord.), La Guerra de la Independencia, Estudios, vol. I, Zaragoza, 2001, págs. 301-327; J. de la Mano, Goya Intruso: Arte y política en el reinado de José I (1808-1813), en http://www.josedelamano.com/pages/ goyaintruso.html; Ebrisa Online Gran Enciclopedia Salvat <http://www.ebrisa.com/portalc/articulo-S/517164> [31de octubre de 2008].
José Luis Sampedro Escolar