Landecho Jordán de Urríes, Luis de. Bilbao (Vizcaya), 14.III.1853 – Madrid, 16.XI.1941. Arquitecto.
Miembro de una influyente familia burguesa, Luis de Landecho perteneció al importante grupo de arquitectos vascos que desplegaron una notable actividad en Madrid durante las últimas décadas del siglo XIX y las primeras del XX. Por ello, toda su obra se engloba dentro del eclecticismo característico de aquel período, aunque con una especial vinculación con las corrientes racionalistas de origen decimonónico, fundamentadas en las enseñanzas del arquitecto francés Viollet-le-Duc y la lógica constructiva de las edificaciones realizadas en ladrillo. Tras cursar los estudios de Arquitectura en la Escuela de Madrid, donde fue compañero de promoción de figuras tan relevantes como Arturo Mélida, se tituló el 25 de septiembre de 1876.
Hasta comienzos del siglo XX su labor se desarrolló entre Madrid y su tierra natal. Sus primeros trabajos conocidos son un sencillo edificio de viviendas en la calle de Monte Esquinza (1880), típico ejemplo madrileño de arquitectura doméstica finisecular, y la fructífera colaboración con el arquitecto Enrique Fort en el proyecto y la ejecución de la sede del Ateneo de Madrid (1882-1884), buena muestra de eclecticismo clasicista. Con posterioridad realizó varias obras en Vizcaya, concretamente el asilo Calzada de Guernica, el Ayuntamiento de Mundaca y la Iglesia de San Francisco de Asís (1889-1909) en Bilbao (conocida como la Quinta Parroquia), cuyo proyecto fue premiado con la medalla de oro en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1890. Fue en este período cuando tomó estrecho contacto con la familia Zabálburu —para la que realizó su desaparecido palacio en Bilbao—, la cual en poco tiempo se convirtió en su mejor mecenas. Ya afincado en la capital, precisamente la viuda de Zabálburu le encomendó la realización de dos edificios de viviendas de alquiler (1899-1901), en la plaza de Alonso Martínez con vuelta a las calles Sagasta y Covarrubias, que constituyen un magnífico conjunto urbano en el que Landecho supo modernizar las ideas de los racionalistas decimonónicos seguidores de Viollet-le-Duc, como José Segundo de Lema, para crear una obra de extraordinaria calidad. Paralelamente llevó a cabo una reforma en las viviendas anexas al propio palacio Zabálburu en la calle Salustiano Olózaga (ambos construidos por el mencionado Lema entre 1872 y 1876), donde también intervino posteriormente para ejecutar diversas obras de ampliación (1917-1919).
A partir de 1900 se sucedieron diversos encargos de gran relevancia. Destacan en primer lugar dos singulares realizaciones de carácter industrial: los conjuntos fabriles de la Sociedad de Construcciones Metálicas en la Ronda de Toledo (1901-1903) —empresa de la que fue miembro— y la Sociedad de Gasificación Industrial del Cerro de la Plata (1903-1905). Especialmente en esta última obra empleó un original lenguaje arquitectónico, ajeno a imposiciones estilísticas, que representa una de las soluciones más originales que el eclecticismo madrileño dio a la problemática funcionalista de la arquitectura industrial. Inmediatamente después proyectó otro de sus mejores trabajos, la Escuela de Matronas y Casa de Salud de la calle O’Donnell (1904-1924), gran edificio hospitalario donde aplicó, con su acostumbrada contención ornamental, un eclecticismo muy libre y creativo. Esta etapa culmina con su elección como académico de Bellas Artes el 6 de junio de 1904, cargo del que tomó posesión el 18 de junio de 1905 en un acto solemne donde leyó un discurso sobre La originalidad en el arte. Algún tiempo después presidió la Sección de Arquitectura de la misma Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.
En los años siguientes, a excepción de la dirección de obras del Hotel Ritz (1908-1910) según un proyecto del arquitecto francés Charles H. Mewes y de la ejecución del neorrománico panteón de los marqueses de Vistabella (1910), la mayor parte de su trabajo se centró en la realización de ampliaciones y reformas de diversa envergadura en varios palacetes madrileños, como los del marqués de Castro Serna (1907), el infante Carlos de Borbón (1914-1916) —hoy palacete March— y la familia Iturbe (1922) —en la actualidad conocido como Palacio Parcent—. Este descenso en las realizaciones se debió, entre otras causas, al desempeño de distintas ocupaciones administrativas (inspector de la Junta de Construcciones Civiles, vocal del Consejo Penitenciario y jurado en numerosos concursos) y, sobre todo, a la progresión de su actividad política que, como miembro del partido conservador, le llevó a ser diputado y senador del Reino. Gracias a todo ello recibió la Gran Cruz de Isabel la Católica, prestigiosa condecoración que ostentaba a su muerte, acaecida en Madrid en noviembre de 1941 a la edad de ochenta y ocho años.
Obras de ~: viviendas en la calle Monte Esquinza, Madrid, 1880; con E. Fort Guyenet, Ateneo de Madrid en la calle del Prado, 1882-1884; iglesia parroquial de San Francisco de Asís, Bilbao, 1889-1909; viviendas para la viuda de Zabálburu en la plaza de Alonso Martínez, Madrid, 1899-1901; reforma de las viviendas anexas al palacio de Zabálburu en la calle Salustiano Olózaga, Madrid, 1900; conjunto de edificaciones de la antigua Sociedad Española de Construcciones Metálicas (hoy sede del Instituto Municipal de Empleo y Formación Empresarial) en la Ronda de Toledo, Madrid, 1901-1903; conjunto de edificaciones de la antigua Sociedad de Gasificación Industrial del Cerro de la Plata (hoy laboratorios), Madrid, 1903-1905; antigua Escuela de Matronas y Casa de Salud Santa Cristina (hoy Hospital Universitario) en la calle de O’Donnell, Madrid, 1904-1924; reforma del palacio del marqués de Castro Serna (hoy viviendas) en la calle Mayor, Madrid, 1907; con L. Gallego, dirección de obras del Hotel Ritz en la plaza de la Lealtad, Madrid, 1908-1910; panteón de los marqueses de Vistabella en el cementerio sacramental de San Justo, Madrid, 1910; ampliación y reforma del palacete March en la calle José Ortega y Gasset, Madrid, 1914-1916; ampliación del palacio de Zabálburu y viviendas anexas en la calle Salustiano Olózaga, Madrid, 1917-1919; ampliación y reforma del palacio de Parcent (hoy dependencias del Ministerio de Justicia) en la calle San Bernardo, Madrid, 1922; asilo Calzada, Guernica (Vizcaya), s. f.; Ayuntamiento de Mundaca (Vizcaya), s. f.; palacio Zabálburu, Bilbao, s. f. (desapar.); panteón de la infanta María Teresa de Borbón, monasterio de San Lorenzo de El Escorial, s. f.
Escritos: La originalidad en el arte, discurso de ingreso en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, Madrid, 1905.
Bibl.: B. de Pantorba, Historia y crítica de la Exposiciones Nacionales de Bellas Artes celebradas en España. Madrid, Alcor, 1948 (reed., Madrid, José Ramón García-Rama, 1980); P. Navascués Palacio, Arquitectura y arquitectos madrileños del siglo XIX, Madrid, Instituto de Estudios Madrileños, 1973; J. R. Alonso Pereira, Madrid 1898-1931 de corte a metrópoli, Madrid, Comunidad de Madrid, 1985, págs. 98-100; J. J. Alzugaray Aguirre, Ingenieros y arquitectos vascos del siglo XX en Madrid, Madrid, Dossat, 1986, pág. 86; J. Hernando, Arquitectura en España 1770-1900, Madrid, Cátedra, 1989; C. Saguar Quer, Arquitectura funeraria madrileña del siglo XIX, Madrid, Universidad Complutense, 1989; A. Urrutia Núñez, “Bibliografía básica de arquitectura en Madrid. Siglos XIX y XX”, en Anuario del Departamento de Historia y Teoría del Arte de la Universidad Autónoma de Madrid, 3 (1991), págs. 199-266; Arquitectura española siglo XX, Madrid, Cátedra, 1997; VV. AA., Arquitectura de Madrid: casco histórico y ensanches, Madrid, Fundación Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid, 2003.
Óscar da Rocha Aranda