Pellico Paniagua, Ramón. Cangas de Onís (Asturias), 19.XI.1809 – Madrid, 25.IV.1876. Ingeniero de minas.
Después haber cursado Lógica, Metafísica, Filosofía Moral, Economía Política, Taquigrafía, Química Aplicada, Mineralogía, Dibujo Natural y Geométrico, se matriculó en 1829 en la Cátedra de Docimasia, de José Duro y Garcés, a expensas de la Dirección General de Minas, y habiendo aprobado el ingreso, fue nombrado el 29 de septiembre de 1830 alumno pensionado de la Academia de Minas de Almadén, pasando en prácticas a continuar sus estudios en las minas de Linares (Jaén) y de Río Tinto (Huelva), volviendo a Almadén en junio de 1834, en su primer destino profesional.
En 1840, siendo ya ingeniero segundo, fue nombrado inspector del distrito minero de Águilas, que comprendía la provincia de Murcia y parte de la de Almería. Trasladado el 30 de marzo de 1844 al distrito minero de Valencia, se le comisionó para informar acerca del criadero de cinabrio descubierto en San Martín, término de Usagre (Badajoz), su importancia y método de explotación. Aunque estaba nombrado profesor de la Escuela Especial de Minas se le comisionó para que terminara la “memoria geognóstica” y los planos mineros de la comarca de Lorca. En 25 de octubre de 1844 se le mandó regresar a Madrid, a ocupar la Cátedra que dejaba Ezquerra.
En 1852 se le comisionó para estudiar la importancia de los criaderos de carbón de León y Palencia.
Dos años después (el 27 de marzo de 1854) fue comisionado para estudiar la cuenca carbonífera de Espiel y Belmez. En septiembre de 1854 una nueva comisión fue para hacer un estudio geológico del Duero, el Guadiana, el Miño y el Tajo en territorio portugués, así como de sus salinas. En octubre de 1854 fue agregado a la comisión de ingenieros de caminos y al grupo nombrado por el Gobierno portugués para fijar el punto de encuentro y mejor trazado del futuro ferrocarril entre los dos Reinos. En 1855 asistió a la Exposición Universal de París como representante especial del Gobierno español.
Ya desde el 25 de octubre de 1844 había sido destinado a la Escuela Especial de Ingenieros de Minas en Madrid, donde profesó diversas asignaturas (Mecánica Aplicada, Construcción y Laboreo de Minas, Geología y Laboreo). Y en noviembre de 1860 fue nombrado director de dicha Escuela, cargo que desempeñó hasta diciembre de 1862, en que solicitó y obtuvo la jubilación, que se le concedió con honores de inspector general del Cuerpo. También fue vocal de la Comisión Nacional de Pesas y Medidas y consejero del Banco de España.
El 4 de mayo de 1861 fue electo académico de la Real de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, en sustitución del doctor Mariano Lorente, académico fundador fallecido el 16 de marzo de 1861, ocupando así el segundo puesto de la medalla n.º 7 de dicha docta Corporación. Ingresó formalmente, mediante la lectura de su discurso, el 18 de mayo de 1862, al que contestó el académico fundador e inspector general del Cuerpo de Minas Rafael Amar de la Torre.
Tanto en el libro de Ossorio y Bernard (1903), como en la Enciclopedia Espasa (vol. XLIII, 1921) y en el anuario de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales (2003) aparece este personaje como Ramón Pellico “y Molinillo”. Es más grave la confusión de Ossorio, que lo da “fallecido en Aravaca (Madrid) el 30 de junio de 1903”, por error.
Escribió mucho, pero la mayor parte de su producción bibliográfica fueron artículos, dictámenes y descripciones mineras que aparecen en diversas revistas, oficiales o privadas, de la época.
En el terreno particular formó parte, como ingeniero de minas, de las Sociedades Unión Ferro-Carbón y La Constancia Madrileña, publicando en sus memorias descripciones de las minas de carbón de piedra de la provincia de Córdoba.
Falleció el 25 de abril de 1876, a los sesenta y seis años de edad. Le sucedió en la medalla de la Real Academia de Ciencias el inspector general del Cuerpo de Ingenieros de Minas, Manuel Fernández de Castro.
Obras de ~: “Proyecto de hornos para el beneficio de los minerales de azogue”, en Anales de Minas, Madrid, vol. III (1841), págs. 163-173; “Minas de Sierra Almagrera” y “Resumen de los principales ensayos hechos en el laboratorio de la Inspección de Lorca durante el primer semestre de 1843”, en Boletín Oficial de Minas (BOM), n.º 1 (mayo de 1843), págs. 7-8 y pág. 9, respect.; “Canteras de mármol de Macael”, en BOM, n.º 3 (1843), págs. 33-34; “Minas de cinabrio de Usagre, en Extremadura”, en BOM, n.º 6 (julio de 1844), págs. 63-64; “Minas de plomo en término de la ciudad de Cáceres”, en BOM, n.º 6 (1844), pág. 77; “Informe sobre las minas de carbón de piedra de la provincia de Córdoba, presentado á la Dirección General del ramo en junio de 1836”, en BOM., n.º 8 (agosto de 1844), págs. 90-92; “Salinas de Roquetas”, en BOM, n.º 10 (septiembre de 1844), pág. 119; “Mina antigua de la Sima, en Sierra Almagrera”, en BOM, n.º 21 (marzo de 1845), págs. 259-260; “Minas de zinc de San Juan de Alcaraz, en la provincia de Albacete”, en BOM, n.º 25 (mayo de 1845); “Minas de azufre de Conil”, en BOM, n.º 34 (septiembre de 1845), págs. 453-454; Compañía de la Unión Ferro-Carbón, empresa de fundición por medio de altos hornos [...], Madrid, Imprenta de D. José C. de la Peña, 1847; Memoria sobre las minas de plata de Hiendelaencina, en la provincia de Guadalajara, Madrid, Imprenta de D. S. Omaña, 1848; Estracto de una Memoria geológica sobre el Distrito minero de Sierra Almagrera y Murcia, Madrid, Impenta de la Viuda de Antonio Yenes, 1852; Constancia Madrileña. Exposición de las juntas directiva y de gobierno de la Sociedad [...], celebrada el día 15 de Octubre de 1852, Madrid, Imprenta de Ancos, 1853; “Memoria acerca del Distrito Minero de Oviedo, presentada al Excmo. Sr. Ministro de Fomento por el Inspector del Distrito del Cuerpo de Ingenieros de Minas D. Ramón Pellico”, en Boletín Oficial del Ministerio de Fomento (Madrid), vol. XXXVII (1861), págs. 557-569 [reprod. en Revista Minera (Madrid), vol. XI (1861), págs. 129-145]; Discursos leídos ante la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y naturales en la recepción pública de Don Ramón Pellico [sobre la importancia y aplicación de los estudios geológicos], contestación del Ilmo. Sr. Don Rafael de Amar de la Torre, Madrid, Imprenta y Librería de Eusebio Aguado, 1862.
Bibl.: R. Amar de la Torre, [“Contestación”], a R. Pellico, Discursos leídos ante la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y naturales, op. cit.; E. Maffei y R. Rúa Figueroa, Apuntes para una Biblioteca Española [...] la mineralogía y la geología en todas sus aplicaciones [...], Madrid, Imprenta de J. M. Lapuente, vol. II, 1872, págs. 19-20. n.os 1861 a 1879; Redacción, “Los asturianos de ayer: Don Ramón Pellico y Paniagua”, en El Carbayón, Oviedo, 4 de julio de 1901; “Pellico y Molinillo, Ramón”, en M. Ossorio y Bernard, Ensayo de un Catálogo de Periodistas Españoles del siglo xix, Madrid, Imprenta y Litografía de J. Palacios, 1903, pág. 336; “Pellico y Molinillo, Ramón”, en VV. AA., Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo-Americana, vol. XLIII, Barcelona, Hijos de J. Espasa, 1921, pág. 154; C. Suárez, Escritores y Artistas Asturianos, vol. VI, Oviedo, Gráficas Summa, págs. 112-115; J. M. López de Azcona, Bibliografía de Minería, Metalurgia, Geología y Ciencias afines, Madrid, Instituto Geológico y Minero de España, 1962, págs. 13, 24, 37 y 57; “Pellico y Paniagua, Ramón”, en VV. AA, Gran Enciclopedia Asturiana, vol. XI, Gijón, Gran Enciclopedia Asturiana, 1970, págs. 173-174; Centenario de la Escuela de Minas de España, 1777-1877, Madrid, Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Minas, 1977 (2.ª ed.), págs. 248-250; “Pellico y Molinillo, Ramón”, en Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, Relación de Académicos desde el año 1847 hasta el 2003, Madrid, RACEFYN, 2003, pág. 28.
Fernando Rodríguez de la Torre