Bonanome, Juan Bautista, Italia, p. m. s. xvi – Madrid, 1573, ant. Escultor.
Viene a España desde Roma, en compañía del también escultor Giovanni Antonio Sormano, conduciendo los regalos de escultura, especialmente una serie de los doce césares, desde Julio César hasta Carlos V, con la que obsequia el cardenal Giovanni Ricci de Montepulciano a Felipe II en 1561. En la carta que el prelado escribe al Rey le informa que envía al cuidado de estas esculturas anticuarias a los artífices que las han ejecutado, por si sufrían algún desperfecto durante el viaje. También les califica de los mejores activos en Roma en aquel momento. En 1562, el Rey le asume a su servicio como escultor real al igual que su compañero. Esto explica que no contratase a otros escultores que llegan por estas fechas y con idénticos objetivos, como el milanés Valerio Holgiato, quien conducía las esculturas que regala Pío IV al Rey a través de su sobrino Annibal Altemps. Una de sus principales funciones fue recorrer la Península Ibérica en busca de canteras de mármol para realizar bustos, chimeneas, dinteles, etc., en las residencias reales. En 1563 realiza una fuente rústica en la Casa de Campo con las esculturas de Venus y Diana. En 1564 colabora con otros artistas en el escenario para que las damas de Isabel de Valois representen una comedia en el Alcázar. En 1565 se une a él su hermano Nicolás. Ambos trabajan en las fuentes de mascarones de los jardines de El Pardo bajo la supervisión de Juan Bautista de Toledo entre 1565 y 1567. Nicola Bonanome vino de Milán, siguiendo indicaciones de su hermano con veinticuatro retratos de emperadores romanos que terminó de rematar en España. Éstos se situaron en los jardines de la Casa de Campo de Madrid y se añadieron los de otros personajes contemporáneos como los príncipes de Bohemia, el Rey, Juan de Austria o el duque de Alba. Fueron tasados por Jacome Trezzo y Pompeo Leoni en 1573. Hasta 1578, Felipe II no gratificará al escultor por estas esculturas. El embajador imperial en Madrid, Hans Khevenhüller, propuso su compra al emperador Rodolfo II. Nicola Bonanome continuará la labor de su hermano de buscar jaspes por la geografía española. En 1570 se le paga por jaspes para la torre nueva del Alcázar de Madrid y por trasladar ciertas esculturas del Guardajoyas real a la casa que Felipe II había comprado a Bernardino de Mendoza. Será uno de los elegidos para tasar la fuente de jaspe verde de Roque Solario en el jardín de Aranjuez en 1580.
Obras de ~: busto del III duque de Alba, Alba de Tormes (atrib.); venera de la fuente de Venus de la Casa de Campo (atrib.); serie de los emperadores (Museo del Prado).
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Almudena Pérez de Tudela
