Este emperador norteafricano nació en la isla de Djerba, en el actual Túnez (Anónimo, Epítome de Caesaribus, 31, 1), en un momento que suele situarse en torno al año 207 atendiendo a la edad de su fallecimiento (id., 31, 3). Aunque algunas fuentes le atribuyen un origen oscuro (Eutropio, Breviario, 9, 6, 1), desempeñó puestos de responsabilidad correspondientes a una carrera senatorial, alcanzando incluso el consulado. Durante el reinado compartido por Treboniano Galo y Volusiano (251-253), Emiliano fue enviado a la frontera danubiana como gobernador de la provincia de Moesia (legatus Augusti pro praetor provinciae Moesiae Superioris). Desde esta responsabilidad, combatió a los godos que, rompiendo el pacto firmado con Treboniano Galo, amenazaban la frontera. Con su victoria, se ganó el favor de los soldados que luchaban a sus órdenes, que le aclamaron como imperator en el verano del 253 (julio o agosto). En el siglo iv, Aurelio Víctor criticaba la corrupción del ejército y lo vergonzoso de esta subida al trono, con el apoyo de hombres dados a “la molicie y la lascivia” (Aurelio Víctor, Epítome, 31, 1-2), que esperaban una recompensa más elevada de lo que las arcas del estado debían permitir. [...]