Molina Herrera, Antonio de. Villanueva de los Infantes (Ciudad Real), c. 1550 – Cartuja de Miraflores (Burgos), 21.IX.1612. Escritor ascético, venerable, agustino (OSA), cartujo (OCart.).
Hijo de Antonio de Molina y Francisca de Herrera, pertenecientes a una familia con desahogo económico y estima de la formación humana, pues al menos tres de sus hijos tuvieron una formación académica alta: uno, doctor, canónigo de la Catedral de Orense; otro, doctor en Leyes y después cartujo y prior del Monasterio de Las Cuevas de Sevilla. Antonio fue enviado a estudiar a Salamanca, pero pronto cambió el claustro universitario por el monástico; ingresó en el Convento de San Agustín, donde aún perduraba la huella de dos santos que habían pasado por allí no hacía mucho; en esa fecha, santo Tomás de Villanueva, paisano, estaba de arzobispo de Valencia (falleció en 1555), y san Alonso de Orozco (fallecido en 1591) llegaría de prior al convento de Valladolid.
Allí realizó el noviciado y profesó en 1575, y continuó la carrera eclesiástica en la Universidad; en Salamanca coincidió con fray Luis de León al reintegrarse al convento y a la Universidad después de ser absuelto por la Inquisición (1576), y presenció la obtención de la Cátedra de Filosofía Moral (1578), y la de Biblia (1579). Al terminar los estudios eclesiásticos fue trasladado al convento burgalés del Santo Cristo, casa grande y notable —de donde acababa de salir hacia Aragón fray Pedro Malón de Echaide para alentar la reforma de los observantes—, y como lector que era, en 1587, tuvo la exposición de una conclusión teológica en el capítulo provincial celebrado en Toledo, tras el que salió elegido prior del convento de Soria.
En el transcurso de este mandato dejó la Orden Agustina para ingresar en la cartuja de Miraflores (Burgos), donde profesó en 1590, atraído por la vida de recogimiento, oración y silencio prescritos en la Regla de San Bruno, que era lo que siempre buscó. Entre los agustinos que le conocieron llamó mucho la atención el paso que había dado; se cuenta que, años después, un antiguo compañero agustino le preguntó sobre su nueva situación, y muy lacónicamente respondió: “Hombres dejé, hombres encontré”.
Tuvo que hacer de consejero y confesor de muchas y distinguidas personas que desde la cercana ciudad de Burgos llegaban al monasterio atraídas por la fama del padre Molina, y tuvo que rechazar, también aquí, toda prelacía, como sucedió en 1605 cuando fue nombrado prior de la cartuja de la Defensión de Jerez.
Falleció en Burgos, el 21 de septiembre de 1612, con fama de santidad, como estimaron el pueblo y los religiosos, luego acrecentada al haber encontrado, bastante tiempo después, su cuerpo incorrupto.
Conociendo su preparación académica, sus cualidades literarias y su intensa espiritualidad, el arzobispo de Burgos, cardenal Zapata, con quien hablaba frecuentemente, le animó a que pusiese por escrito toda esa ciencia espiritual que él vivía, y algunos de sus escritos los dedicó al prelado cuando se imprimieron.
La Instrucción de sacerdotes y los Ejercicios espirituales fueron obras muy populares, manuales de formación continua para generaciones de eclesiásticos que, superando el ámbito peninsular, se difundieron por Europa traducidos en varios idiomas (latín, inglés, francés, italiano, portugués...), y de los que llegaron a conocerse docenas de ediciones. Por la calidad y riqueza de su lenguaje la Real Academia Española incluyó el nombre del padre Antonio de Molina en el Diccionario de la lengua castellana [Diccionario de Autoridades].
Obras de ~: Conclusiones de Teología, c. 1588 (desapar.); Instrucción de Sacerdotes en que se les da Doctrina muy importante para conocer la alteza del sagrado oficio Sacerdotal [...], Burgos, 1608; Exercicio cuotidiano para los Frayles de la Cartuxa, Burgos, 1608; El P. Fr. Antonio de Molina Religioso en el Monasterio de Miraflores de la orden de la Cartuja. Escrive al Confesor del Rey Phelipe tercero contra los tributos, que se intentan poner al Estado Eclesiástico y Religioso, y a favor de la inmunidad Eclesiástica, año de 1610, Biblioteca Nacional de Madrid, ms. 17.848 (inéd.); Exercicios espirituales para personas ocupadas deseosas de su salvación, Burgos, 1613; Exercicios Espirituales, de las excelencias, provecho y necesidad de la oración mental, reducidos a doctrina y meditaciones [...], Burgos, 1615; A Treatise of mental prayer. In which Is briefly declared the manner how to exercice the inward Actes of Virtutes [...], St-Omer o Studamare, 1617; Instrucción de Sacerdotes, para celebrar el santo sacrificio de la missa, sacado de las obras del P. Antonio Molina [...] con un sumario de las principales ceremonias de ella, Madrid, LF Mojados, 1733; “Declaración del padre fray Antonio de Molina, cartujo, en la casa de Miraflores, prior que fue de la Orden de San Agustín, en las informaciones que acerca de la vida y escritos de Santa Teresa de Jesús se hicieron en Burgos”, en Escritos de Santa Teresa, añadidos é ilustrados por V. de la Fuente, Madrid, 1879, testimonio 49, pág. 404; “Vida del V.P.D. Miguel Colmenero, Vicario de Miraflores”, en P. D. Le Vasseur, Ephemerides Ordinis Cartusiensis, t. II, Mosntrolii, Typis Cartusiae S. Mariae de Pratis, 1891, pág. 487; La vida del gloriosísimo Padre S. Bruno, fundador y Patriarca de la Sagrada orden Cartuxa, Cartuja de Miraflores (inéd.); Tratado sobre los cuatro Novísimos (inéd.).
Bibl.: T. de Herrera, Alphabetum Augustinianum, t. I, Madrid, Typis Gregorii Rodríguez, 1644, pág. 33; Historia del Convento de San Agustín de Salamanca, Madrid, Tipografía Gregorio Rodríguez, 1652, págs. 349 y 416; N. de la Iglesia, Flores de Miraflores, Miraflores, por Diego de Nieua y Murillo, a costa de la Real Cartuxa de Miraflores, 1659, págs. 189- 190; G. G. Morozzo, Theatrum chronologicum sacri ordinis cartusiensis, Turín, J. Sinibaldus, 1681, págs. 140-141; J. V. Ortí y Mayor, Vida, virtudes, milagros y festivos cultos de Santo Tomás de Villanueva [...], Valencia, Juan González, 1731, pág. 2; M. Vidal, Agustinos de Salamanca. Historia del observantísimo Convento de San Agustín N. Padre, Salamanca, F. García Honorato, 1751-1758, pág. 416; E. Flórez, España Sagrada, t. XXVII, Madrid, Imprenta de José Rodríguez, 1772, col. 564; N. Antonio, Bibliotheca Hispana Nova, t. I, Matriti, Joachimum de Ibarra, 1783, pág. 145 (trad. de G. de Andrés y M. Matilla Martínez, Madrid, Fundación Universitaria Española, 1998); F. Amat de Palu, Tratado de la Iglesia de Jesucristo o Historia de la Iglesia, vol. XI, Madrid, Benito Cano, 1793-1805, pág. 195; “Molina, Antonio de”, en B. Sebastián Castellanos (dir.), Biografía eclesiástica completa: vidas de los personajes del Antiguo y Nuevo Testamento [...], t. XIV, Madrid, Eusebio Aguado, 1862, pág. 201; L. Le Vasseur, Ephemerides Ordinis Cartusiensis, t. III, Montreuilsur- Mer, 1890, págs. 332-333; t. IV, pág. 579; F. Tarín y Juaneda, La Real Cartuja de Miraflores, Burgos, Hijos de Santiago Rodríguez, 1897, págs. 213 y 486-497; J. I. Valentí, San Bruno y la Orden de los Cartujos, Valencia, Est. Tipográfico Domenech, 1899, pág. 111; A. Aragón, San Bruno y la Cartuja, Barcelona, Imprenta La Hormiga de Oro, 1899, págs. 118-121; G. de Santiago Vela, Ensayo de una Biblioteca Ibero-Americana de la Orden de San Agustín, t. V, Madrid, Imprenta del Asilo de Huérfanos del Sagrado Corazón de Jesús, 1910, págs. 522-543; M. Ott, “Molina, Antonio de”, en The Catholic Encyclopedia, t. X, New York, Robert Appleton Company, 1911, pág. 435; T. de Herrera, “Registros de los PP. Generales”, en Archivo Agustiniano (AA), 7 (1917), pág. 343; I. Hervás y Buendía, Diccionario Histórico, Geográfico, Biográfico y Bibliográfico de la Provincia de Ciudad Real, Ciudad Real, Talleres Tipográficos de Mendoza, 1918, pág. 532; E. Toda, Bibliografía Espanyola d’Italia, Castell de Sant Miquel d’Escornalbou, Barcelona, Vidal Güell, 1927- 1931, t. III, págs. 126-128; t. IV, págs. 491-492; Dictionnaire de Théologie Catholique, t. X, Paris, Letouzey et Ané, 1928, cols. 2088-2090; I. Monasterio, Místicos agustinos españoles, Madrid, Editorial Agustiniana, 1929, págs. 409-425; C. Mejía Abadín, La doctrina del cartujo Antonio de Molina sobre el sacerdocio, tesis doctoral de la Universidad Gregoriana, 1939 (un resumen, Cádiz, 1939); C. M. Abad, “Ascetas y místicos del ‘siglo de Oro’ anteriores y contemporáneos de V. P. Luis de la Puente”, en Miscelánea Comillas, 10 (1948), págs. 57- 69; J. Valette (pres.), Escritores Cartujos de España (por un profesor de la Cartuja de N. S. de Aula Dei), Zaragoza, 1954 (ed. en ciclostyl), págs. 145-168; A. Palau y Dulcet, Manual del Librero Hispanoamericano, t. IX, Barcelona, Librería Palau, 1956, págs. 469-472; I. M.ª Gómez, “Escritores cartujos españoles”, en Studia Monastica, 10 (1968), págs. 285-291; VV. AA., Historia de la Espiritualidad, t. II, Barcelona, Juan Flors, 1969, págs. 333-336; J. M.ª Moliner, Historia de la Espiritualidad, Burgos, Monte Carmelo [1972], págs. 418-419; A. Manrique, “Molina, Antonio de”, en Q. Aldea Vaquero, T. Marín Martínez y J. Vives Gatell (dirs.), Diccionario de Historia Eclesiástica de España, t. III, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas-Instituto Enrique Flórez, 1973, pág. 1500; [Un cartujo], “Bibliografía del V. P. Antonio de Molina”, en AA, 60 (1976), págs. 267-287; 61 (1977), págs. 341-350; 62 (1978), págs. 191-210; A. Devaux, “Molina, Antonio de”, en M. Villers (dir.), Dictionnaire de Spiritualité, t. X, Paris, Beauchesne, 1980, cols. 1478-1481; B. Estrada Robles, Los agustinos ermitaños en España hasta el siglo xix, Madrid, Revista Agustiniana, 1988, pág. 102; M. Andrés, Los Místicos de la Edad de Oro en España y América, Madrid, Biblioteca de Autores Cristianos, 1996, págs. 231-233.
Francisco Javier Campo s y Fernández de Sevilla, OSA