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Pedro Pablo Alcántara de Silva Fernández de Híjar y Abarca de Bolea

Biografía

Silva Fernández de Híjar y Abarca de Bolea, Pedro Pablo Alcántara de. Duque de Híjar (IX). Villarrubia de los Ojos del Guadiana (Ciudad Real), 25.XI.1741 – Madrid, 23.II.1808. Presidente del Consejo de Órdenes, consejero de Estado.

Fue el único hijo de Joaquín Diego de Silva Fernández de Híjar y Portocarrero Funes de Villalpando, VIII duque de Híjar, y de María Engracia Abarca de Bolea y Pons de Mendoza Ximénez de Urrea y Bermúdez de Castro. Sucedió como IX duque de Híjar, X de Lécera y IX de Aliaga, IX conde de Vallfogona, VIII de Guimerá, XIII de Salinas, XVI de Ribadeo, X de Palma del Río, XI de Aranda, VI marqués de Orani, X de Almenara y XIII de Montesclaros, XX vizconde de Evol, XX de Canet, XVIII de Illa y VIII de Alquerforadat, además fue príncipe de la Portella (Noticias por mayor de las principales ascendencias del Ex[celentísi] mo S[eño]r D[o]n pedro de Alcántara, IX duque de Híjar, por sus apellidos de Silva y Fernández de Híjar para la inteligencia del árbol que he formado” y “El Ex[celentísi]mo Señor Duque y señor de Híjar, tiene los Estados, títulos y apellidos sig[uien]tes”).

El 16 de julio de 1761 contrajo matrimonio (previas capitulaciones matrimoniales, otorgadas en Madrid, el 13 de noviembre de 1760), con Rafaela Rafaela de Palafox Rebolledo y Croy de Havré Lante della Rovere (Ariza, 12 de julio de 1744 – Madrid, 11 de junio de 1777), que está enterrada en la bóveda del convento de San Agustín de Religiosos Recoletos, junto con sus hijos Francisco de Paula, Espíritu Bonifacio y Micaela y su nieto Alejandro Anastasio de Silva y Palafox, hijo de Agustín Pedro y M.ª Fernanda (Depósito del cadáver de la Exc[elentísi]ma S[eño]ra D[oñ]a Rafaela de Palafox..., en la bóveda del convento de San Agustín de Religiosos Recoletos).

Fue hija de Joaquín Antonio Palafox Rebolledo Ximénez de Urrea y Mexía Centurión, XV señor y VI marqués de Ariza y Ana Croy de Havré (fallecida en Madrid, 4 de diciembre de 1778), su segunda mujer. Tuvieron los siguientes hijos: M.ª Magdalena (Madrid, 28 de noviembre de 1765 – Cuenca, 8 de noviembre de 1770); M.ª del Pilar (Madrid, 19 de noviembre de 1766 – 28 de marzo de 1835), casada el 10 de abril de 1784, con su tío abuelo, viudo, Pedro Pablo Abarca de Bolea Ximénez de Urrea y Pons de Mendoza (Siétamo, 1 de agosto de 1719 – Épila, I de enero de 1798), X conde de Aranda, no tuvieron sucesión. Viuda volvió a casarse, el 18 de noviembre de 1802, con Francisco Ramón de Espés Fernández de Córdoba (fallecido en Madrid el 30 de noviembre de 1841), I duque de Alagón, también sin sucesión; Francisco de Paula Policarpo (Madrid, 26 de enero de 1768 – Madrid, 4 de noviembre de 1772); Espíritu Bonifacio (Madrid, 14 de mayo de 1769 – Madrid, 16 de abril de 1773; Micaela Gerónima María Juana (Madrid, 29 de septiembre de 1774 – Madrid, 30 de septiembre de 1774); M.ª Teresa (nacida en Madrid el 10 de marzo de 1772) que fue la mujer, desde el 24 de enero de 1790, de Jacobo Fitz-James Stuart y Stölberg- Gedern (París, 23 de febrero de 1773 – Madrid, 3 de abril de 1794), V duque de Berwick, de Liria y Jérica, XII de Veragua y poseedor de otros muchos títulos nobiliarios, tuvieron sucesión que perdura hasta la actualidad; Agustín Pedro (Madrid, 14 de abril de 1773 – 12 de diciembre de 1817), fue el X duque de Híjar y marido de M.ª Fernanda Teresa Francisca Josefa Fitz-James Stuart y Stolberg-Gedern y José Rafael, XII duque de Híjar.

Persona culta y refinada, se preocupó por incrementar y conservar la pinacoteca que sus antepasados habían ido reuniendo a lo largo de varias generaciones.

Así, ordenó que se trasladasen, el 28 de abril de 1773, algunas pinturas y retratos desde el palacio familiar de la villa de Híjar a su residencia de Madrid. Sabiendo el deterioro de alguna de las obras trasladadas, tanto por su mal estado de conservación (“Correspondencia”); como por las deficiencias del transporte. El 28 de septiembre de 1774, los IX duques de Híjar adquirieron un palacio, cuya fachada principal daba a la Carrera de San Jerónimo, al lado de las actuales Cortes Españolas o del Congreso, que remodelaron en 1780, y otras propiedades a Pablo Spínola Doria, IV marqués de los Balbases.

No desatendió sus obligaciones para con el ducado de Híjar, así en 1763 Joaquín Cólera, maestro alarife de Alcañiz, comenzó a reparar la iglesia de La Puebla de Híjar (“Correspondencia entre Joaquín Cólera, maestro de obras, y José Faure y Otto, administrador de los estados del duque de Híjar en Aragón, enviándole la relación de las cuentas de las obras de la iglesia parroquial de La Puebla de Híjar”); en 1777 se construyó la iglesia parroquial de Urrea de Gaén y en este mismo año se amplió la de Vinaceite como si fuese de nueva planta (“Carta del duque de Híjar a José Faure y Otto, administrador de los estados del duque de Híjar en Aragón, sobre el traslado de las iglesias de Urrea de Gaén y Vinaceite mientras duren las obras”), estas dos últimas bajo la dirección de Agustín Sanz, cumpliendo, por lo tanto, con el objeto del cobro del diezmo, es decir, el mantenimiento de culto y sus ministros. Tuvo problemas con los pueblos del Ducado por el pago de los derechos señoriales, como, por ejemplo, con el Ayuntamiento de Híjar por la dominicatura y con el Cabildo Metropolitano de Zaragoza por las tierras diezmeras de dicho lugar, llegando en 1788 a una concordia que aprobó Carlos III por una Real Provisión (“Real Provisión de Carlos III por la que se aprueba la escritura de transacción y convenio entre el duque de Híjar y el Cabildo de Zaragoza, sobre pertenencia y percepción de diezmos en Híjar”) y los estados de Híjar y Belchite fueron arrendados a una compañía catalana en un intento de la Casa Ducal de mejorar su situación económica.

Pedro de Alcántara en 1766 litigó por la sucesión del condado de Alba de Aliste (“Memorial ajustado hecho de orden del consejo, con citación de las partes del pleyto que en el se sigue entre...”). En 1772 fundó un mayorazgo para los segundogénitos de la Casa de Híjar (“Mayorazgo para los segundos de la Casa de Híjar...”). El 26 de abril de 1780 fue nombrado por Carlos III caballero de la insigne Orden del Toisón de Oro y también tuvo la Gran Cruz de la Real y Distinguida Orden de Carlos III. En su calidad de Grande de España, fue consejero de Estado desde 1795 hasta 1808, fecha de su muerte, en la cual era también presidente del Consejo Real de las Órdenes y dentro del mismo presidía la Sala de Gobierno y la Junta de la Caballería de las Órdenes.

Fallecido en Madrid el 23 de febrero de 1808, le sucedió su hijo Agustín Pedro, X duque de Híjar.

 

Fuentes y bibl.: Archivo Histórico Provincial de Zaragoza. Fondo Híjar, sala IV, leg. 282/2, doc. 34: “Noticias por mayor de las principales ascendencias del Ex[celentísi]mo S[eño]r D[o]n pedro de Alcántara, IX duque de Híjar, por sus apellidos de Silva y Fernández de Híjar para la inteligencia del árbol que he formado” y doc. 35. “El Ex[celentísi]mo Señor Duque y señor de Híjar, tiene los Estados, títulos y apellidos sig[uien] tes”; Sala I, leg. 128/1, doc. 10-6, “Depósito del cadáver de la Exc[elentísi]ma S[eño]ra D[oñ]a Rafaela de Palafox..., en la bóveda del convento de San Agustín de Religiosos Recoletos”; Sala IV, leg. 282/3, “Memorial ajustado hecho de orden del consejo, con citación de las partes del pleyto que en el se sigue entre...”; Sala I, leg. 465, doc. 1-3, “Correspondencia entre Joaquín Cólera, amestro de obras, y José Faure y Otto, administrador de los estados del duque de Híjar en Aragón, enviándole la relación de las cuentas de las obras de la iglesia parroquial de La Puebla de Híjar”; Sala III, leg. 151, doc. 6-9, “Carta del duque de Híjar a José Faure y Otto, administrador de los estados del duque de Híjar en Aragón, sobre el traslado de las iglesias de Urrea de Gaén y Vinaceite mientras duren las obras”; Sala I, leg. 259, doc. 16, “Real Provisión de Carlos III por la que se aprueba la escritura de transacción y convenio entre el duque de Híjar y el Cabildo de Zaragoza, sobre pertenencia y percepción de diezmos en Híjar”; Sala V, leg.151, doc. 2, “Mayorazgo para los segundos de la Casa de Híjar...”; Sala II, leg. 147, docs. 9-1,”Correspondencia”.

F. Barrios, El Consejo de Estado de la Monarquía Española (1521-1812), Madrid, Consejo de Estado, 1984; M.ª J. Casaus Ballester, Archivo ducal de Híjar. Catálogo de los fondos del Antiguo Ducado de Híjar (1268-1919), Valencia, Diputación General de Aragón e Instituto de Estudios Turolenses, 1997; “La administración del Ducado de Híjar (siglos xv-xix)”, en Revista de Historia Jerónimo Zurita (Institución Fernando el Católico), 74 (1999), págs. 247-276; “Fuentes documentales para el estudio del Condado de Aranda”, en E. Serrano Martín y E. Sarasa Sánchez (coords.) y J. A. Ferrer Benimeli (dir.), El Conde de Aranda y su tiempo, vol. II, Zaragoza, Institución Fernando el Católico, 2000, págs. 7-62; A. de Ceballos-Escalera y Gila, marqués de la Floresta, La Insigne Orden del Toisón de Oro, Madrid, Fundación Carlos III - Palafox y Pezuela, 2000; M.ª J. Casaus Ballester, “Acumulación de posesiones y títulos nobiliarios de la Casa de Híjar (Teruel). Siglos xiii-xviii”, en Anales de la Real Academia Matritense de heráldica y genealogía. Homenaje a Don Faustino Menéndez Pidal, vol. I (2004), págs. 213-250 y págs. 333-359; “Relaciones familiares nobiliarias: el entronque de la Casa de Silva con la de Híjar (siglo xvii.)”, en J. L. Rodríguez Sábada (coord.), La onomástica en Navarra y su relación con la de España. Actas de las Primeras Jornadas de Onomástica, Pamplona, Sociedad de Estudios Históricos de Navarra-Universidad Pública de Navarra, 2003 (col. Filología, 3), págs. 367-378.

 

María José Casaus Ballester