Juvenco. Caius Vettius Aquilinus Iuvencus. Hispania, s. m. s. III – p. m. s. IV. Escritor.
Se sabe por san Jerónimo, única fuente antigua que le menciona, que fue natural de Hispania (Jerónimo, Sobre los hombres ilustres [De viris illustribus], 84), aunque no se precisa de qué región. Su nombre hace pensar que fuera descendiente o familiar del Vettius Aquilinus que fue cónsul el año 286, del que pudo ser coetáneo, y del senador Caius Vettius Aquilinus de tiempos del emperador Cómodo (180-192), aunque de ninguno de ellos se tienen noticias de su relación con Hispania.
San Jerónimo alude a él en varias obras, aunque las principales referencias se encuentran en Sobre los hombres ilustres ([De viris illustribus], 84), redactada en Oriente el año 393, en la que indica que fue un presbítero perteneciente a la elite social hispano-romana (nobilissimi generis Hispanus) y que en tiempos del emperador Constantino (306-337) puso en metro latino los cuatro Evangelios, además de escribir algunos hexámetros sobre el orden de los sacramentos.
En la Crónica del mismo autor (Olimpiada, 278, es decir, año 333 d. C.) se reitera el origen hispano y su condición de presbítero; por fin, en un último documento (Jerónimo, Epístolas, 70) se insiste en su datación en época constantiniana. De estos escasísimos datos depende toda la información biográfica de Juvenco, confirmada, en parte, por el propio autor que, en el epílogo de su obra (Los cuatro libros de los Evangelios, 4, 805-809) se identifica como contemporáneo de Constantino. Al igual que Prisciliano, Prudencio, Orosio o Hidacio, todos ellos destacadas figuras del temprano cristianismo hispano, perteneció a los círculos de la nobleza de su tiempo.
Juvenco fue autor de una Historia Evangélica o, mejor, según Codoñer, Evangeliorum libri quattuor (Los cuatro libros de los Evangelios), redactada hacia el año 330 y que ha llegado hasta hoy en diversas fuentes manuscritas de las que la más antigua conservada data del siglo VII; de la importancia que se dio a esta obra en el medievo puede dar idea el elevado número de copias conservadas de los siglos VIII-XIII y las referencias a ella en autores de la talla de san Isidoro o Petrarca.
La obra es una narración en verso de la vida de Jesús, respetando fielmente el texto bíblico y basada principalmente en el Evangelio de Mateo, que buscaba crear un género poético de corte cristiano en un tiempo de tolerancia religiosa auspiciada por las medidas legales de Constantino y Licinio del año 313, el llamado Edicto de Milán. El mismo Juvenco indica que la redacción y difusión pública de la obra fue posible por “[...] la paz del mundo, a la que favorece el benévolo emperador de la tierra abierta, Constantino” (Juvenco, 4, 805-809; trad. de M. Castillo).
Se le considera tradicionalmente un imitador de Virgilio en cuanto que intenta crear un género épico comparable formalmente a la épica pagana de tiempos augusteos pero con contenido cristiano (“La gloria de la ley divina acoge [...] en mis versos los terrenales ornamentos de la lengua [...]”, Juvenco, 4, 805).
Su obra tuvo gran trascendencia desde finales de la Antigüedad y a lo largo del Medievo.
Obras de ~: Historia Evangélica o Evangeliorum libri quattuor (Los cuatro libros de los Evangelios), c. 330 (ed. castellana de M. Castillo); se considera perdida una obra sobre el orden de los sacramentos que cita san Jerónimo.
Bibl.: Z. García Villada, Historia eclesiástica de España, vol. I.2, Madrid, Blass, 1929, págs. 147 y ss.; E. R. Curtius, Literatura europea y Edad Media Latina, vol. II, México, Fondo de Cultura Económica, 1955; J. M. F. Marique (ed.), Leaders of Iberian Christianity 50-650 A. D., Boston (Mass.), Saint Paul Editions, 1963; K. F. Stroheker, “Spanische Senatoren der spätrömischen und westgotischen Zeit”, en Madrider Mitteilungen, 4 (1963), págs. 107-132; J. M.ª Blázquez, “Die Rolle der Kirche in Hispanien im 4. und 5. Jahrhundert”, en Klio 63.2 (1981), págs. 649-660; C. Codoñer, “Los escritores hispanos cristianos”, en Historia de España de R. Menéndez Pidal, II.2. Hispania romana. La sociedad, el derecho, la cultura, Madrid, Espasa Calpe, 1982, págs. 541-545; E. Borrell, Studia Iuvenciana, Barcelona, Universidad, 1990; Las palabras de Virgilio en Juvenco, Barcelona, Universidad, 1991; M. Castillo (ed.), Juvenco. Historia evangélica, Madrid, Gredos, 1998, con amplia bibliografía hasta esa fecha; J. M.ª Blázquez, “Recientes aportaciones a la situación de los judíos en la Hispania tardoantigua”, en E. Romero (ed.), Judaísmo hispano. Estudios en honor de José Luis Lacave Riaño, Madrid, CSIC, 2003, págs. 409-425; M.ª C. Gil Abellán, La Historia Evangélica de Juvenco en la edición de Faustino Arévalo, tesis doctoral, Murcia, Universidad, 2004.
Juan Manuel Abascal