Valle de la Cerda, Luis. ?, c. 1540 – Madrid, 1607. Contador de la Santa Cruzada, miembro del Consejo de Hacienda y tratadista.
Funcionario del estado y hacendista —miembro del Consejo de Hacienda durante las últimas décadas del reinado de Felipe II—, fue el autor de uno de los proyectos bancarios mejor elaborados de su época, proyecto expuesto en su libro de 1600, el Desempeño del patrimonio de su Majestad y de los reynos sin daño del Rey y vasallos, y con descanso y alivio de todos. Por medio de los erarios públicos y montes de piedad. En esta obra, Valle de la Cerda propone lo que luego vino a llamarse “el arbitrio de los erarios y Montes de Piedad”, una red de cajas de préstamo apoyadas en un prototipo de banco nacional, con el fin de conceder créditos y así abaratar el coste de los préstamos. Esta idea había sido originalmente lanzada en España por dos flamencos, Pedro de Oudergherste y Pedro van Rottis, en carta dirigida a Felipe II en 1756, y vuelta a presentar en 1591 (BNE, ms. n.º 7384). Valle de la Cerda, colaborador de estos dos flamencos, reformuló con mayor detalle el arbitrio de los erarios en su libro, precisamente el año en que Felipe III accedió al Trono. El Desempeño fue reeditado una vez más en 1618 después de la muerte de Valle de la Cerda en 1607, “por orden y a costa” de las Cortes de Castilla, institución que hizo suyo el proyecto.
El arbitrio de los erarios lo volvió a presentar Juan Pedro López de Ugarte, antiguo colaborador de Valle de la Cerda en su Memorial, fechado en 1621, esta vez con el apoyo del privado de Felipe IV, el conde-duque de Olivares. Fue precisamente este apoyo de Olivares, quien vio en los erarios un remedio para la situación deficitaria de la Real Hacienda, el que hizo cambiar de opinión a las Cortes de Castilla, quienes hacia 1620 se volvieron en contra del proyecto. Pedro Schwartz en el estudio más completo del proyecto de Valle de la Cerda describe así este cambio: “[...] los erarios no llegaron a buen puerto porque las Cortes se opusieron a ellos. En cuanto comprendieron las Cortes que el conde de Olivares quería poner los erarios al servicio del allegamiento de recursos para la Corona, buscando aflorar la plata atesorada por familias nobles y burgueses y llevarla a la fuerza a un banco público donde sirviera de garantía para la financiación del Estado, el apoyo a ese arbitrio se convirtió en oposición insuperable”.
John Elliott en su afamada biografía de Olivares analiza en detalle esta “batalla de los erarios” (Elliott, 1990: 135-139). Finalmente, la oposición frontal de las Cortes logró paralizar el proyecto, que fue archivado, no volviendo a discutido otra vez hasta que Martínez de Mata en el octavo discurso de sus Memoriales y Discursos, escritos hacia 1650, intentó resucitarlo. Pedro Rodríguez, conde de Campomanes, presidente del Consejo de Castilla a lo largo del reinado de Carlos III, quien reeditó los Memoriales de Martínez de Mata en 1775, vio todo el debate del siglo anterior sobre la propuesta de Valle de la Cerda, como un antecedente de los intentos de establecer un banco nacional, proyecto precisamente que un colaborador suyo, Cabarrús, llevaría a cabo con el nombre de Banco de San Carlos en 1780.
Obras de ~: Desempeño del patrimonio de su Majestad y de los reynos sin daño del Rey y vasallos, y con descanso y alivio de todos. Por medio de los erarios públicos y montes de piedad [...], Madrid, 1600.
Bibl.: J. Díaz de Díaz-Fernández y F. Estapé, “La creación de Erarios públicos en España el proyecto de Pedro de Oudergherste”, en Moneda y Crédito, n.º 56 (1956), págs. 41-53 (reed. en F. Estapé, Ensayos de Historia del Pensamiento Económico, Barcelona, Abel, 1971); F. Ruiz Martín, “Los planes frustrados para crear una red de Erarios y Montes de Piedad”, en Cuadernos Hispano Americanos, n.º 238-240 (1969), págs. 607-644; F. Ruiz Martín, “La Banca en España hasta 1782”, en El Banco de España. Una Historia Económica, Madrid, Banco de España, 1970; J. H. Elliott, El Conde Duque de Olivares. El político en una época de decadencia, Barcelona, Crítica, 1990; J. Fortea Pérez, Monarquía y Cortes en la Corona de Castilla. Las ciudades ante la política fiscal de Felipe II, Valladolid, Cortes de Castilla y León, 1990; P. Schwartz, “Juntar erarios y montes de piedad: un arbitrio barroco ante las Cortes de Castilla”, en Revista de Historia Económica, XIV (1996), págs. 53-90; L. Perdices de Blas y J. Reeder, Diccionario de pensamiento económico en España 1500-1812, Madrid, Fundación ICO, Editorial Síntesis, 2000; Diccionario de pensamiento económico en España 1500-2000, Madrid, Fundación ICO, Editorial Síntesis, 2003.
John Reeder