Moncada, Guillermo de. ?, c. 1250 – Guissona (Lérida), 3.XI.1308. Comerciante, cónsul y obispo.
Perteneció a una de las familias más prominentes de la Cataluña medieval que emparentó en más de una ocasión con la Monarquía aragonesa, como su abuelo Guillermo de Moncada con Constanza de Aragón, hija de Pedro II, matrimonio por el cual se vinculó el señorío de Aytona a la casa de Moncada. De este matrimonio nació Pedro de Moncada, el cual heredó el cargo de senescal de Cataluña y la baronía de Aytona y que casó con Sibila de Abarca con la cual tuvo nueve hijos. Fue monje dominico.
La cercanía con la dinastía se ve en la trayectoria de varios de sus miembros, así como su abuelo Guillermo de Moncada falleció junto a su hermano Ramón en las operaciones militares que precedieron a la conquista de Mallorca en 1229. Otros miembros participaron en diversas campañas en Túnez y Sicilia, y en el caso de Guillermo su familiaridad con Jaime II quedó demostrada en el tratamiento de primo que el Monarca le dio en 1294.
Uno de los intereses que marcó el reinado de Jaime I fue la expansión territorial y comercial en el Mediterráneo, que comprendía tanto las costas norteafricanas como el sur de Italia, interés que también mostraron sus descendientes, como fue el caso de Jaime II. Esta expansión fue la causa que impulsó el desarrollo de los consulados de mar y ultramar. Uno de los primeros en establecerse fue en Alejandría para el que Moncada fue nombrado como cónsul de alfondico (aduana) el 11 de marzo de 1263, estando el Rey en la ciudad de Ejea por un período de dos años, concediéndole la jurisdicción civil y criminal sobre los hombres del lugar que debían hospedar, según el mandato real, a todo vasallo con sus mercancías, pagando al cónsul el derecho de sisa que le reconocía la mitad de las ganancias, correspondiendo la otra mitad al Rey.
Fue elegido obispo de Urgel en 1295; pero no prestó la obediencia canónica al arzobispo de Tarragona hasta 1299, año en que regresó de su embajada en Sicilia por mandado del papa Bonifacio VIII. Durante su obispado ordenó las distribuciones económicas del clero, asignó la pensión que correspondía a los que estudiaban fuera, reestructuró los arcedianos y creó la archidiócesis de Cerdaña.
Falleció en Guissona el 3 de noviembre de 1308 como obispo de Urgel.
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Diccionario Biográfico Español