Miquel Mico, Félix. Valencia, 1754 – 8.IX.1824. Médico.
Realizó estudios de Filosofía en el Colegio de Nuestra Señora de la Asunción de Valencia entre 1771 y 1773, tras los cuales inició la carrera de Medicina en la Universidad valenciana en 1774. Cuatro años más tarde alcanzó el grado de bachiller, doctorándose en junio de 1778 con unas Theses medicae en las que exponía su concepción del funcionamiento del cuerpo humano y sus enfermedades, claramente deudora de los planteamientos del médico valenciano Andrés Piquer.
El año anterior había iniciado su formación práctica en el Hospital General, la cual se prolongó hasta que en 1779 comenzó a opositar a cátedras médicas, actividad que simultaneó con el ejercicio profesional como médico de sanidad en el Grao. En 1789 ganó la Cátedra Temporal de Curso o Teórica, que ocupó durante tres años según era preceptivo tras la fundación de este tipo de cátedras por el Plan de Estudios del rector Vicente Blasco. En 1794 fue nombrado diarista médico y, como tal, elaboró diarios meteorológico-médicos en los que se relacionaba las enfermedades dominantes con los datos meteorológicos. Al año siguiente ganó la Cátedra Perpetua de Curso, que ocupó hasta que finalmente, en 1798, pasó a desempeñar la Cátedra de Medicina Práctica o Clínica. Desde ella propició la entrada en España de las nuevas corrientes médicas europeas, sobre todo del programa anatomoclínico de la escuela de París. En esta primera etapa clínica mantuvo una postura antisistemática, apoyada sobre todo en la escuela de Montpellier y en la “Alte Wiener Schule”. Aceptó con algunos matices el vitalismo de François Boissier de Sauvages y su clasificación de las enfermedades more botanico, aunque su principal referencia fue Maximiliano Stoll, cuyas obras utilizó como libros de texto en la enseñanza y cuya orientación ambientalista siguió, como puede verse en la Oración inaugural [...] en la avertura de la Escuela de Clínica (1798), en la que Miquel refleja el hipocratismo seguido por el autor vienés y en unos Diarios Meteorológico-Médicos (1799) en los que describe “las constituciones epidémicas reinantes”.
Llegado a su madurez científica, vio la luz su obra más representativa, el Compendio de Medicina Práctica (1811), publicada por su discípulo Ángel Sanz Muñoz con arreglo a sus explicaciones. De contenido muy cercano a la mentalidad anatomoclínica, su autor consideró central en la patología la lesión anatómica, recogiendo así el programa de la escuela de París. Utilizó como método diagnóstico, novedoso en su época, la percusión, ideada por Leopold Auenbrugger y difundida por Jean Nicolas Corvisart, cuya obra conoció, así como el termómetro clínico.
De ideología liberal, fue protomédico de los hospitales militares de campaña durante la Guerra de la Independencia, tras la cual fue denunciado por afrancesado.
En el Trienio Liberal se reeditó su Compendio (1821), pero en 1823, en plena reacción absolutista, fue depurado, muriendo un año después.
Obras de ~: Theses medicae ad mentem Andreae Piquerii Archiatri Disputationi proponit publicae pro supr. Doct. Medicinae laureola obtinenda, Valentiae Edetanorum, 1778; Theses Medicae quas pro Theoriae Cathedra propugnabit, Valentiae Edetanorum, 1786; Botanicae Theses, quas pro temporaria Cathedra propugnabit, Valentiae, 1788; Carta apologética [...] en que manifiesta a un amigo la explicación que dio a la yerva llamada Pentaphyllon, en el examen para el obtento de la Cathedra Temporal de Botanica, Valencia, 1788; Satisfacción a las reconvenciones de la carta apologética sobre la explicación de la yerva llamada Pentaphyllon, Valencia, 1788; Oración inaugural que dixo a sus discípulos [...] en la avertura de la Escuela de Clínica el año 1798 (inéd.); Diarios Meteorológico-Médicos, 1799 (inéd.); Compendio de Medicina Práctica arreglado a las explicaciones del Doctor Don Félix Miquel por Ángel Sanz y Muñoz, Valencia, 1811.
Fuentes y bibl.: Archivo Histórico de la Universidad (Valencia), 1774, libro 6, fol. 513v.; Libro de Matrículas de la Universidad de Valencia, Manuscritos, Libro de Grados conferidos en la Universidad Literaria de Valencia de todas las Facultades en dicho año, Manuscritos,1778, libro 37, fols. 88v.-90r.
R. Peset Reig, “La patología cardiorrespiratoria en la primera mitad del siglo xix español”, en Archivos Iberoamericanos de Historia de la Medicina, 15 (1963), págs. 165-262; J. M. López Piñero, “The Relation between the ‘Alte Wiener Schule’ and the Spanish Medicine of the Enlightenment”, en Wien und die Weltmedizin, Wien, H. Böhlaus, 1974, págs. 11- 26; J. Navarro, Félix Miquel i Micó (1754-1824) y la transición de la medicina ilustrada a la anatomoclínica en la Universidad de Valencia, Valencia, Universidad, 1982; J. M. López Piñero, “Miquel Micó, Félix”, en J. M. López Piñero, Th. F. Glick, V. Navarro Brotons y E. Portela Marco (eds.), Diccionario histórico de la ciencia moderna en España, vol. II, Barcelona, Editorial Península, 1983, págs. 62-63; J. Navarro Pérez, “La transición de la medicina ilustrada a la romántica a través de la obra de Félix Miquel”, en A. Alberola y E. La Parra, La Ilustración española, Alicante, Diputación Provincial, Instituto Juan Gil-Albert, 1985, págs, 71-82; J. Navarro, “La introducción de la medicina clínica en España. La cátedra de medicina práctica de la Universidad de Valencia”, en Asclepio, 41 (2) (1989), págs. 169-170; J. M. López Piñero (dir.), Historia de la Medicina Valenciana, vol. II, Valencia, Vicent García Editors, 1991, págs. 106-107; J. M. López Piñero y V. Navarro Brotons, Història de la Ciència al País Valencià, València, Institució Alfons el Magnànim, 1995, págs. 382-384; J. Navarro, La introducción de la clínica en Valencia: Félix Miquel i Micó (1754-1824), Valencia, Ayuntamiento, 1998.
María José Báguena Cervellera