Ram de Viu y Quinto, Luis. Barón de Hervés. Zaragoza, 1864 – Rubielos de Mora (Teruel), 1906. Poeta.
Luis Ram de Viu, barón de Hervés, perteneció a una importante familia aragonesa, cuyo protagonismo histórico se remonta hasta la figura de Domingo Ram y la firma del Compromiso de Caspe. En el siglo XIX Rafael Ram de Viu y Pueyo, el abuelo del poeta, luchó contra las tropas napoleónicas y luego fue un destacado legitimista. A la muerte de Fernando VII combatió por el pretendiente don Carlos: era el oficial de mayor graduación cuando la junta de Morella proclamó a don Carlos como rey de España. Fue apresado y pasado por las armas en Teruel. Sus hijos Rafael y José Ram de Viu y Navarro, tío y padre del poeta respectivamente, formaron parte del Consejo de Carlos (VII), y Rafael fue secretario personal del pretendiente. El legitimismo y el catolicismo ultramontano fueron banderas de la familia Ram de Viu, que acabaron siendo asumidas por el poeta en su vida y en su obra.
No obstante, los comienzos de la escritura de Ram de Viu se sitúan en los años de su vida universitaria y en un contexto de auge de las letras burguesas zaragozanas.
Aunque por tradición familiar intentó el ingreso en la Academia de Infantería, terminó estudiando Leyes en la Universidad Literaria de Zaragoza entre 1883 y 1886. Participó de la expansión de la vida cultural de la ciudad, propiciada por la conservadora paz del sistema canovista. La actividad del Ateneo Científico, Literario y Artístico de Zaragoza y otras academias de menor importancia así como el éxito del diario castelarino La Derecha Diario Democrático (1881-1901) testimonian este auge cultural. El mismo año en que se crea la Sección Literaria del Ateneo publica Ram de Viu su primer poema extenso, Amparo (1884). Se puede afirmar que esta sección del Ateneo y las columnas y crónicas literarias de La Derecha dieron a Ram de Viu acceso a la vida literaria local y nacional.
En estos años se construyó Ram de Viu un perfil personal que venía definido tanto por sus gustos literarios —se le puede considerar un ilustre epígono de Ramón de Campoamor y Gustavo Adolfo Bécquer— como por algunos aspectos de su biografía. En 1881 murió la madre; en 1883, el padre. Con menos de veinte años quedó huérfano y bajo la tutela económica de su hermano Carlos, conde de Samitier. Los pleitos por la protocolización del testamento del padre y de la madre agobiaron a los hermanos durante años. Sobre esto, le fue diagnosticada una lesión cardíaca de inseguro pronóstico. En sus años de estudiante Ram de Viu acudía a presenciar las exhumaciones de cadáveres que se llevaron a cabo en el cementerio y necrocomio de Torrero. Estos elementos biográficos pasan a formar parte del contenido de los poemas de su primer libro, Flores de muerto (1887). Sus amigos lo convirtieron en el poeta de los muertos y lo engalanaron con ribetes de escepticismo campoamorino. La trayectoria literaria de Ram de Viu se consolidó con la visita a Madrid entre enero y mayo de 1889 y la exitosa lectura en el Ateneo de su poema “El Desván”. Al año siguiente la editorial parisina Garnier Hermanos publicó Flores de muerto y Poemas mínimos (1890), obra que, a decir de Eduardo de Ory, dio a conocer a Ram de Viu en Hispanoamérica.
A partir de esta fecha aparecen poemas suyos en conocidas revistas de Madrid y Barcelona: Madrid Cómico, La Ilustración Española y Americana y Blanco y Negro, así como en las que presentan un aspecto más claramente fin de siècle: La Saeta, Barcelona Cómica y El Gato Negro. En 1892, publicó, junto con Luis Royo Villanova, el libro de cantares literarios, Dos guitarras, perseverando en el gusto de Bécquer y A. Ferrán por la poesía popular.
Horas de luz (1894) hace evidente un giro ideológico en el poeta. El prólogo propone una lectura autobiográfica del libro: se ofrece la obra de un convertido, de alguien que ha visto la luz y que se aparta de su anterior camino escéptico y pagano para hacerse decididamente católico. En efecto, el primer Ram de Viu fue antipositivista pero a partir de Horas de luz se transformó en un poeta estrictamente católico. Hacia el final del siglo y de su vida cambió las veladas del Ateneo por las de la Academia de San Luis Gonzaga. En 1898, tras el desastre de Cavite, publicó el poema ¡Viva España!, que cifra las causas de la decadencia española en el liberalismo burgués. En esta misma línea de reivindicación de la España católica escribió un libreto de ópera, Página goda, estrenada en enero de 1899. Los poemas patrióticos de Ram de Viu traslucen —pese a la distancia ideológica— la lectura de Manuel José Quintana y Gaspar Núñez de Arce. Su último libro, Del fondo del alma (1908), que se publicó póstumo, contiene poemas contra la libertad de imprenta, contra la enseñanza liberal e incluso contra el cinematógrafo; poemas a la Virgen del Pilar y a la Inmaculada Concepción. Había muerto Luis Ram de Viu en total sintonía con el pensamiento católico y antiliberal que defendieron quienes a lo largo del siglo XIX habían ostentado el título de la baronía de Hervés.
Obras de ~: Flores de muerto, Zaragoza, Ramón Miedes, 1887 (2.ª ed. aum., Paris, Garnier Hermanos, 1890); con L. Royo Villanova, Dos guitarras. Cantares, Zaragoza, La Derecha, 1892; Horas de luz, Madrid, Imprenta y Litografía de los Huérfanos, 1894; ¡Viva España!, Zaragoza, Comas Hermanos, 1898; Del fondo del alma. Obras póstumas, Zaragoza, Mariano Escar, 1908.
Bibl.: J. M.ª de Cossío, Cincuenta años de poesía española (1850-1900), Madrid, Espasa Calpe, 1960, págs. 960-966; M. Alvar, Aragón. Literatura y ser histórico, Zaragoza, Libros Pórtico, 1976; J. C. Mainer, “Luis Ram de Viu”, en VV. AA., Gran Enciclopedia Aragonesa, t. X, Zaragoza, UNALI, 1980, págs. 2791-2792; J. C. Mainer, “El Romanticismo aragonés”, en A. Egido (coord.), La literatura en Aragón, Zaragoza, Cazar, 1984; M.ª A. Naval, “Los cantares de Luis Ram de Viu: tradicionalismo, lirismo sentimental y eclecticismo ideológico”, en El sentimiento apócrifo. Un estudio del cantar literario en Aragón (1880-1900), Zaragoza, Institución Fernando el Católico, 1990, págs. 141-163; Luis Ram de Viu (1864-1906). Vida y obra de un poeta de la Restauración, Zaragoza, Institución Fernando el Católico, 1995.
María Ángeles Naval López
