Quinta hija de Jaime II de Aragón y Blanca de Anjou o Nápoles, y décima en el orden de los hijos nacidos de dicho matrimonio. Su nacimiento provocó la muerte de su madre por una asistencia defectuosa.

Desde los dos años, estuvo muy unida a Leonor de Castilla, llegada a los cuatro años a la corte aragonesa y destinada como esposa del primogénito de Jaime II, Jaime, cuando llegase a una edad núbil. Ambas infantas se educaron juntas en el Palacio Real de Valencia bajo la tutoría de la dama Violante de Grecia, esposa de Pedro de Ayerbe. Tuvo una salud mucho más fuerte que sus enfermizas hermanas. Una vez fue devuelta la infanta Leonor a Castilla por romperse su compromiso de boda, Violante se convirtió en el consuelo y compañía de su nueva madrastra María de Lusiñán en el Palacio Real de Barcelona y en el castillo de Tortosa; en otras ocasiones pasó largas temporadas con sus hermanas, María y Blanca en el monasterio de Sijena. [...]