Vedel, Pierres. Picardía (Francia), f. s. XV-p. s. XVI – Albarracín (Teruel), 30.V.1567. Ingeniero, arquitecto y escultor.
Procedente al parecer de la Picardía francesa, no se sabe cuándo nació, ni cuándo llegó a España. Probablemente residiera primero en Navarra, donde casó con Clara Vizcarret, natural de dicho lugar (diócesis de Pamplona). Se suele admitir su presencia en Aragón desde 1535, aunque su actuación sólo está documentada desde 1544. Contratado por concejos e instituciones eclesiásticas, actuó en las provincias de Teruel, especialmente, y de Zaragoza. Sus restos y los de su esposa fueron sepultados en la capilla del evangelio de su última obra, la iglesia de Santa María de Albarracín, que no pudo concluir. Un procesillo incoado en 1608 por fray Pedro Vedel y Juan Vedel, nos informa sobre las realizaciones más importantes de su padre. Al decir de sus hijos, entre sus “obras eroycas” destacan tres de ingeniería: la difícil consolidación de la torre de San Martín de Teruel (1549-51), que presentaba riesgo claro de colapso, y en la que desplegó una gran osadía y maestría técnica, lo que provocó una enorme expectación; la traída de aguas a Teruel (1551-1558), que contiene el más importante acueducto renacentista español del siglo XVI, el acueducto-viaducto de los Arcos (1553-1554), monumental obra de cantería, que por su esbeltez y reducido espesor aproximan la obra al gótico en lo estructural, aunque su almohadillado lo acerca a un lenguaje más renacentista en lo formal (singular por su doble orden de vanos, el primero —establecido mediante aperturas en las bases de las pilastras, con arquillos de medio punto— permite el paso de peatones e, incluso, de caballerías); y la Mina de Daroca (1555-1562), el mayor túnel excavado en la España del Quinientos, realizado con objeto de mitigar las inundaciones de la ciudad zaragozana. De seis metros de ancho, por entre siete y ocho de alto, y seiscientos de longitud (comprende, además, la barbacana de encauzamiento, el desagüe, el azud de salida...), es una tarea descomunal para los medios técnicos de la época. Su epitafio refleja sus dos obras más prestigiadas en el momento: “Hizo la mina de Daroca y los Arcos y Fuentes de Teruel”. También talló la piedra; por ejemplo, realizó varias fuentes turolenses, hoy perdidas.
Obras de ~: Reforma estilística del interior de la iglesia parroquial de San Miguel, Fuentes de Ebro, 1546-1550; Reparo, tras el incendio, de la iglesia colegial de la Natividad de N.ª Señora, Mora de Rubielos, 1544-1549; Reparo, ante amenaza de ruina, de la Torre de San Martín (1308-1316), Teruel, 1549- 1551; Traída de aguas a Teruel, 1551-1558; Mina de Daroca, 1555-1562; Elevación del cuerpo de la Catedral de El Salvador, Albarracín, 1556-1560; Iglesia parroquial de Santa Eulalia del Campo, 1556-1566; Iglesia de Santa María, Albarracín, 1566- 1567.
Bibl.: M. Almagro Basch, “Dos curiosos documentos sobre la construcción de la Iglesia de S.ª M.ª de Albarracín y el arquitecto Quinto Pierres Vedel”, en Teruel n.º 6, Instituto de Estudios Turolenses, (1951), págs. 131-140; C. Tomás Laguia, “Breves notas sobre el arquitecto Pierres Vedel y su familia”, en Teruel, n.º 20 (1958), págs. 113-119; S. Sebastián, “El arquitecto francés Quinto Pierres Vedel”, en Archivo Español de Arte, n.º 140, Madrid, Instituto Diego Velázquez, 1962, págs. 289- 301; C. L. de la Vega y de Luque, “Inventario de los bienes de Quinto Pierres Vedel”, en Boletín Informativo, (Teruel) n.º 35 (1974); J. Ibáñez Fernández, “Pierres Vedel y la revolución arquitectónica en el ámbito turolense”, cap. IV en J. Ibáñez Fernández, Arquitectura aragonesa del siglo XVI, Institución Fernando el Católico, Zaragoza, 2005, págs. 371-541.
Manuel Silva Suárez