Ávila y Zumarán, Pedro de. Cenicero (La Rioja), 3.IX.1842 – Madrid, 12.XI.1924. Ingeniero de Montes.
Perteneció a la 14.ª promoción de la Escuela de Ingenieros de Montes, que concluyó sus estudios en la Escuela de Villaviciosa de Odón en 1866. La creación, por Real Orden de 5 de noviembre de 1866, de la Comisión de la Flora Forestal, marcó la actividad científica de Ávila en los años siguientes, pues incorporado a ella, recorrió España en todas las direcciones acompañando al jefe de la Comisión, Máximo Laguna.
Antes de culminar la obra definitiva, en la que debían compendiar la flora leñosa española, publicaron dos volúmenes de los trabajos verificados durante los años 1867 y 1868, por un lado (1870), y 1869 y 1870, por otro (1872).
La obra definitiva, La Flora Forestal Española (1883-1890) es una obra magnífica que se editó en dos partes. La primera, aparecida en 1883, contiene las especies pertenecientes a las gimnospermas y a las angiospermas apétalas. La segunda, que no lo hizo hasta 1890, las angiospermas gamopétalas y dialipétalas.
Ambas partes iban acompañadas de sendos volúmenes de Atlas, cuyas láminas fueron realizadas por el también ingeniero de Montes Justo Salinas Salazar.
Ávila fue profesor de la Escuela de Montes, e incluso, durante algún tiempo (10 de diciembre de 1896 a 22 de febrero de 1901) fue el director de este centro.
Precisamente, a raíz de una excursión de prácticas con alumnos de la Escuela, que les lleva, en el verano de 1897, desde El Escorial a la Sierra de Gredos prepara su trabajo La laguna de Gredos (1898), que tiene la particularidad de incluir el primer plano de dicha laguna, dibujado por el alumno Félix Monteverde a partir de las mediciones realizadas con el taquímetro por el propio Monteverde y los también alumnos Eugenio Sáez de Miera y Luis Jiménez Ruiz.
Académico de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, para la que fue elegido el 5 de marzo de 1902 para ocupar la vacante dejada por Máximo Laguna, no tomó posesión hasta el 9 de mayo de 1915. Su discurso de ingreso versó sobre Máximo Laguna y su obra científica.
Admitido como socio en la Real Sociedad Española de Historia Natural en 1873, permaneció en la misma durante un cuarto de siglo. Entre otros empleos fue inspector general del Cuerpo de Ingenieros de Montes, presidente de la Sección del Consejo Forestal y vocal de la Junta de Colonización y Repoblación interior. Le fue concedida la Gran Cruz de Isabel la Católica.
Obras de ~: con M. Laguna, Comisión de la Flora Forestal Española. Resumen de los trabajos verificados por la misma durante los años de 1867 y 1868, Madrid, Imprenta del Colegio de Sordo-Mudos y de Ciegos, 1870; con M. Laguna, Comisión de la Flora Forestal Española. Resumen de los trabajos verificados por la misma durante los años de 1869 y 1870, Madrid, Imprenta del Colegio de Sordo-Mudos y de Ciegos, 1872; con M. Laguna, Flora Forestal Española, que comprende la descripción de los árboles, arbustos y matas que se crían silvestres o asilvestradas en España, con breves notas sobre el cultivo y aprovechamiento de las más importantes, y con láminas que las representan, Madrid, Imprenta del Colegio de Sordo-Mudos y de Ciegos, 1883- 1890, 2 vols. de texto y 2 de atlas; Instrucciones y programas de ingreso en la Escuela Especial de Ingenieros de Montes, Madrid, Imprenta R. Rojas, 1896; “La laguna de Gredos”, en Revista de Montes, XXII (1898), págs. 449-453; D. Máximo Laguna y su obra científica, Madrid, Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, 1915.
Bibl.: J. M.ª Torroja Menéndez, “Los ingenieros en la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales”, en P. García Barreno et al., La Real Academia de Ciencias 1582-1995, Madrid, Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, 1995, págs. 385-429; J. L. González Escrig, Ingeniería y naturaleza. Aportaciones de los ingenieros de montes españoles a las ciencias naturales durante el siglo XIX, Madrid, Asociación y Colegio de Ingenieros de Montes, 2002.
Alberto Gomis Blanco