Marchesi Oleaga, José María. Madrid, 27.XI.1801 – 23.V.1882. Teniente general de Caballería.
Era hijo de Rita Oleaga y de Luis Marchesi, natural de Módena (Italia), brigadier de la compañía italiana del Real Cuerpo de Guardias de Corps.
Se casó en Barcelona con Genobeba Puigmartí, en 1839, y, en segundas nupcias, en 1847, con Clementina Butler, hija del intendente militar de 1.ª Clase Juan Butler.
Cuando apenas contaba seis años de edad, obtuvo la gracia de paje del rey Carlos IV, de la que no llegó a tomar posesión por su corta edad y los acontecimientos que sobrevinieron en 1808.
Extinguida la compañía italiana a la que pertenecía su padre, salió para Tortosa, pasando desde allí a Valencia, cuyo sitio y bombardeo sufrió hasta su capitulación.
A continuación se traslada a Alicante y, posteriormente, en 1815, a Madrid.
El 20 de diciembre de 1815 el infante don Carlos, como comandante general de la Real Brigada de Carabineros, le concede la gracia de carabinero de distinción de menor de edad, dedicándose asiduamente al estudio de las materias más esenciales para la carrera de las armas.
Una vez adquiridos los conocimientos indispensables, solicita su pase al Regimiento de Caballería Farnesio, al cual fue trasladado en clase de cadete el 1 de diciembre de 1819.
Durante el Trienio Constitucional, entre 1820 y 1823, con motivo del levantamiento de las tropas que mandaba Rafael del Riego, el 1 de enero de 1820, toma parte en las operaciones que se siguieron y en todos los movimientos de su cuerpo. En abril de dicho año jura la Constitución y se le destina a la persecución de ladrones que vagaban por las inmediaciones de Écija.
En 1822 realiza varias salidas desde Valladolid y Medina del Campo contra las partidas realistas, distinguiéndose en las acciones de los pueblos de San Pedro y Villaornate. También toma parte activa en varias escaramuzas contra los cabecillas Merino y Cuevillas.
Destinado en 1823 al 4.° Ejército de Operaciones, al mando del general Morillo, estuvo comprendido con su Regimiento en la capitulación del 1 de agosto en Galicia. Posteriormente, una parte de estas fuerzas siguió a los constitucionales mandados por el Empecinado, pero Marchesi con sus jefes, el resto de oficiales y tropa se mantuvo fiel a la capitulación efectuada con los realistas y franceses.
El 27 de agosto de 1823 se le destina al Regimiento de Cazadores Doña María Francisca de Asís, y el 1 de agosto de 1824 pasa al Regimiento de Cazadores a Caballo de la Guardia Real, al que se incorpora en Ocaña, siendo ascendido a alférez el 23 de octubre.
El 21 de septiembre de 1826 pasa con su Regimiento a Medina del Campo, permaneciendo en este cantón hasta el 23 de diciembre, fecha en la que se dirige hacia Extremadura para formar parte del ejército de Observación del Tajo.
Encontrándose en Madrid, recibió el certificado expedido el 3 de marzo de 1828 por el que quedaba purificado de su conducta militar y política durante el Gobierno Constitucional. El 21 de julio de 1828 asciende a teniente.
Siendo ayudante de cazadores a caballo de la Guardia Real, el 7 de octubre de 1833 parte de Madrid con dos escuadrones de su Regimiento con destino al ejército de Operaciones del Norte, hallándose el 12 de noviembre en la acción de Cubillos de Perazancos contra los carlistas, en la que con cuatro batidores hizo sesenta y tres prisioneros. Por su brillante actuación Su Majestad le concedió el grado de teniente coronel.
Marchó después a Vitoria, participando en la acción de Urdiain el 10 de febrero de 1834, Mendigorría el 12 de junio, Artaza el 31 de julio, Eiza el 14 de agosto, Turtán el 20 y en la de Viana el 4 de septiembre.
Es promovido a capitán de coraceros el 12 de octubre de 1834, y regresa a Madrid el 1 de diciembre.
El 4 de marzo de 1836 parte con setenta caballos de su Regimiento en persecución de los cabecillas Cabrera, Quílez, Forcadell y Serrano, y se distinguió en la acción de Adtune, el 20 de mayo, en la que con sólo veinte caballos cargó a la caballería enemiga que pasaba de doscientos, dispersándola por dos veces y causando cuatro muertos y diecisiete heridos. Marchesi recibió en este choque una lanzada en el pecho izquierdo, siendo recomendado por su distinguido comportamiento por el jefe de la columna, mereciendo las gracias de Su Majestad.
En junio de 1836 se incorpora al ejército del Centro a las órdenes de los generales Valdés, Soria y Narváez.
Regresa a Madrid el 15 de agosto, desde donde se dirige, el 1 de octubre, a la provincia de Toledo al mando de ciento cincuenta infantes y cincuenta caballos en persecución del cabecilla Jara, contribuyendo a la acción del comandante general de Toledo.
El 10 de agosto de 1836 presta juramento de fidelidad a la Constitución de la Monarquía española. A partir del 1 de enero de 1837, con un escuadrón de su Regimiento, se encuentra en la División del ejército de la Ribera del Norte, al que acompaña en todos sus movimientos.
El 24 de mayo, en la acción de Huesca, participa junto al general Diego León en la carga que dio la Caballería al principio de la acción. En la primera embestida pierde su caballo, tomando otro de Artillería que también fue herido mortalmente, por lo que se vio obligado a montar un tercero que le cedió uno de los ordenanzas del general Iribarren. En la retirada que se produjo posteriormente, Marchesi fue herido gravemente en el pie izquierdo; sin embargo, continuó batiéndose el resto de la acción, protegiendo al brigadier Van-Halen que mandaba los batallones del 2.º Regimiento de la Guardia Real de Infantería. Durante la acción el general Iribarren fue herido mortalmente y Marchesi fue hecho prisionero por un oficial y cinco lanceros carlistas, de cuyas manos se salvó por los esfuerzos del cabo de coraceros Gabino Gómez y de otro soldado.
Imposibilitado Marchesi para seguir luchando por el estado de su herida iba retirarse, pero permaneció en el campo de batalla hasta que consiguió llegar al cuadro de la guardia, donde le colocaron en una camilla para ser trasladado a Almudévar. Desde allí fue trasladado a Zaragoza, donde sufrió una larga, penosa y difícil curación. En premio a su valeroso comportamiento se le concede la Cruz de 1.ª Clase de San Fernando. El 14 de diciembre obtiene el grado de coronel de Caballería.
Trasladado a Madrid para restablecerse de su herida, permaneció hasta mediados de julio de 1838, fecha en la que se incorporó en Vicálvaro a su Regimiento.
Permaneció en esta situación hasta el 24 de agosto, que salió para Guadalajara y Molina de Aragón con sesenta caballos en persecución de facciosos, comisión en la que estuvo empleado hasta finalizar el año.
El 5 de julio de 1839 se dirigió a Cataluña al mando de un escuadrón compuesto por cuatro cuerpos de la Guardia Real. Realizó desde Barcelona diferentes salidas y salvó en una de ellas un inmenso convoy que con setecientos veinte prisioneros se dirigía a Igualada.
El 13 de agosto de 1839 fue nombrado comandante del 4.º Escuadrón de Lanceros de la Guardia Real.
Pasó seguidamente a Madrid, desde donde se unió en diciembre a la pequeña columna de un batallón que operaba en la provincia de Guadalajara al mando del brigadier Quiñones. Acometida esta fuerza en Alcocer, el 21 de enero de 1840, por otras carlistas superiores, Marchesi sostuvo con su escuadrón la retirada, salvando el resto de la columna.
Más tarde formó parte de la división del general Manuel de la Concha, con la que protegió la marcha de la Familia Real a Barcelona. Con esta unidad entró en acción en los campos de Olmedilla, el 5 de junio, y en Miranda de Arga, el 25. Por esta última fue recompensado con la Cruz de Comendador de Isabel la Católica.
En la mencionada acción de Olmedilla, a las órdenes del general Manuel de la Concha, forzó las posiciones de tres batallones carlistas, lanzándose sobre ellos de flanco cuando emprendían la retirada.
Hizo mil cuatrocientos prisioneros y causó doscientos muertos.
Por el mérito que contrajo en esta operación ascendió a coronel de Caballería el 16 de enero de 1841, obteniendo por juicio contradictorio la Cruz laureada de San Fernando de 2.ª Clase.
Terminada la campaña, volvió Marchesi a Madrid para prestar sus servicios en el Palacio Real. Encontrándose de servicio la noche del 7 de octubre de 1841, estuvo implicado en los hechos que tuvieron lugar, por lo que tuvo que emigrar a Francia. Al verificarse el alzamiento nacional, el 20 de septiembre de 1843, regresó a España y quedó de reemplazo.
El 16 de diciembre de 1843 ascendió a brigadier de Caballería, pasando a mandar el Regimiento de la Reina 2.° de Caballería.
En mayo de 1844 fue nombrado director general de las Reales Caballerizas y Armería. Por sus brillantes servicios en este cargo, Su Majestad le concedió, en noviembre de 1847, la Llave de gentilhombre de cámara, y, el 15 de diciembre de 1848, la Gran Cruz de Isabel la Católica. Ascendió a mariscal de campo el 20 de diciembre de 1850.
En marzo de 1852 fue nombrado subinspector de Caballería en el ejército de Cuba. Permaneció en la isla hasta junio de 1853, y en septiembre se le designó 2.º cabo de Cataluña, estando presente en los acontecimientos de julio de 1854.
El 1 de agosto de 1854 ocupó el cargo de capitán general de Navarra. A su celo y vigilancia se debió que, en febrero de 1855, fracasaran los planes de conspiración que los carlistas fraguaban para apoderarse de Pamplona y de su ciudadela. Por estos destacados servicios el Rey le concedió la Gran Cruz de Carlos III.
El 5 de julio de 1856 ascendió a teniente general, ocupando sucesivamente los destinos de capitán general de Baleares, Aragón y Castilla la Nueva, y, en 1860, director general de Caballería.
Fue ministro de la Guerra desde el 1 de marzo hasta el 16 de septiembre de 1864, capitán general de Puerto Rico de 1865 a 1867, y presidente del Consejo Supremo de 1975 a 1977. El 12 de marzo de 1879 pasó a la reserva.
José María Marchesi Oleaga fue senador del reino, comendador de la Legión de Honor de Francia y del León Neerlandés, Gran Cruz de la Orden de San Estanislao de Rusia y Gran Cruz y Cruz de la Orden de San Hermenegildo.
Falleció en Madrid el 23 de mayo de 1882.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar (Segovia), Exp. personal. E. San Miguel (pról.), Estado Mayor del Ejército Español.
Sección de Mariscales de Campo, Madrid, Imprenta de T. Fortanet, 1854; A. Carrasco y Sayz, Icono-biografía del Generalato Español, Madrid, Imprenta del Cuerpo de Artillería, 1901; VV. AA., Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo Americana, Bilbao, Espasa Calpe, 1928; G. Bleiberg (dir.), Diccionario de Historia de España, Madrid, Alianza, 1981; J. M. Cuenca Toribio y S. Miranda García, El poder y sus hombres. ¿Por quiénes hemos sido gobernados los españoles? (1705-1998), Madrid, Actas, 1998.
Emilio Montero Herrero