Ayuda

Alfonso Daniel Rodríguez Castelao

Biografía

Rodríguez Castelao, Alfonso Daniel. Rianxo (La Coruña), 30.I.1886 – Buenos Aires (Argentina), 7.I.1950. Médico, pintor y dibujante, escritor, figura destacada del nacionalismo gallego.

Hijo del matrimonio formado por Mariano Rodríguez Dios y Joaquina Castelao Genme, conoció Castelao, en plena niñez, la dura experiencia de la emigración por la que pasaron —en las décadas finales del siglo XIX— tantas familias gallegas. Embarcó, en efecto, junto a su madre, rumbo a Buenos Aires, donde los esperaba don Mariano, en 1895. Cinco años pasó la familia en tierras de la Pampa, atendiendo una pulpería, para retornar a Rianxo en 1900.

Tres años después, Castelao era bachiller en Artes y se matriculó en la Facultad de Medicina de la Universidad de Santiago. Licenciado en Medicina en 1909, con escasa vocación por la carrera (como estudiante se enroló en la Tuna, frecuentó tertulias en los cafés compostelanos e hizo sus primeras caricaturas de profesores y amigos, exponiendo dos obras en el II Salón de Humoristas de la madrileña sala Iturrioz en 1908), empezó a ejercer como médico en su pueblo natal, aunque por poco tiempo.

En 1909 ilustró la portada del número 1 de la revista Vida Gallega y al año siguiente fue diseñador e ilustrador del semanario local, de signo conservador, El barbero Municipal, de Rianxo, financiado en parte por su padre, que ejercería como alcalde de la villa en más de una ocasión. En años posteriores fue constante su presencia —con artículos políticos, dibujos, narraciones, caricaturas, viñetas, etc.— en la prensa gallega, en cabeceras como El Pueblo Gallego, La Zarpa, Galicia, Faro de Vigo, El País, El Noroeste, Mi Tierra, La Temporada de Mondariz, El Ideal Gallego, Diario de Pontevedra, A Nosa Terra, Noticiero de Vigo, etc. Colaboró también durante la Guerra Civil en el sector más beligerante de la prensa republicana como Nova Galiza. Boletín dos escritores antifeixistas de Barcelona, Nueva Galicia de Madrid o Pueblo de Valencia entre otros.

Absorbido por la actividad artística, presentó óleos y dibujos en diferentes exposiciones: Santiago (1909), Orense (1912), Centro Gallego de Madrid (1912), La Coruña (1912) y Madrid (1915). Interesado particularmente en el arte de la caricatura, pronunció conferencias sobre el tema en Vigo (1911), Orense (1912), Mondariz (1913) y Pontevedra (1917). Sus ilustraciones y colaboraciones escritas, de diverso asunto pero casi siempre centradas en Galicia, aparecen en páginas de las prensa de Madrid —El Liberal, El Sol, La Tribuna, Acción Gallega, La Esfera, La Ilustración Gallega y Americana, El Parlamentario— y de Hispanoamérica: La Voz de Galicia, Suevia y La Semana Universal, Opinión Gallega, A Nosa Terra, A Fouce o Revista Compostela, de Buenos Aires; Galicia y Diario de la Marina de La Habana, entre otros.

Complementariamente, su faceta artística se concretó en la tarea de ilustrador de libros y así sus grabados y dibujos figuran en portadas y páginas interiores de obras de escritores como Sofía Casanova, Otero Pedrayo, Wenceslao Fernández Flórez, Luis Antón de Olmet, Ramón Cabanillas, Gonzalo López Abente, Prudencio Canitrot, Noriega Varela, Francisco Camba, Pérez Lugín, Rafael López de Haro y muchos más.

En 1912 se casó con Virginia Pereira. El matrimonio tuvo un solo hijo, Alfonso, que murió prematuramente en 1928, a los catorce años.

En 1915 se encontraba en Madrid preparando oposiciones a la escala inferior del Cuerpo de Estadística, que aprobó, ingresando al año siguiente, en la delegación del Instituto Geográfico Estadístico de Pontevedra.

En Madrid se le otorgó la tercera medalla en la Exposición Nacional de Bellas Artes (1915). Regresó a la capital para opositar al Cuerpo Facultativo de Estadística, al que accedió como oficial tercero en 1919, pero mantuvo su residencia en Pontevedra, donde ejerció también como profesor de dibujo del Instituto. Una epidemia de gripe (1918) en su pueblo, Rianxo, le llevó, por segunda y última vez, a ejercer la medicina.

Las décadas de 1920 y 1930 representan una muy fructífera etapa artístico-literaria de Castelao y, simultáneamente, el desarrollo de una actividad política de signo nacionalista centrada en la reivindicación y defensa de los intereses y la personalidad histórica, cultural y lingüística de Galicia. En la línea artístico-literaria es clave su colaboración en la prestigiosa revista Nós (Orense, 1920), de la que fue director artístico.

En 1920 expuso en La Coruña los cincuenta dibujos del Álbum Nós (publicado en Madrid en 1931), que ese mismo año se expusieron en Madrid y Orense.

Pensionado por la Junta para Ampliación de Estudios de la Institución Libre de Enseñanza viajó por Europa (Francia, Bélgica, Alemania) y conoció las escuelas artísticas de la vanguardia europea. Muy poco interesado por el arte de las vanguardias, descubrió Castelao en aquel viaje, a su paso por Alemania, la técnica —sencilla y económica— del grabado en linóleo; técnica que él implantó enseguida en el arte gallego y que tuvo gran difusión a través de la llamada Escuela lineográfica de Pontevedra, de la que Castelao fue figura destaca. Numerosísimos libros y revistas —como Alborada, Cristal, Spes, Sal-Lux, o Sonata Gallega— de las décadas de 1920 y 1930, y aún posteriores, exhiben una rica producción de grabados de artistas gallegos (entre los que no falta Castelao) en linóleo y madera.

Fruto del viaje fueron también sus trabajos Diario 1921 (publicado tardíamente, en 1977) y “Cubismo” que se publicó en la revista Nós. Como narrador se revela en el relato Un ollo de vidro (1922), género al que volverá en Retrincos (1934) y, con el complemento de ilustraciones, en Cousas (1926 y 1929).

Ingresó en 1925 en el Seminario de Estudos Galegos con el discurso titulado O novo espírito. Al año siguiente fundó con Losada Diéguez la Coral Polifónica de Pontevedra (que presidió hasta 1932) y fue elegido miembro de número de la Real Academia Gallega.

Leyó su discurso de entrada —As cruces de pedra na Galiza— en 1934 y fue publicado en 1964. En ese mismo año, enfermo de la vista, viajó a Burdeos para acudir a la consulta del doctor Legranje y a continuación pasó algunos días en París. Becado nuevamente por la Junta de Ampliación de Estudios, viajó junto con su esposa en 1929 a la Bretaña francesa, donde estuvo cuatro meses. Fruto de su estancia en aquellas tierras es el estudio As cruces de pedra na Bretaña (1930).

Su trayectoria en las filas del nacionalismo se inició en 1916 cuando se afilió a la agrupación Irmandades da Fala creada ese mismo año. Como representante por Pontevedra, asistió, a finales de 1918, a la Primera Asamblea Nacionalista de Lugo y colaboró en la redacción del Manifiesto para la II Asamblea Nacionalista, asistiendo a la IV celebrada en Monforte en 1922, y a la VI celebrada en La Coruña (1930). Pronunció numerosas conferencias e intervino en mítines políticos de las fuerzas nacionalistas en los que se le admiró como orador. En 1931 fue uno de los fundadores del Partido Galleguista, del que sería figura destacada, como también lo fue en la campaña en la que se plebiscitaba el Estatuto de Galicia (su anteproyecto databa de 1932 y fue aprobado en junio de 1936) en la que desarrolló una intensa actividad, dibujando también carteles de propaganda. En 1931 publicó en Vigo un conjunto de sesenta y tres viñetas con el título de Cousas da vida. Almanaque 1931 que apareció en las páginas del Faro de Vigo.

Nombrado vicepresidente segundo de la Asociación de Escritores Gallegos en 1930, y secretario político del Partido Galleguista en 1933, Castelao obtuvo el escaño de diputado a Cortes en las elecciones de junio de 1931 y ese mismo año intervino en el Congreso de los Diputados en defensa del idioma gallego. Viajó a Barcelona en 1932, invitado por Francesc Macià, y en Madrid se entrevistó en 1933 con Azaña. Participó activamente en el llamado Pacto de Compostela, donde se fundó Galeuzca, que pretendía consolidar una España autonómica y federal en el ámbito de la Segunda República. En enero de 1933, durante una estancia en Madrid, diseñó los bocetos para los decorados de la obra Divinas palabras, a instancias del propio Valle-Inclán. En 1934 fue desterrado a Badajoz por sus supuestos ataques a Lerroux. Dos años después volvió a obtener escaño de diputado a Cortes (por la provincia de Pontevedra) por el Partido Galleguista, integrado en la coalición del Frente Popular.

Al estallar la Guerra Civil viajó a Barcelona y Valencia, intentó crear las milicias gallegas y colaboró con el Gobierno republicano. Quiso lograr el refrendo oficial por el Gobierno del Estatuto de Galicia pero, pese a sus esfuerzos a lo largo de varios años, no vería cumplida esta aspiración. La guerra inspiró sus álbumes Galicia mártir, Atila en Galicia y Milicianos (1937-1938). Enviado por el Ministerio de Propaganda republicano, viajó en 1938 a Moscú, Nueva York y La Habana; figuras y escenas de las dos últimas ciudades son el modelo de sus Dibujos de negros, editados en 1971.

En 1940 viajó a Buenos Aires, donde prosiguió su tarea política —mítines, conferencias, colaboraciones en prensa, actos políticos diversos— en el exilio, entre el afecto y la admiración de las comunidades gallegas de Argentina y Uruguay. Fueron constantes y multitudinarios los homenajes que recibió. En 1945, en la capital argentina, verdadera quinta provincia de Galicia, estrenó Os vellos non deben de namorarse, su única obra teatral. En 1944 publicó Sempre en Galiza, libro fundamental del pensamiento nacionalista del autor, que ese mismo año era elegido en Montevideo presidente del Consello de Galiza, representante del pueblo gallego en el exilio. Al año siguiente fundó — junto a catalanes y vascos— la revista Galeuzca, que recordaba el pacto nacionalista galaico-vasco-catalán de 1933. Ya en 1946 era ministro sin cartera del Gobierno en el exilio que presidía José Giral. Al año siguiente embarcó hacia Marsella y se dirigió a París donde asistió a una reunión del Consejo de Ministros del Gobierno de Giral, que acabó por caer. Castelao regresó a Buenos Aires, donde reencontró a su viejo amigo Ramón Otero Pedrayo, gran figura del galleguismo.

Aquejado de un cáncer de pulmón, logró acabar, en 1949, su monumental estudio As cruces de pedra na Galiza, que se publicaría, póstumo, en 1950, año en que Castelao falleció, el día 7 de enero, siendo enterrado el día 9 en el panteón del Centro Gallego del cementerio bonaerense de La Chacarita.

La vida y la obra de Castelao son un permanente homenaje a Galicia. Como político, defensor a ultranza de la legalidad republicana, abanderó el nacionalismo gallego y representó a la Galicia del exilio. Como artista se inspiró en el pueblo y su obra, contribuyó a defenderlo y dignificarlo, a interpretarlo en profundidad, a denunciar su marginación y pobreza, a censurar la opresión a la que se había visto sometido a lo largo de la historia. Como escritor, su raíz es también popular y se sirvió de la lengua del pueblo para crear su prosa, una prosa literaria que es modelo de sencillez, claridad y armonía. Gran retratista de gentes, sus historias se enraízan a veces en un lirismo de intensa emoción, pero es con frecuencia muy crítico y puede resultar irónico-burlesco o manifestar intenciones didácticas.

Acaso sean las Cousas, con su certera simbiosis de imagen y palabra —texto y dibujo—, su creación más personal.

Castelao dio altura estética a Galicia y fue difusor e intérprete de sus ideales como nación; de su lengua, su cultura y su personalidad como pueblo.

En el mes de diciembre de 2011, su obra fue declarada Bien de Interés Cultural de carácter inmaterial por parte de la Xunta de Galicia. Y en 2016, la Real Academia Gallega de Bellas Artes le dedicó el Día de las Artes Gallegas, que, desde 2015, se consagra a una personalidad relevante de la cultura gallega, como ha sido el caso del maestro Mateo (2015), Maruja Mallo (2017) o Alejandro de la Sota (2018).

 

Obras de ~: Un ollo de vidro, Ferrol, 1922; Cousas, La Coruña, Editorial e Imprenta Lar, 1926 (ilustrada); Segundo libro de Cousas, La Coruña, 1929 (ilustrada); As cruces de pedra na Bretaña, Santiago, Seminario de Estudos Galegos, 1930; Cincoenta homes por dez reás, La Coruña, 1930; Nós (álbum), Madrid, Casa Hauser y Menet, 1931; Retrincos, Santiago, 1934; Os dous de sempre, Santiago, Nos, 1934; Cousas, Santiago, Editorial Nós, 1934 [reúne los volúmenes publicados en 1926 y 1929]; Galicia mártir, Madrid-Valencia, Ministerio de Propaganda, 1937; Atila en Galicia, Valencia, Comité Nacional de la CNT, Sección Información Prensa y Propaganda, 1937; Milicianos, Nueva York, 1938; Sempre en Galiza, Buenos Aires, As Burgas, 1944; As cruces de pedra na Galiza, Buenos Aires, 1950; Os vellos non deben de namorarse, Vigo, Galaxia, 1953; Dibuxos de negros, Vigo, Galaxia, 1971; Diario 1921, Vigo, Galaxia, 1977.

 

Bibl.: A. Vilanova Rodríguez, Los gallegos en la Argentina, Buenos Aires, Ediciones Galicia, 1966; L. Seoane, Castelao artista, Buenos Aires, Alborada, 1969; J. A. Durán, El primer Castelao. Biografía y antologías rotas, Madrid, Siglo XXI, 1972; Historia de caciques, bandos e ideologías en la Galicia no urbana, Madrid, Siglo XXI, 1972; X. Alonso Montero, Castelao, Madrid, Akal, 1975; J. A. Durán, Castelao en “El Sol”, Madrid, Akal, 1976; R. Palmás, Castelao: prosa do exilio, Montevideo, Edicións do Patronato da Cultura Galega, 1976; R. Baltar Domínguez, Castelao ante la medicina, la enfermedad y la muerte, Santiago de Compostela, Bibliófilos Gallegos, 1979; V. Paz Andrade, Castelao na luz e na sombra, Sada-La Coruña, Ediciós do Castro, 1982; M.ª V. Carballo-Calero, La ilustración en la revista “Nós”, Orense, Diputación, 1983; X. Neira Vilas, Castelao en Cuba, Sada-La Coruña, Ediciós do Castro, 1983; L. Soto Fernández; Castelao, a UPG e outras memorias, Vigo, Ediciós Xerais, 1983; I. Sánchez Casado, Alfonso Rodríguez Castelao. 24 años en la Administración Pública Española (1915-1939), Barcelona, Anthropos, 1984; S. Á lvarez, Castelao y nosotros los comunistas, Sada-La Coruña, Ediciós do Castro, 1984; VV. AA., Crónicas. Castelao y los vascos, Bilbao, Idatz Ekintza, 1985; E. Blanco Amor, Castelao escritor, Sada-La Coruña, Ediciós do Castro, 1986; R. Otero Pedrayo, A miña amizade con Castelao, Sada-La Coruña, Ediciós do Castro, 1986; V. Bozal, Sátira y tragedia. Las imágenes de Castelao, Sada-La Coruña, Ediciós do Castro, 1987; R. Carvalho Calero, Escritos sobre Castelao, Sada-La Coruña, Ediciós do Castro, 1987; VV. AA., Congreso Castelao. Actas, Santiago de Compostela, Universidade de Santiago/ Xunta de Galicia/Fundación Castelao, 1989; J. Beramendi y R. Máiz, Los nacionalismos en la España de la II República, Santiago de Compostela, Siglo XXI/Consello da Cultura Galega, 1991; M. Rei Romeu, Arte e verdade (a obra literaria de Castelao), Pontevedra, Edicións do Cumio, 1991; S. López Lorenzo, Castelao humorista, Santiago de Compostela, Centro de Investigacións Lingüísticas e Literarias Ramón Piñeiro/ Xunta de Galicia, 1997; M. Rosales, A narrativa de Castelao, Santiago de Compostela, Sotelo Blanco, 1997; M. Cuquejo, “Bibliografía de Castelao”, en Para ler a Castelao. 1. Cronoloxía, entrevistas e bibliografía, Vigo, Galaxia, 2000, págs. 115-470; H. Monteagudo Romero, Castelao. Defensa e ilustración do idioma galego, Vigo, Galaxia, 2000; M. Aznar Soler y J. R. López García (eds.), Diccionario biobibliográfico de los escritores, editoriales y revistas del exilio republicano de 1939, vol. 2, Sevilla, Renacimiento, 2016, págs. 22-26; M. A. Seixas Seoane, Castelao. Construtor da nación, t. I (1886-1930), Vigo, Galaxia, 2019.

 

Luis Alonso Girgado

Personajes similares