Porcius Narbonensis, Marcus. M(arcus) Porcius M(arci) f(ilius) Gal(eria) Narbonensis. ¿Tarragona (antes Tarraco)?, m. s. I – p. s. II. Sacerdote de la provincia Hispania citerior y militar de rango ecuestre.
Aunque el nombre de Marcus Porcius Narbonensis podría hacer pensar en un origen al norte de los Pirineos, lo cierto es que su condición de sacerdote del culto imperial en la Hispania citerior y la ausencia de una indicación precisa de origen inducen a pensar que fue originario de la propia Tarraco. Por otra parte, en las inscripciones de Hispania se conocen otros nombres personales como Pompaelonensis o Valentinus, que también tienen resonancias toponímicas, pero que son sólo nombres personales y no indicaciones de origen. No se puede excluir, sin embargo, que algún antepasado de este personaje fuera originario de Narbo (Narbona) o de la provincia Narbonense y que de ello derivara este nombre personal.
Se carece de datos sobre la posible participación de Marcus Porcius Narbonensis en la administración local, por lo que hay que imaginar que su carrera se inició directamente con el ascenso al orden ecuestre y con los destinos que este rango le acarreó. El primero de ellos, probablemente a lo largo de la época flavia (69-96), fue el de tribuno militar en la legión XXII Deiotariana de Egipto; a continuación recibió el mando de una unidad auxiliar de caballería, el ala Thracum Herculana, estacionada en la provincia de Syria hasta la época de Marco Aurelio. Tras estos dos empleos regresó a Tarraco, donde asumió la prefectura de la ora maritima de la Hispania citerior, es decir, el mando de la flota que guarnecía la costa oriental de la Península Ibérica.
Su carrera culminó, probablemente, ya durante los reinados de Trajano (98-117) o Adriano (117-138), con el sacerdocio del culto al Emperador en la provincia Hispania citerior, una función de prestigio con sede también en Tarragona, para la que fue designado por la asamblea provincial (concilium provinciae) y que le valió ser recordado con una estatua en el foro superior de Tarraco.
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Géza Alföldy y Juan Manuel Abascal Palazón
