Luján, Micaela de. Camila Lucinda, Lucinda o Lucinda Serrana. ?, s. m. s. XVI – p. m. s. XVII. Actriz.
Micaela de Luján se casó con el también actor Diego Díaz de Castro antes de 1590, con quien tuvo una hija llamada Ángela Díaz de Luján y probablemente una segunda hija llamada Dionisia. Sus inicios en la profesión teatral datan de 1594, cuando entró en la compañía de Alonso de Cisneros junto con su marido para actuar, encargarse del cobro de las entradas y aderezar los teatros para las representaciones, una vinculación que posiblemente se mantuvo en 1595.
Entre 1596 y 1598 parece ser que estuvo trabajando en la compañía que dirigió su marido, formación con la que participaría en las fiestas del Corpus de Segovia de 1598.
Alrededor de esta fecha se inició la relación adúltera entre Micaela de Luján y Lope de Vega. El dramaturgo aludió a su amor hacia Micaela en numerosos poemas y comedias coetáneos, especialmente en una serie de sonetos que se publicaron por primera vez en 1602, donde la actriz aparecía bajo el sobrenombre poético de Camila Lucinda, Lucinda o Lucinda Serrana. Hacia 1600 o 1601 Micaela se trasladó a Sevilla con su marido, mientras que Lope vivía entre Toledo y Madrid junto con su propia esposa. Sin embargo, no tardó mucho Lope en seguir sus pasos y al año siguiente fue a vivir a Sevilla junto con Micaela, cuyo marido se había marchado a Perú; para ese año Micaela ya había tenido cuatro hijos del dramaturgo: Ángela, Jacinta, Mariana y Juan. Al mismo tiempo, Micaela seguía trabajando como actriz, y como miembro de la compañía de Baltasar de Pinedo representó en 1602 en Sevilla y Granada y participó en las fiestas del Corpus de la capital hispalense. Al año siguiente continuó representando en Sevilla como integrante de la agrupación de Pinedo hasta que se desvinculó de ella cuando la compañía se trasladó a representar a Córdoba; al parecer, Micaela ya nunca más volvió a trabajar como actriz profesional.
En octubre de ese año nació en Sevilla Félix, hijo de la actriz y de Lope de Vega. Poco después Micaela recibió la noticia de que su marido había fallecido ese verano en Perú y en enero de 1604 llevó a cabo los trámites necesarios para obtener la tutela de sus hijos y poder administrar sus bienes y los de su difunto marido, un proceso burocrático en el que Lope de Vega actuó como su fiador. En julio Micaela se marchó a vivir a Toledo, donde Lope convivió con su propia esposa al mismo tiempo que mantenía su romance con Micaela. Hacia mayo de 1605 nació Marcela, nuevo fruto de la relación de la actriz con el dramaturgo madrileño. Menos de dos años después, en enero de 1607, nació Lope Félix, el último hijo que Micaela tuvo con Lope. La relación amorosa entre los dos llegó a su fin hacia 1608, última fecha en la que se hallan testimonios literarios de la relación de Lope con Micaela. Desde entonces parece que vivió sola en Toledo (pues los hijos que había tenido con Lope de Vega y que habían sobrevivido vivían con su padre).
En 1612 contribuyó con una modesta cantidad a una colecta para adquirir un ornamento y una manga de difuntos para la parroquia de San Miguel de Toledo, y un año después, en enero de 1613, se documenta que falleció una esclava negra que tenía. Apenas un par de años más tarde, cuando la carrera como actriz de Micaela era ya un recuerdo del pasado, era todavía evocada por Suárez de Figueroa en su Plaza universal (1615) como una de las prodigiosas “mujeres en representación” que España había tenido.
Bibl.: F. Rodríguez Marín, “Lope de Vega y Camila Lucinda: Conferencia de D. Francisco Rodríguez Marín, leída en el Ateneo de Madrid el día 21 de diciembre de 1913”, en Boletín de la Real Academia Española, vol. I, n.º 3 (1914), págs. 249-290; A. Castro y H. A. Rennert, Vida de Lope de Vega (1562-1635), ad. de F. Lázaro Carreter, Madrid, Anaya, 1969; T. Ferrer Valls (dir.) et al., Diccionario biográfico de actores del teatro clásico español, Kassel, Reichenberger, 2008.
Alejandro García Reidy
