Cornelius Balbus, Lucius. Balbo el Mayor. L(ucius) Cornelius L(uci) f(ilius) Clustumina (tribus) Balbus. Cádiz (antes Gades), 95 a. C. – ?, 32 a. C post. Senador hispano-romano.
Amigo y colaborador de César, este gaditano de ascendencia fenicia (Cicerón, En defensa de Balbo, 5, 6, 43) jugó un papel clave en la Roma de finales de la República. La familia poseía una gran fortuna (Cicerón, En defensa de Balbo, 56) que pudo conseguir por el comercio marítimo (Cicerón, En defensa de Balbo, 5) y quizá de explotaciones agrícolas y mineras. Luchó en el ejército romano durante la guerra sertoriana a las órdenes de Metelo en el 78 y 77 a. C. y con Memmio en el 76-75, pasándose ese año al bando de Pompeyo (Cicerón, En defensa de Balbo, 5-6). Amigo de Marco Terencio Varrón, recibió de él enseñanzas por aquellos años (Cicerón, Cartas a familiares, 9, 6, 5).
El año 72 a. C. en aplicación de la ley Gelia-Cornelia, recibió de Pompeyo la ciudadanía romana junto a otros miembros de su familia por su contribución en la guerra sertoriana; sin embargo, el año 56 a. C. sería acusado de haber recibido irregularmente ese privilegio y fue defendido por Cicerón (Cicerón, En defensa de Balbo).
Conoció a César cuando éste era cuestor de la Hispania Ulterior el año 68 a. C. y se convirtió en su principal aliado en la Península Ibérica (Cicerón, En defensa de Balbo, 17). Admitido en el orden ecuestre, fue praefectus fabrum durante la pretura de César del año 62 a. C. y le acompañó a la Península durante el gobierno cesariano de la Hispania Ulterior de los años 61-60 a. C., formando parte de su estado mayor y participando seguramente en las campañas contra lusitanos y galaicos (Cicerón, En defensa de Balbo, 63); convertido ya en persona de confianza de César (Cicerón, Cartas a Ático, 2, 3, 3; Cartas a familiares, 7, 4, 2 y 8, 11, 2), el año 58 a. C. fue nuevamente praefectus fabrum en la campaña de la Galia y desde el 56 a. C. alternó la permanencia en Roma con los viajes a la Galia, siendo parte activa del círculo político cesariano que gobernó Roma. Durante la guerra civil (49-47 a. C.) Balbo el Mayor participó en la búsqueda de aliados para César y trató de atraer a su lado a Cicerón (Cicerón, Cartas a Ático). A la muerte de César el 44 a. C. abrazó la causa de Octaviano y accedió al consulado el año 40 a. C., siendo el primer extranjero en alcanzar tal honor.
El círculo de amistades y alianzas que tejió en Roma le garantizaron una sólida posición política y una amplia influencia. Fue amigo de Crasso (Cicerón, En defensa de Balbo, 1), Pompeyo le regaló el solar de su casa de Tusculum (Cicerón, Cartas a Ático, 7, 7 y 9, 13) y el historiador Teófanes de Mitilene le nombró heredero (Cicerón, Cartas a Ático, 7, 7, 6). Fue patrono de Gades y Capua.
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Juan Manuel Abascal
