Verdugo de Albornoz Ursúa, Pedro. Conde de Torrepalma (II). Carmona (Sevilla), 22.XI.1657 baut. – Granada, 3.X.1720. Militar, corregidor de Granada y académico de la Real Academia Española.
Pedro Verdugo de Albornoz Ursúa, segundo conde de Torrepalma, hijo de Alonso Verdugo de Albornoz Pellicer, caballero de la Orden de Alcántara y primer conde de Torrepalma, y de María Antonia de Ursúa y Egües, hija del almirante general Pedro de Ursúa y Arizmendi, fue bautizado en Carmona (Sevilla) el 22 de noviembre de 1657. Muy pronto, en 1668, ingresó en la Orden de Alcántara. Luchó al servicio del rey Felipe V por toda Andalucía. Tras combatir en plena Guerra de Sucesión en Cádiz y Puerto de Santa María, en 1703 fue nombrado capitán de guerra y corregidor de Alcalá la Real, Loja y Alhama.
Tres años más tarde fue elegido jefe militar y corregidor de Granada, cargo que ya había ocupado su padre. Cuando el primer conde de Torrepalma era el corregidor de la capital granadina, Pedro Verdugo fundó, junto a Blas Manuel de Paz, caballero de Calatrava, la Real Maestranza de Granada, corporación de nobles granadinos, similar a la nacida en Sevilla en 1670. El 12 de enero de 1686 se celebró la primera junta con veinticinco miembros. Además, en aquellos años, Pedro Verdugo fue alcaide de la fortaleza de la Alhambra.
Se casó por primera vez a los dieciséis años con una prima suya, que murió un año después. De nuevo contrajo matrimonio, en 1685, con la joven granadina de trece años Isabel María de Castilla y Lasso de Castilla, de familia de suma nobleza, con la que tuvo diez hijos. Uno de ellos, Alonso Verdugo de Castilla, fue miembro de la Real Academia Española y de la Real Academia de la Historia, de la que fue director.
Su hija Ana María fue una gran poetisa y pintora.
Pedro Verdugo fue un gran erudito: hablaba varias lenguas y escribió algunos poemas y obras teóricas sobre poesía, especialmente textos sobre Góngora y la polémica culterana. En la Biblioteca Nacional se conserva su Disertación sobre el Numen Poético, texto en el que critica las figuras exageradas de algunas poesías.
Organizó varias academias privadas, práctica muy común en la época. Tras pasar cuatro años como intendente de Toro y Zamora, en 1715 se trasladó a Madrid.
El 6 de junio de ese mismo año ingresó en la Real Academia Española, donde participó en la redacción y preliminares del Diccionario de Autoridades.
Apenas permaneció un año en Madrid: aquejado de una grave enfermedad, en la primavera de 1716 se trasladó con su familia a Sevilla, donde pasó los últimos años de su vida. En 1720 regresó a Granada, donde falleció a los sesenta y tres años de edad, sin rentas, cargos, ni honores.
Obras de ~: Disertación sobre el Numen Poético, 1715 (inéd.) (Biblioteca Nacional de España, ms. 20419/23).
Bibl.: A. Cotarelo Valledor, Bosquejo histórico de la Real Academia Española, Madrid, Instituto de España, 1946; N. Marín López, “El conde de Torrepalma, la Academia de la Historia y el Diario de los literatos de España”, en Boletín de la Real Academia Española, t. XLII, cuad. CLXV (1962), págs. 91- 120; N. Marín López, Poesía y poetas del setecientos: Torrepalma y la Academia del Trípode, Granada, Universidad, 1971; F. Lázaro Carreter, Crónica del Diccionario de Autoridades, Madrid, Real Academia Española, 1972; N. Marín López, “Poesía y ciencia moderna en un texto de 1715”, en Serta Philologica F. Lázaro Carreter, II, Madrid, 1983, págs. 317-327; N. Marín López, “Decadencia y Siglo de Oro”, en Estudios literarios sobre el Siglo de Oro, Granada, Universidad, 1988, págs. 511-527; A. Zamora Vicente, Historia de la Real Academia Española, Madrid, Espasa Calpe, 1999, pág. 95; I. Arias de Saavedra Alías, Estatutos y Ordenanzas de la Real Maestranza de la ciudad de Granada, Granada, Universidad, 2005.
Emilio Bomant García
