Ayuda

Antonio Mira de Amescua

Biografía

Mira de Amescua, Antonio. Guadix (Granada), c. 1574 – 8.IX.1644. Dramaturgo.

Hijo natural de Melchor Amescua y Mira y de Beatriz de Torres y Heredia, debió de empezar la carrera eclesiástica en 1584, y nueve años después, en 1593, era ya presbítero. Hasta 1609 fue capellán parroquial de Guadix, de donde pasó después a la Capilla Real de Granada, en cuya universidad se licenció y doctoró en Leyes y Cánones. En 1602 conoció a Lope de Vega, y desde entonces su dedicación al teatro se fue intensificando. En la primera década del siglo XVII, Mira tenía ya estrenadas varias comedias: Las desgracias del rey don Alfonso el Casto, Cuatro milagros de amor, La hermosura de Fénix, El galán secreto, El primer conde de Flandes, La flor de lis de Francia o Las lises de Francia e, incluso, su pieza más famosa: El esclavo del demonio. A partir de 1606, se estableció en Madrid, y se sucedieron sus estrenos: Los caballeros nuevos, La adúltera virtuosa. En 1608 se le concedió una plaza en la capilla real de Granada, pero en 1617 volvió a Madrid. Dos años después, fue nombrado capellán del cardenal-infante Fernando. En 1620, el Ayuntamiento de Madrid le confió la organización de una mascarada con motivo de la beatificación de san Isidro. Participó después en los actos de canonización de san Isidro, san Ignacio y san Francisco Javier (1622). Amigo de Lope de Vega, no participó, sin embargo, en el homenaje que le rindieron sus discípulos a su muerte bajo el título de Fama póstuma. Durante estos años, escribió abundante poesía de circunstancias: octavas a la venida del príncipe de Gales (1623), décimas a la ciudad de Granada, poemas de corte satírico (a Ruiz de Alarcón, acusándole de plagio, le dirige el titulado “A un poeta corcovado que se valió de trabajos ajenos”), la Fábula de Acteón y Diana, etc. En 1631 obtuvo el cargo de arcediano de la catedral de Guadix, por lo que se trasladó definitivamente a su ciudad natal. En esta última etapa de su vida, aminoró el ritmo creativo; aun así, participó en alguna justa poética y escribió algún auto sacramental, como Las grandezas de Madrid o La ronda del mundo, estrenado en 1644. Fue muy admirado por sus contemporáneos: Rojas Villandrando lo menciona en El viaje entretenido; Pedro de Espinosa lo antologa en Flores de poetas ilustres (1605), Cervantes habla en el “Prólogo” a Ocho comedias y ocho entremeses (1615) de “la gravedad del doctor Mira de Mescua, honra singular de nuestra nación”, pero su fama fue decreciendo paulatinamente hasta nuestros días, en que se vuelve a reivindicar su figura como una de las más importantes del primer período áureo. La edición crítica de sus obras completas por la Universidad de Granada así lo demuestra. En la producción dramática de Mira dominan las obras de tema histórico: así, las tragedias El ejemplo mayor de la desdicha (ambientada en Constantinopla, en tiempos del emperador Justiniano); Próspera fortuna de don Álvaro de Luna y adversa de Ruy López de Ávalos, y Adversa fortuna de don Álvaro de Luna, Lo que toca al valor y príncipe de Orange (sobre el regicidio de Guillermo el Taciturno por el español Baltasar Gerardo); y las comedias El primer conde de Flandes, Las desgracias del rey don Alfonso el Casto, Las lises de Francia y La reina Sevilla y carboneros de Francia. En la historia sagrada se inspira otro puñado de piezas: El más feliz cautiverio y los sueños de José, Los prodigios de la vara y capitán de Israel, El arpa de David y El rico avariento o Vida y muerte de San Lázaro. Particular atención, llevado por su tendencia hacia los grandes efectos espectaculares, cobran sus comedias de santos: El mártir de Madrid, La mesonera del cielo, Vida y muerte de la monja de Portugal, El negro del mejor amo y, naturalmente, El esclavo del demonio, su obra más conocida.

En ella dramatiza la vida de un clérigo portugués, Gil de Santarem, fraile devoto que es arrastrado por las tentaciones de la carne y termina vendiendo su alma al diablo para finalmente arrepentirse y conseguir la salvación. Se trata de un motivo similar al que el dramaturgo inglés Christopher Marlowe había desarrollado, a fines del siglo XVI, en La trágica historia del Doctor Fausto, aunque Mira no llegó a conocer este drama sino la leyenda que lo sustentaba. Asimismo, escribió un buen número de autos sacramentales, la mayoría destinados a su representación en el Corpus: El Monte de la Piedad o El erario y Monte de Piedad, La fe de Hungría, El heredero, La mayor soberbia de Nabucodonosor, Pedro Talonario, La jura del príncipe... Entre sus comedias palatinas destacan La adúltera virtuosa, El palacio confuso, La confusión de Hungría, Galán, valiente y discreto, Amor, ingenio y mujer y Callar en buena ocasión. Cultivó también el género de la comedia de capa y espada en No hay burlas con las mujeres, El tercero de su dama y Cuatro milagros de amor o La fénix de Salamanca.

 

Obras de ~: Comedias: El arpa de Daniel, Madrid, Biblioteca Nacional de España (BNE), ms. 15516; Los caballeros nuevos, BNE, ms. 15284; El capitán Belisario y ejemplo mayor de la desdicha, BNE, Res. 112; El clavo de Jael, BNE, ms. 15531; Cuatro milagros de amor, BNE, ms. 15252; En la casa del tahúr poco dura la alegría, BNE, ms. res. 118; Examinarse de rey, o más vale fingir que amar, BNE, ms. 14953; Hero y Leandro, BNE, ms. 15264; La manzana de la discordia y robo de Elena, BNE, ms. 15645; El mártir de Madrid, BNE, ms. Res. 197; Los primeros mártires del Japón, BNE, ms. 17635; con Pérez de Montalbán y Calderón, El Polifemo y Circe, BNE, ms. res. 83; La hija de Carlos V, s. l., s. f.; El amparo de los hombres, s. l., s. f.; El animal profeta, San Julián, Sevilla, s. f.; La adúltera virtuosa, s. l., s. f.; El duque de Memoransi, s. l., s. f.; Lo que es no casarse a gusto, s. l., s. f.; Nardo Antonio, bandolero, s. l., s. f.; El tercero de su dama, s. l., s. f.; Lo que toca al valor, y el príncipe de Orange, Madrid, s. f.; Obligar contra su sangre, Sevilla, s. f.; El esclavo del demonio, Madrid, 1612; Las desgracias del rey don Alfonso el Casto, s. l., 1615; La rueda de la fortuna, Barcelona, 1616; Algunas hazañas de las muchas de don García Hurtado de Mendoza, marqués de Cañete, Madrid, 1622; El palacio confuso, Valencia, 1629; El hombre de mayor fama, Huesca, 1634; Galán, valiente y discreto, Valencia, 1636; Los celos de Rodamonte, Tortosa, 1638; Amor, ingenio y mujer, Zaragoza, 1640; El caballero sin nombre, Zaragoza, 1640; San Ramón Nonato, Zaragoza, 1640; La ventura de la fea, Zaragoza, 1645; Lo que puede el oír misa, Madrid, 1652; El pleito que tuvo el Diablo con el cura de Madridejos, Madrid, 1652; Lo que puede una sospecha, Madrid, 1653; El conde Alarcos, Madrid, 1653; La Fénix de Salamanca, Madrid, 1653; No hay burlas con las mujeres, o casarse y vengarse, Madrid, 1653; La próspera y adversa fortuna de don Álvaro de luna; El rico avariento, Madrid, 1655; Vida y muerte de San Lázaro, Madrid, 1655; La tercera de sí misma, Madrid, 1657; No hay reinar como vivir, Madrid, 1660; El primer conde de Flandes, Madrid, 1668; El galán secreto, Madrid, 1670; Vida y muerte de la monja de Portugal, Madrid, 1670; La confusión de Hungría, Madrid, 1671; Los prodigios de la vara, y capitán de Israel, Madrid, 1671; Los carboneros de Francia, o la reina de Sevilla, Madrid, 1673; La mesonera del cielo, Madrid, 1673; Las lises de Francia, Madrid, 1678; No hay dicha ni desdicha hasta la muerte, Madrid, 1679; El más feliz cautiverio, y los sueños de José, Madrid, 1792. Autos: El arpa de David, BNE, ms. 15516; La fe de Hungría, BNE, ms. 15318; El monte de Piedad, Biblioteca BNE, ms. 15490; Nuestra Señora de los Remedios, BNE, ms. 16724; Los pastores de Belén, BNE, ms., 15211; Los celos de San José, Madrid, 1655; El heredero, Madrid, 1655; El nacimiento de Cristo, Nuestro Señor, Madrid, 1655; El pastor lobo, Madrid, 1655; Las pruebas de Cristo, Madrid, 1655; La mayor soberbia humana de Nabucodonosor, Madrid, 1664; La Virgen de Guadalupe, Madrid, 1675. Teatro breve: Loa famosa, Madrid, 1655; Loa sacramental, Madrid, 1655; Loa sacramental al nacimiento de Cristo, Madrid, 1675; Teatro completo, coord. de A. de la Granja, Granada, Universidad, 2001-2010, 10 vols.

 

Bibl.: Q. Aldea, “Mira de Amescua, Antonio”, en Q. Aldea Vaquero, T. Marín Martínez y J. Vives Gatell (dirs.), Diccionario de Historia Eclesiástica de España, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Instituto Enrique Flórez, 1972, págs. 1492-1493; J. M. Villanueva Fernández, Vida y obra de Antonio Mira de Amescua (Hacia una tipología de sus comedias), tesis doctoral, Alicante, Universidad, 1986; A. de la Granja, “Sobre una comedia de Mira de Amescua vendida en 1603”, RILCE, 7 (1991), págs. 193-202; M. González Dengra, ‘El mártir de Madrid’, de Mira de Amescua: estudio crítico y edición, tesis doctoral, Granada, Universidad, 1991; I. Arellano y A. de la Granja, “Bibliografía esencial de estudios sobre el teatro de Mira de Amescua”, RILCE, 7-2 (1991), págs. 261-179; G. Vega García-Luengos, “Treinta comedias desconocidas de Ruiz de Alarcón, Mira de Amescua, Vélez de Guevara, Rojas Zorrilla y otros de los mejores ingenios de España”, en Criticón, 62 (1994), págs. 57-78; A. de la Granja y J. A. Martínez Berbel (eds.), Mira de Amescua en candelero. Actas del Congreso Internacional sobre Mira de Amescua y el teatro español del siglo XVII, Granada, Universidad, 1996, 2 vols.; J. A. Mira de Amescua, La adúltera virtuosa. La reina de Sevilla, y carboneros de Francia, ed. de M. Villanueva Fernández, Madrid, 1998; H. Urzáiz Tortajada, Catálogo de autores teatrales del siglo XVII, Madrid, Fundación Universitaria Española, 2002; M. Zugasti, “Mira de Amescua”, en J. Huerta Calvo (dir.), Historia del teatro español. I. De la Edad Media a los siglos de oro, Madrid, Gredos, 2003, págs. 897-927; A. Valladares Reguera, Bibliografía de Antonio Mira de Amescua, Kassel, Reichenberger, 2004.

 

Javier Huerta Calvo