Jáuregui, Gaspar de. El Pastor. Villarreal de Urrechu (Guipúzcoa), 19.IX.1791 – Vitoria (Álava), 19.XII.1844. Guerrillero, militar, gobernador.
Nació en el seno de una familia humilde en el caserío de Arriaran-gaikoa, hijo de Miguel de Jáuregui y de Escolástica Izaguirre, del caserío de Zabaleta (Guipúzcoa).
Es probable que, desde muy pronto, acompañase a su padre para ayudarle en el oficio de pastor de ovejas, que luego ejercería él mismo y que le proporcionaría el apodo por el que fue conocido durante la Guerra de la Independencia, El Pastor.
El 16 de agosto de 1809 figura en su hoja de servicios como la fecha en la que sentó plaza como soldado en una de las unidades de voluntarios que se estaban organizando en su provincia por aquellas fechas. En realidad, se trataba de una pequeña partida de guerrilla, de unos siete hombres, todos ellos paisanos, que operaba en las inmediaciones del Alto de la Descarga.
Se abastecían de lo que podían requisar en los pueblos de las inmediaciones o arrebatar a los imperiales.
A lo largo de los años 1809 y 1810 participó en más de una veintena de acciones de guerra contra los correos, convoyes y guarniciones franceses en Vizcaya, Guipúzcoa y Navarra, aunque fue en su región natal donde más se prodigó el joven guerrillero. En mayo de 1810 era ya subteniente y, en septiembre, teniente. En diciembre de 1810, de acuerdo con Francisco Espoz y Mina, comandante del Corso Terrestre en Navarra, creó el primer Batallón de Voluntarios de Guipúzcoa —o primer regimiento ligero, tal y como figura en su hoja de servicios— reuniendo a los miembros de su partida con los guipuzcoanos que estaban sirviendo con las tropas navarras.
En 1811 y 1812, continuó hostigando los puestos franceses en el País Vasco, de modo que las tropas que los protegían apenas si podían abandonar las casas fortificadas que les servían de refugio. En una de estas acciones, en Vergara (6 de enero de 1812) fue herido de gravedad en el pecho por una bala francesa.
La constante actividad de Jáuregui a favor de la causa patriota sirvió para que fuera ascendido a coronel de tropas ligeras el 30 de octubre de 1812. Por estas fechas mandaba ya tres batallones, 1.º, 2.º y 3.º de Voluntarios de Guipúzcoa, cada uno de ellos con una fuerza teórica de mil doscientas plazas, e integrados en el 7.º Ejército bajo el mando de Gabriel de Mendizábal.
Después de la batalla de Vitoria (21 de junio de 1813), las tropas de Jáuregui aparecen reunidas a la 1.ª brigada, 2.ª división del 4.º Ejército, con la que combatieron en San Marcial (31 de agosto de 1813), contribuyendo de forma decisiva a la derrota de la ofensiva francesa que pretendía relevar a la asediada guarnición de San Sebastián.
Acabada la Guerra de Independencia, Jáuregui abandonó la milicia pasando a la situación de retiro como coronel de dispersos el 14 de octubre de 1814.
En 1815 fue nombrado alcalde y juez ordinario de su natal Urrechu por el rey Fernando VII.
Sin embargo, tras el golpe de estado de Riego, Jáuregui declaró su apoyo al nuevo régimen constitucional.
El 20 de junio de 1821 se reincorporó al servicio como comandante de Milicias con grado de coronel, participando en varias operaciones contra algunos de sus antiguos camaradas de armas, que se habían decantado por los absolutistas y habían levantado partidas realistas.
Triunfante la contrarrevolución absolutista, Jáuregui se exilió en Francia, interviniendo en algunas intentonas liberales junto con su antiguo jefe Espoz y Mina. Después de la muerte de Fernando VII, pudo regresar a España (12 de octubre de 1833).
Al producirse el levantamiento carlista contra Isabel II, Jáuregui fue ascendido a brigadier de los Reales Ejércitos y se puso al mando de una columna de voluntarios.
El 29 de agosto de 1836 fue ascendido a mariscal de campo y se le entregó el mando de la 5.ª división del Ejército del Norte. En septiembre de 1837, Jáuregui pidió la baja por enfermedad y se retiró al cuartel general en Irún hasta el final de la guerra.
Restaurada la paz civil con el Abrazo de Vergara (1839), el mariscal Jáuregui fue elegido alcalde de sacas por la circunscripción de Urrechu. Ahora bien, su apoyo al fracasado pronunciamiento de 19 de octubre de 1841, le forzó una vez más a exiliarse en Francia, donde permaneció hasta la caída del Gobierno de Espartero. En julio de 1843 entró en San Sebastián, siéndole encargado por el Gobierno provisional que ocupase la capitanía general de las provincias vascongadas, cargo que desempeñó hasta septiembre del mismo año. Al cesar en el mismo, pasó a Vitoria, donde residió hasta su muerte.
Fuentes y bibl.: Archivo Histórico Militar (Segovia), Secc. 1.ª, leg. J-89.
E. Rodríguez-Solís, Los guerrilleros de 1808. Historia popular de la Guerra de Independencia, Madrid, Imprenta de Fernando Cao y Domingo de Val, 1887; J. I. Lasa Esnaola, Jáuregui el guerrillero (un pastor guipuzcoano que llegó a mariscal), Bilbao, La Gran Enciclopedia Vasca, 1973.
Antonio J. Carrasco Álvarez
