Ximénez de Luna, Francisco. Villa de Luna (Zaragoza), s. m. s. XVI – ¿Ciudad de México (México)?, p. m. s. XVII. Naturalista.
Fue hijo de Martín Ximénez y Ana Esquivel. Se desconoce todo acerca de su clase y posición social, al igual que lo referente a su educación y formación. Viajó, sin saberse los motivos, por España, de la que él mismo menciona Galicia, Vizcaya y las ciudades de Valencia y Barcelona, e Italia. Tampoco se sabe cuándo ni en qué condiciones viajó al Nuevo Mundo. Llegó a La Florida, en donde permaneció por algún tiempo y pasó a la Nueva España en 1605. Poco después de su llegada se instaló en el Hospital de Santa Cruz de Oaxtepec (Huaxtepec), el cual había sido fundado por Bernardino Álvarez cuarenta años antes y había sido la sede de buena parte de los trabajos clínicos y botánicos de Francisco Hernández en la década de 1670 y de las curaciones y estudios de Gregorio López una década después. Allí se hizo cargo del cuidado y la atención de los enfermos. No se sabe si aprendió allí lo que supo del arte de curar o si había tenido otra preparación antes de viajar a América.
Estando en Oaxtepec, en donde se supone que permaneció unos cinco o seis años, llegó a sus manos una copia manuscrita del resumen de la obra de Hernández que había preparado Nardo Antonio Recchi y había revisado, según afirma Ximénez en la “nota al lector” que antecede a su obra, el doctor Valle, muy posiblemente Francisco Valles. Habiendo probado la eficacia de los remedios recomendados en dicha obra decidió traducirla al castellano y agregarle lo que su propia experiencia con ellas le indicaba.
El 25 de febrero de 1612 profesa en la Orden de Santo Domingo, quedando en el Convento del mismo nombre en la ciudad de México como lego encargado de la botica y la preparación de los medicamentos. Es probable que haya ejercido como enfermero en este tiempo, pues en su libro afirma que las medicinas actuaban igualmente bien en México que en Oaxtepec. Es entonces cuando refiere que en su celda leyó y releyó el texto de Hernández y completó su traducción, ayudado por fray Martín de León, a quien califica de buen conocedor del latín, lengua que él no dominaba. Nicolás León, uno de los biógrafos de Ximénez, dice que concluyó su obra en Puebla, aunque no señala, ni se ha localizado, la fuente que lo confirme. Terminada la obra a fines de 1614 fue impresa al año siguiente bajo el título de Quatro libros de la naturaleza y virtudes de las plantas y animales que están recevidos (sic) en el uso de medicina en la Nueva España. En los primeros tres libros describe 424 plantas y sus usos, así como la clasificación humoral que les había adjudicado Hernández, en tanto que dedica el libro cuarto para tratar la materia médica de origen animal y mineral, con 27 y 26 ítems respectivamente.
En los años anteriores a la terminación de su obra Ximénez fue presa, al decir de él mismo, de gravísimas enfermedades, quedando sordo. Para el momento de enviar a prensa sus Quatro libros tenía prácticamente terminada otra obra, Memorial para la salud, en la que indicaba la forma de preparar las recetas para tratar los principales padecimientos en lugares “do no hay médicos ni botica donde acudir por remedio”.
Se desconocen el lugar y la fecha de su muerte, aunque es lógico suponer que sucedió en el Convento de Santo Domingo de México, en donde estuvo todos estos años previos.
Obras de ~: Quatro libros de la naturaleza y virtudes de las plantas y animales que están recevidos (sic) en el uso de medicina en la Nueva España, México, Viuda de Diego López Dávalos, 1615; Memorial de la salud, 1615-1616 (inéd.).
Bibl.: N. León, “Introducción”, en Quatro libros de la naturaleza y virtudes de las plantas y animales que están recevidos (sic) en el uso de medicina en la Nueva España, Morelia, 1888; G. Somolinos d’Ardois, “Francisco Ximénez”, en Capítulos de Historia Médica Mexicana. III. Relación alfabética de los profesionistas médicos, o en conexión con la medicina, que practicarosn en territorio mexicano (1521-1618), México, Sociedad Mexicana de Historia y Filosofía de la Medicina, s. f, pág. 311; J. M. López Piñero y J. Pardo Tomás, Nuevos materiales y noticias sobre la Historia de las Plantas de la Nueva España, de Framcisco Hernández, Valencia, 1994; J. Sanfilippo, “Los Quatro libros de la naturaleza y virtudes de las plantas y animales que están recevidos (sic) en el uso de medicina en la Nueva España y el conocimiento de las plantas mexicanas”, en P. Aceves, Las ciencias químicas y biológicas a la luz de sus fuentes históricas, México, Universidad Autónoma Metropolitana, 2004, págs. 65-74.
Carlos Viesca Treviño
