Nació a finales del siglo IV. Sucedió a su padre Hermerico en el año 438, momento en el cual los suevos se disponían a llevar a cabo una campaña en la Bética. Sabemos que en esas fechas su padre llevaba ya cuatro años enfermo, no está claro si fue una asociación al trono o una abdicación en su persona. En dicha campaña Réquila derrotó, cerca del río Genil, a Andevoto, apoderándose de un gran tesoro. No se sabe en calidad de qué se encontraba este personaje en la Bética. En el año 440 Réquila penetró en Mérida, convirtiendo la capital de Lusitania en un centro de poder suevo; poco después hizo prisionero en Mertola al comes Censorio, quien poco antes había llegado a su presencia como enviado imperial. En el año 441 Réquila tomó Sevilla, apropiándose de la Bética y la Cartaginense, que mantuvo en su poder incluso frente a las tropas enviadas por el Emperador al mando del magíster Vito. No está claro si se trató de un control político efectivo o sólo de saqueos periódicos, en cualquier caso los suevos se convirtieron en árbitros de la Hispania meridional. [...]