Era hijo de Ignacio Irigoyen y de Francisca de la Quintana. Estudió la carrera naval en España ingresando como cadete de la Armada española. Combatió en la batalla de Trafalgar con el grado de guardia marina, bajo el mando del brigadier Ignacio de Álava en la nave Santa Ana. Resultó herido, pero por su heroico comportamiento fue ascendido a alférez de navío y trasladado a Buenos Aires.

Su nombre se destacó entre el de los pocos marinos de carrera que acompañó la gestación de la revolución de mayo de 1810. Participó en la jornada del Cabildo Abierto del 22 de mayo de 1810, votando por la moción que pedía la deposición del virrey. [...]