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Cayetano Urbina y Daoiz

Biografía

Urbina y Daoiz, Cayetano. Conde de Cartaojal (V). Madrid, 3.IV.1797 – 21.IV.1867. Teniente general, senador.

Hijo de Cayetano de Urbina y Urbina, intendente general de la ciudad de Antequera, y de Manuela Daoiz y Niderist. El 10 de diciembre de 1802, a petición de su padre, le fue concedida la gracia de la Bandolera de la compañía española del Real Cuerpo de Guardias de Corps, sin sueldo ni antigüedad.

El 26 de noviembre de 1812, ingresó como caballero cadete en el Colegio de Artillería, a solicitud de su tío, el mariscal de campo Juan de Urbina, donde se le dedicó con especial interés al estudio de las Matemáticas y de la Física y Química, asignatura, esta última, que cursó en Sevilla. El 11 de febrero de 1815 fue ascendido a sub-brigadier habilitado de cadetes y el 23 de diciembre del mismo año a brigadier de cadetes. El 1 de enero de 1817 recibió el empleo de subteniente y el 27 de diciembre de 1819 fue nombrado teniente graduado para el Primer Regimiento del Arma, con sede en Barcelona. El 4 de marzo de 1820 fue destinado a la fábrica de pólvoras de Murcia, para encargarse de los laboratorios; el 2 de abril de 1821, pasó de ayudante de profesor de la Academia del Colegio de Segovia; y el 23 de agosto del mismo año, fue enviado a prestar servicio a la comisión de jefes y oficiales del Ministerio de la Guerra por Orden Real, a las órdenes del secretario del Despacho de la Guerra.

El 3 de diciembre de 1822 fue ascendido a teniente efectivo de Artillería. El 18 de marzo de 1823 pasó a las órdenes del general jefe del 2.º Ejército de la Reserva, Pablo Morillo y Morillo, conde de Cartagena, como oficial auxiliar de Estado Mayor, pasando posteriormente a las órdenes directas del jefe del Estado Mayor del Ejército Francisco Javier Cabanes que, a las órdenes del general Morillo, había partido para el norte de España a comienzos de ese año. En ese puesto estuvo de operaciones, y marchó a Valladolid y luego a León, Astorga, Villafranca y Lugo. El 13 de junio de 1823 decidió no reconocer la regencia establecida en Sevilla, contribuyendo con su actitud a conseguir la libertad de Su Majestad. El 1 de octubre de 1823, pasó a disfrutar de licencia indefinida, en la plaza de Getafe (Madrid), al disolverse el Ejército de Galicia.

El 19 de julio de 1825 fue destinado, con carácter interino, gracias a sus magníficos informes, al 5.º Batallón del Real Cuerpo de Artillería debido al aumento de plantilla de dicho batallón y a las numerosas bajas habidas con motivo de la purificación de mandos realizada por razones políticas, para establecer de nuevo la subordinación y disciplina debidas.

En mayo de 1826 fue destinado al escuadrón del Arma de la Guardia Real. El 7 de septiembre de 1828 recibió el nombramiento de ayudante, siendo elegido y nombrado el 18 de noviembre teniente vivo y efectivo del Real Cuerpo de Artillería, concediéndosele el 20 de febrero de 1826 la purificación por la Junta de Purificaciones Militares de la Capitanía General de Castilla la Nueva, dándose por terminada la situación de impurificado que tenía al haber estado inscrito en sociedades secretas, de lo que se le había acusado.

El 8 de diciembre de 1830 recibió el grado de capitán, permaneciendo de servicio ordinario y en marzo de 1931 salió de Sevilla a las órdenes inmediatas del capitán general con motivo de los acontecimientos que tuvieron lugar en la Isla de León en San Fernando (Cádiz), protagonizados por el general José María de Torrijos, contribuyendo eficazmente a la rendición de los revolucionarios, recibiendo en premio a sus servicios, el 21 de julio, el grado de teniente coronel y la Cruz de San Fernando de 1.ª Clase. Ascendió a capitán el 9 de mayo de 1832, siendo destinado como 2.º comandante al 2.º batallón del Tercer Regimiento de Granaderos de la Guardia Real de Infantería.

El 23 de enero de 1833 fue nombrado 2.º comandante del batallón y el 30 de enero le fue concedido el grado de coronel. El 11 de marzo de 1834 fue nombrado primer comandante de la guardia real, permaneciendo de comisión en Andalucía, para cumplir misiones que se le habían encomendado. El 15 de octubre de 1835 fue nombrado teniente coronel mayor.

El 1 de julio de 1836 fue ascendido a coronel y destinado al Regimiento de Infantería Córdoba n.º 10 de Línea, como jefe accidental, entrando en operaciones en las provincias del norte contra los carlistas y continuando después al mando de su regimiento. Del 11 al 19 de marzo de 1837 participó en varias acciones en Navarra, mandando la brigada de vanguardia y el día 22 estaba en la acción del valle de Ulzama, donde fue premiado su comportamiento con la Cruz de San Fernando de 2.ª Clase, Laureada. El 24 de mayo participó en la batalla de Huesca, en la que el ejército carlista tomó la ciudad, y en la que resultó herido, pero el 2 de junio volvía a encontrarse en la batalla de Barbastro y el día 5 en el paso del río Cinca. Este día, al mando de su brigada en vanguardia, a las órdenes del general en jefe, atacó al enemigo haciendo un buen número de prisioneros. Por su distinguido comportamiento obtuvo sobre el campo de batalla en la batalla de Grau, otra Cruz de San Fernando de 1.ª Clase. El 24 de agosto intervino con su unidad en la acción de Herrera, el 5 de octubre en la de Retuerta y el día 15 en la de Huerta del Rey, todas en la provincia de Burgos.

El 27 de enero de 1838, participó en la acción sorpresa efectuada en Castril de la Peña (Granada), por la cual se le concedió la Medalla de Distinción de General. El 5 de febrero de 1838 participó a las órdenes del general Miguel de Yribarren en las acciones de Úbeda y Baeza, en la provincia de Jaén, contra las facciones reunidas de los rebeldes Basilio García, militar que había sido comisario de guerra durante el reinado de Fernando VII, Tablada y Palillo, todos ellos acusados de sedición. El 16 de marzo, por los méritos de guerra contraídos en dichas acciones, fue ascendido por orden de la reina Isabel II a brigadier de Infantería. Los días 21, 22 y 23 de marzo se encontraba en las acciones ocurridas en el valle de Olza en Navarra, teniendo sucesivos encuentros con el enemigo por las que se le concedería en septiembre la Real Cédula de la Cruz de 3.ª Clase de San Fernando.

El 1 de mayo participó en una acción por sorpresa contra los insurgentes, mediante la que fue destruida completamente la facción del cabecilla Basilio García. En dicha acción se distinguió marchando a la cabeza de las primeras compañías que entraron en combate, resultando herido y trasladado a Zaragoza. Desde el 30 de julio participó en las operaciones de sitio contra la plaza de Morella (Castellón) y en varias acciones durante los días 2, 5, 15 y 18 de agosto, día este último en que se levantó el asedio. Cubrió la retaguardia con la brigada de su mando sosteniendo la retirada sin que el enemigo lograse sus intenciones de apoderarse del convoy propio, a pesar de la sangrienta acción que tuvo lugar en el estrecho del Portell de Morella el día 18. Participó más tarde, el 1 de octubre, en otra acción en Maella (Zaragoza), en la que resultó gravemente herido.

El 12 de octubre de 1838 la Reina Gobernadora le nombró alférez de los Dragones de Luzón del Ejército de Filipinas, sin antigüedad ni sueldo, como gracia especial en consideración a las desgracias de su familia en aquellas islas. Debido a las heridas recibidas en las acciones de Maella, pasó a la situación de cuartel en la plaza de Zaragoza el 26 de noviembre de 1838, permaneciendo en esta situación hasta el 31 de marzo de 1840, en las plazas de Zaragoza y Granada. Fue entonces nombrado comandante general de la 1.ª Brigada de la División del Ejército del Centro, a pesar del mal estado de su salud. Entró en operaciones realizadas para sitiar varios puntos fuertes, asistiendo a las órdenes del general Francisco Javier Azpiroz a la del castillo de Alpuente (Valencia), de gran importancia estratégica y que había sido ocupado por una partida capitaneada por Arévalo, desde el 26 de abril hasta su rendición el 11 de mayo. Posteriormente participó en la de Begis (Castellón), que atacó con su brigada la noche del 17 de mayo hasta que se rindió el 22 del mismo mes. Posteriormente tomó parte en la ocupación de los fuertes de Castellfort (Castellón) y otros de la zona abandonados por el enemigo al aproximarse con sus tropas.

El 19 de junio de 1840 fue ascendido a mariscal de campo como recompensa a las acciones de Begis y Alpuente. Estuvo luego en la acción de Beteta (Cuenca) desde el 20 al 22 de junio, en que se rindió, partiendo a continuación para Aragón para observar y controlar la orilla izquierda del río Ebro y evitar así cualquier maniobra de invasión por parte de facciones enemigas procedentes de Cataluña. Pasó después con su brigada al Reino de Valencia, en donde permaneció hasta el mes de octubre, momento en que se disolvieron los cuerpos de ejército que se habían organizado, pasando a la situación de cuartel.

Durante los años 1840 y 1841 y 1842 permaneció con una licencia por enfermedad en las plazas de Granada y Sevilla. En esta situación estuvo hasta el 27 de julio de 1843, en que ocupó el cargo de 2.º cabo del 9.º distrito de Extremadura y gobernador de la plaza de Badajoz. El 30 de julio del mismo año, la reina Isabel II, atendiendo a sus distinguidas circunstancias y lealtad, le nombró gobernador militar y político de la provincia de Cuba y comandante general del departamento oriental de las islas, en sustitución de Juan Tello. Tomó posesión del cargo el 21 de octubre ante Leopoldo O’Donnell, presidente, gobernador y capitán general del Ejército e isla de Cuba y efectuó el viaje en el vapor de guerra Congreso, tomando posesión el 27 de noviembre.

En 1844 cayó enfermo a causa de la fiebre amarilla, que degeneró posteriormente en unas fiebres muy altas y peligrosas, por lo que se vio obligado a entregar el mando al brigadier Pedro Becerra. Solicitó en febrero de 1846 el regreso a la Península para su restablecimiento, petición que le fue concedida, por un año, por el presidente gobernador el 14 de marzo, llegando de regreso a España el 12 de junio, afincándose en Sevilla.

Estuvo en esta situación hasta el 27 de marzo de 1847 en que le fue admitida la renuncia al cargo, pasando de nuevo a la situación de cuartel durante cuatro meses, hasta el 15 de julio en que pasó a la situación de comisión de servicio, siendo destinado como segundo cabo de Navarra y gobernador militar de la plaza de Pamplona. El 20 de mayo fue nombrado comandante general de la provincia de Cádiz y gobernador militar de la plaza, tomando posesión el 27 de mayo y ejerciendo el cargo hasta octubre de 1848.

El 23 de octubre de 1848 fue nombrado por la reina Isabel II capitán general de las posesiones de África. Partió con destino a Ceuta en el vapor de guerra Isabel II el día 3 de diciembre. El 2 de octubre de 1849, en consideración a sus servicios y circunstancias, fue ascendido a teniente general. Permaneció en esta situación, alternando el mando designado con algunas licencias por enfermedad, hasta el 12 de marzo de 1851, en que fue suprimido aquel distrito por real decreto.

El 20 de octubre de 1851, y por ser teniente general, fue designado por la Reina senador vitalicio, jurando el cargo el 8 de noviembre. Permaneció en la situación de cuartel hasta el 9 de febrero de 1852 en la plaza de Valencia, fecha en que fue nombrado inspector de la Dirección General del Cuerpo de Carabineros del Reino, cargo en el que estuvo hasta el día 27 de noviembre, en que fue nombrado ministro de la Guerra, en el gobierno bajo la presidencia de Juan Bravo Murillo, hasta el 14 de diciembre, en que le fue admitida la dimisión.

Permaneció nuevamente en la situación de cuartel, con varias licencias reales para residir en Pontevedra y fuera de España para solucionar problemas personales y médicos, hasta el 16 de junio de 1858 en que fue designado capitán general de Castilla la Vieja, puesto del que tomó posesión el 14 de junio y en el que permaneció hasta el 2 de mayo de 1859 en que fue nombrado director general de Administración Militar, dirección que ostentó hasta el 21 de noviembre de 1863.

Fue entonces designado ingeniero general del Ejército hasta el 21 de noviembre de 1863 en que presentó su dimisión, fecha en que pasó a la situación de cuartel hasta el 25 de junio de 1865. En esa fecha fue nombrado director general de Artillería, cargo en el que permaneció hasta el 2 de junio de 1866. En esa fecha fue nombrado vicepresidente del Tribunal Supremo de Guerra y Marina, hasta el 13 de julio de 1866 en que presentó su renuncia al cargo, pasando a la situación de cuartel hasta el 13 de agosto de 1867 en la plaza de Vitoria, concediéndosela posteriormente para la de Madrid, hasta su fallecimiento.

Fue consejero (oidor) del Consejo Real y Supremo de las Indias. Estaba en posesión de dos condecoraciones de la Real y Militar Orden de San Fernando de 1.ª Clase, una de 2.ª Clase de la misma Orden, Laureada, la Medalla de la acción de Castril, la Gran Cruz de la Real Orden Americana de Isabel la Católica, la Cruz y la Gran Cruz de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo, entre otras.

 

Fuentes y bibl.: Archivo General Militar (Segovia), Hoja de servicios.

G. Bleiberg (dir.), Diccionario de Historia de España, Madrid, Alianza Editorial, 1981; VV. AA., Diccionario biográfico de personajes históricos del siglo xix español, Madrid, Rubiños- 1860, 2001.

 

Carlos Riñón Aguilar

 

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