Elvira Menéndez. ?, f. s. x – León, 2.XII.1022. Reina de León, esposa de Alfonso V.
Era hija de Menendo González y de su mujer Tutadomna, condes galaicos, tutores del rey Alfonso V de León. Pocos datos se tienen de los primeros años de su vida. Debió contraer matrimonio con Alfonso el año 1013 y su primera hija, Sancha, nació el año 1014, ya que cuando esta última se iba a casar con el infante don García en el año 1029 contaba con quince años de edad. En el año 1017 nacería su segundo hijo Vermudo que heredaría el Trono de su padre cuando éste fue asesinado en Viseo en el año 1028.
En el año 1017 preside con Alfonso la reunión de la Asamblea Magna Palatina de la que iban a salir las Leyes Generales que regirían el reino leonés y el Fuero de la ciudad. Los años siguientes debió acompañar al Monarca, estableciendo el orden en el reino y asegurando el fiel cumplimiento del ordenamiento jurídico salido de aquella magna asamblea. Así se la encuentra en el año 1018 en Sahagún donde confirma al abad Egila y a los monjes de este monasterio las donaciones que habían hecho los reyes leoneses sus predecesores y que, a causa de la entrada de los musulmanes, se habían sustraído al servicio del monasterio. En el año 1019 se encuentran ambos monarcas en Galicia y dan a Cidi Donéliz la mitad de la villa de Bobadilla entre los ríos Miño y Barbantiño. El 30 de marzo de dicho año presiden Alfonso y Elvira la reunión entre el obispo compostelano Vistruario y los vicarios regios cuya finalidad era esclarecer los dominios de la iglesia de Santiago. Los canónigos más antiguos presentaron la relación de las concesiones de los monarcas predecesores de Alfonso y prestaron juramento de cuáles eran las mandaciones, tierras y castillos que pertenecían a la iglesia compostelana. En la confirmación aparece también el príncipe Vermudo que tenía entonces dos años y cuyo padrino había sido el obispo Vistruario. En mayo de este mismo año 1019 se la encuentra en León cambiando con Munio Muñiz la villa llamada de Pinilla, entre los ríos Esla y Cea, por otra en Asturias. En diciembre dan a Pedro Flaíniz y a su mujer Bronilde las villas de Quintana y Superpeña que fueron de Cotina Fernández, Fernando Peláez y otros compañeros suyos que les fueron confiscadas por las guerras y escándalos que hicieron en el reino. La última aparición documental de la reina Elvira se produce el 6 de agosto del año 1022 en que junto con el Monarca cambian con Gudesteo Suárez y su mujer Velasquita varias villas, entre ellas la de Santa Eulalia, y siervos que habían sido del traidor Galindo que se rebeló contra Vermudo II, a cambio de la villa de Miñoto.
Según el Salterio de Fernando I, murió el 2 de diciembre de 1022. Su cuerpo fue enterrado en el templo que Alfonso construyó en el monasterio llamado de San Pelayo, luego de San Juan Bautista y finalmente de San Isidoro. Sobre su sepulcro pusieron el siguiente epitafio: “Aquí yace doña Elvira, mujer del rey Alfonso, hija del conde Menendo”.
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José María Fernández del Pozo