Ayuda

Manuel Linares-Rivas y Astray

Biografía

Linares-Rivas y Astray, Manuel. Santiago de Compostela (La Coruña), 8.II.1866 – La Coruña, 9.VIII.1938. Dramaturgo.

Era hijo de Aureliano Linares Rivas, jurisconsulto y político gallego, ministro de Cánovas del Castillo, presidente del Consejo de Estado, académico de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas y senador vitalicio.

El futuro dramaturgo fue bautizado como Manuel Aureliano Linares Astray y con estos apellidos fue conocido al comienzo de su carrera. Un año después de la muerte de su padre, solicitó, y le fue concedida, “autorización para usar unidos como un solo apellido los dos de su padre”.

Por influencia de él, estudió Derecho. Cuando sólo tenía veinticuatro años, fue elegido diputado por el distrito de Órdenes, en La Coruña. Cinco años más tarde, le diagnosticaron una sordera incurable y progresiva.

En la década de 1890, se dedicó al periodismo e intentó el camino del teatro pero tardó mucho en lograr éxito. El 10 de octubre de 1894 contrajo matrimonio con Elisa Soujol O’Connor, viuda catalana de notable fortuna.

En 1903, Fernando Díaz de Mendoza aceptó su obra Aire de fuera para estrenarla en su beneficio. Esta “alta comedia en tres actos y en prosa” tuvo un gran éxito a la vez que desencadenó una fuerte polémica por su tema: una denuncia de la situación de la mujer casada, en un matrimonio sin amor. A partir de entonces, Linares-Rivas se convirtió en un dramaturgo de éxito, que estrenó de modo regular.

Curiosamente, ese primer éxito coincidió con la muerte de su padre, que tanto le había influido. A pesar de las diferencias que pudieran separarles, el hijo repitió luego muchas etapas vitales del padre: como él, entró en el mundo de la política, llegando a ser diputado en Cortes, ministro de Fomento, senador vitalicio desde 1920, con el Partido Conservador de Dato, y académico, primero de la Real Academia de Jurisprudencia y luego de la Española: ingresó el 15 de mayo de 1921 y contestó a su discurso Ortega y Munilla.

En el terreno teatral, estrenó más de un centenar de obras, representadas por actores y actrices de la categoría de María Guerrero y Fernando Díaz de Mendoza, Rosario Pino, María Tubau, Emilio Thuillier...

sobre las tablas de los teatros de la Princesa (hoy, María Guerrero), Español, Lara, Comedia, Eslava, Reina Victoria, Infanta Isabel, etc.

Desde 1903 hasta su muerte, es el autor con mayor número de obras publicadas en colecciones tan importantes como La Farsa o El Teatro Moderno. Para Federico Carlos Sainz de Robles, “contar con una obra de Linares Rivas fue colmo de aspiraciones de cuantas compañías escénicas rodaban y vibraban sobre los escenarios”.

El mayor éxito —y la mayor polémica— le llegó con La garra, en 1921, que supuso un verdadero acontecimiento social, como alegato a favor del divorcio, y es su única obra reeditada hasta hace poco.

También alcanzó notable resonancia su gira artística por Hispanoamérica en 1926.

Linares-Rivas conocía el teatro de Zola, Ibsen y Suderman.

Su obra dramática debe encuadrarse dentro del “teatro social” y puede relacionarse con el regeneracionismo político. Por su gran dominio de la técnica teatral, se le considera un seguidor de Benavente pero su teatro sigue un camino muy diferente, al abordar los más variados problemas sociales, psicológicos, religiosos, familiares, éticos y hasta metafísicos.

Cejador comparó su ideología con la de Campoamor: “Entrambos conservadores, burgueses pacatos en la vida y, sin embargo, en el pensamiento de sus escritos, revolucionarios y disolventes”. Irónicamente, comentaba Linares-Rivas: “Yo soy liberal, convencidamente liberal, en fin, tan liberal que, en política, tuve que hacerme conservador”.

Hace mucho que no se representa de modo habitual su teatro y buena parte de la crítica tampoco lo estima favorablemente. Así, para Francisco Ruiz Ramón, el teatro de Linares-Rivas representa “la versión bronca y extremista de la vertiente de crítica burguesa de la burguesía del teatro de Benavente, despojado de la ironía, aticismo y ambigüedad, así como de las cualidades de lenguaje y construcción teatral propios de la fórmula benaventina”.

En este sentido, podría enlazar Linares-Rivas con el teatro de tesis decimonónico, en una versión naturalista más avanzada pero forzando los personajes y las situaciones para demostrar lo que previamente había decidido el autor.

Gwynne Edwards opina que sus personajes “son simplemente personificaciones de los diversos aspectos defendidos por la tesis, están manipulados por el autor y adolecen de falta de vida. Del mismo modo, la trama es poco más que un argumento en ciernes, la conjunción de los diversos aspectos que componen el argumento”.

Más favorable se muestra Ángel Berenguer, para quien “[c]ree en la necesidad de cambios radicales y/o revolucionarios, y se expresa en el carácter radical progresista del discurso político que emplea en su teatro (teatro social), o en la apuesta constante por una radical transformación de los medios teatrales que emplea, aceptando las nuevas formas que se producen en otras áreas de la producción artística (expresionismo, surrealismo)”.

El profesor Fidel López Criado ha realizado una notable labor de revalorización del teatro de Linares- Rivas, que incluye el estudio, la publicación de obras conocidas o inéditas y hasta la representación de algunas obras, como Fausto y Margarita (en 1996) y La garra (en 1997).

Su defensa puede sintetizarse en estas preguntas: “¿Por qué ese afán de ocultación de un teatro comprometido con las circunstancias sociales y políticas de uno de los períodos más convulsos de nuestra historia? ¿Es posible que no interese ya un teatro que denuncia la corrupción política, el oscurantismo y la intransigencia religiosa, el liberalismo hipócrita y librecambista, la desigualdad y la injusticia social, la discriminación sexual y el maltrato de la mujer, la marginación del campesino, el hambre y la pobreza, la explotación del trabajador y los males de la sociedad capitalista moderna?”.

 

Obras de ~: Aire de fuera, Madrid, 1903; El abolengo, Madrid, 1904; María Victoria, Madrid, 1904; Porque sí, Madrid, 1904; La cizaña, Madrid, 1905; Lo posible, Madrid, 1905; En cuarto creciente, Madrid, 1905; Bodas de Plata, Madrid, 1905; El ídolo, Madrid, 1906; Añoranzas, Madrid, 1906; La fragua de Vulcano, Madrid, 1906; El mismo amor, Madrid, 1907; Cuando ellas quieran, Madrid, 1908; Nido de águilas, Madrid, 1908; El caballero lobo, Madrid, 1909; Lo que engaña la verdad, Madrid, 1909; La fuente amarga, Madrid, 1910; La magia de la vida, Madrid, 1910; Mientras suene la gaita, Madrid, 1910; El buen demonio, Madrid, 1911; Comedias escogidas, Madrid, Renacimiento, 1911; Flor de los pazos, Madrid, 1912; Doña Desdenes, Madrid, 1912; La raza, Madrid, 1912; Camino adelante, Madrid, 1913; Como buitres, Madrid, 1913; La razón de la sinrazón, Madrid, 1913; La fuerza del mal, Madrid, 1914; La garra, Madrid, 1914; Obras Completas, Madrid, 1914-1922, 16 vols.; Fantasma, Madrid, 1915; La espuma de champagne, Madrid, 1915; El milagro, Madrid, 1916; Como hormigas, Madrid, 1917; Las zarzas del camino, Madrid, 1917; En cuerpo y alma, Madrid, 1918; Cobardías, Madrid, 1919; Cristobalón, Madrid, 1920; Frente a la vida, Madrid, 1920; La mala ley, Madrid, 1923; Primero, vivir, Madrid, 1926; Como Dios nos hizo..., Madrid, 1928; Todo Madrid lo sabía, Madrid, 1931; ¡Déjate querer, hombre!, Madrid, 1933; Obras escogidas, Madrid, 1947.

 

Bibl.: M. Bueno, Teatro español contemporáneo, Madrid, Renacimiento, 1909, págs. 179-199; A. González Blanco, Los dramaturgos españoles contemporáneos, Valencia, Cervantes, 1917, págs. 171-204; R. Pérez de Ayala, Las máscaras, Madrid, Calleja, 1919, 2 vols.; F. C. Sainz de Robles, “Nota preliminar”, en M. Linares Rivas, Comedias escogidas, Madrid, Aguilar, 1947; El Caballero Audaz, Galería, IV, Madrid, 1948, págs. 507-512; E. Díez Canedo, Artículos de crítica teatral, I, México, Ed. Joaquín Mortiz, 1968; F. C. Sainz de Robles, “Manuel Linares Rivas”, en La Estafeta Literaria (Madrid), n.º 460 (1971), pág. 25; F. Ruiz Ramón, Historia del teatro español, siglo xx (2.ª ed.), Madrid, Cátedra, 1975; J. Rubio Jiménez, Ideología y teatro en España (1890-1900), Zaragoza, Pórtico, 1983; A. Zamora Vicente, Historia de la Real Academia Española, Madrid, Espasa Calpe, 1999; F. López Criado, El teatro de Manuel Linares Rivas, La Coruña, Diputación Provincial, 1999, 3 vols.

 

Andrés Amorós Guardiola

Personajes similares