Gullón Fernández, Ricardo. Astorga (León), 30.VIII.1908 – Madrid, 11.II.1991. Crítico literario, fiscal, novelista.
Hijo único de Germán Gullón Nuñez y de Paula Fernández Botas, viene por parte paterna de una familia con influencia política, tanto a nivel provincial como nacional. El hermano de su bisabuelo Antonio, Pío Gullón, desempeñó varias carteras ministeriales, entre otras la de Ultramar en 1898; su propio padre, Germán Gullón Núñez, reconocido abogado leonés, fue diputado provincial. Su madre murió cuando Ricardo tenía cinco años, por lo cual fue educado en Astorga en la casa paterna por varias tías suyas.
La ciudad de Astorga conoció durante la infancia y juventud de Gullón un momento de esplendor cultural, en parte debido a un grupo de muchachos a los que el poeta Gerardo Diego bautizaría con el marbete de Escuela de Astorga. La formaban los hermanos Juan y Leopoldo Panero, Luis Alonso Luengo y Ricardo Gullón. Los Panero y Ricardo eran primos segundos. Iban juntos al colegio de los hermanos de La Salle, y empezaron pronto a publicar periódicos hechos a mano, hasta que años después editaron una guía de la ciudad de Astorga. Fueron años muy felices, repletos de lecturas, surtidas en parte por las excelentes bibliotecas de los Panero y de Germán Gullón.
El cierre del colegio de La Salle los dispersó, en parte porque los Panero fueron a estudiar a un colegio de San Sebastián. Gullón a los catorce años terminó el bachillerato, y fue enviado a Francia para aprender el idioma y hacer tiempo hasta que la edad le permitiese entrar en la universidad.
Comenzó a estudiar Derecho, en parte por tradición familiar y en parte por presión paterna, en la Universidad de Madrid en 1924, licenciándose en 1929. El derecho compartía ya entonces el tiempo con la verdadera afición de Gullón, las letras. Los años universitarios fueron enormemente intensos no sólo por los estudios, sino porque su vida literaria acaparaba una buena parte de su tiempo. Estableció contactos con los principales intelectuales de su época, fue invitado, entre otros, por José Ortega y Gasset a contribuir en Revista de Occidente, fundó una editorial con quien sería a lo largo de la vida uno de sus mejores amigos, Ildefonso Manuel Gil, el poeta y novelista maño. Preparando las oposiciones a fiscal, fundó con Gil la revista Literatura (1933), que alcanzó ventas elevadas, entre quinientos y seiscientos ejemplares, con colaboradores de lujo, como Gerardo Diego, y la Pen Colección de literatura, donde editaron libros importantes, entre otros, de Benjamín Jarnés, consejero y amigo de Gullón.
Ganó las oposiciones a fiscal en 1933, lo que le permitió casarse con Luisa Palacio Pintueles, asturiana nacida en Puerto Rico, y acto seguido salir destinado a Soria. Gullón y su mujer vivieron un poco divididos entre Madrid y Soria, y cuando hacían planes para instalarse definitivamente en la ciudad castellana, estalló la guerra, y a los pocos días, el 21 de julio de 1936 nació su primera hija, Soledad. Al año siguiente le trasladaron a Alicante. Allí pasó la guerra con su mujer e hija, ejerciendo Gullón diversos cargos en el ejército republicano. Tras la guerra y una depuración de treinta meses, se incorporó a la carrera, y fue destinado a Santander, de teniente fiscal. Los años santanderinos fueron muy productivos desde el punto de vista literario, pues trabajó en varios libros, una novela, nacida en Alicante, y un libro sobre novelistas ingleses contemporáneos, que terminó en Santander, donde en 1945, cuando nació su tercer hijo, Germán, era ya jefe fiscal de la Audiencia provincial.
Fue cofundador de la Escuela de Altamira, una asociación de críticos y pintores que dio un enorme impulso a la vida cultural del Santander de posguerra.
No obstante, las tentaciones de dejar la carrera fiscal y emprender una nueva se materializaron en 1956, cuando marchó a Puerto Rico, en parte llamado por Juan Ramón Jiménez para que le ayudase a poner un poco de orden en su obra y papeles. Un año después dejó la carrera fiscal y cambió su rumbo profesional; se dedicó a partir de entonces a la literatura. Juan Ramón murió y la Universidad de Texas en Austin, la capital del estado de Texas, le pidió a Gullón que editase un tomo de la revista Texas Quaterly dedicado a España. Cumplió su cometido, y le ofrecieron un puesto de catedrático en la Universidad de Texas, que aceptó gustoso; así empezó su periplo norteamericano, que le retuvo en Austin quince años, con varios períodos como profesor visitante en Stanford, New York University y la University of California, Los Ángeles, hasta que marchó en 1974 a la Universidad de Chicago, institución a la que estuvo unido seis años, para pasar luego a la Universidad de California, Davis, donde ya a sus ochenta años siguió impartiendo cursos de doctorado.
Los años americanos fueron los más productivos de su vida, y los que han dejado un legado crítico único en la literatura española, pues no sólo reflejan el saber de una persona que conoció íntimamente a la mayoría de los escritores de su tiempo, sino a alguien que domina la teoría literaria. Sus libros sobre Juan Ramón Jiménez, Galdós, cuya modernidad reivindicó, Unamuno y Antonio Machado, suponen un modelo constante para las nuevas generaciones de filólogos.
En 1989 recibió el Premio Príncipe de Asturias de las Letras y fue elegido académico de la Real Academia Española, a la que se incorporó en 1990.
Obras de ~: con L. Alonso Luengo, Los cuatro filetes del Apocalipsis, Astorga, Imprenta de Porfirio Díaz, 1929; con L. Panero y L. Alonso Luengo, Guía sentimental y artística de Astorga, Imprenta de Porfirio Díaz, 1929; Fin de semana, Madrid, Ediciones Literatura, 1934; Novelistas ingleses contemporáneos, Zaragoza, Cronos, 1945; El destello, Santander, Antonio Zúñiga Editor, 1948; Cisne sin lago. Vida y obra de Enrique Gil y Carrasco, Madrid, Ínsula, 1949; Ángel Ferrant, Santander, Escuela de Altamira, 1951; De Goya al arte abstracto, Madrid, Ediciones de Cultura Hispánica, 1952; Galdós, novelista moderno, Madrid, Revista de Occidente, 1957; Las secretas galerías de Antonio Machado, Madrid, Taurus, 1958; Conversaciones con Juan Ramón Jiménez, Madrid, Taurus, 1958; Estudios sobre Juan Ramón Jiménez, Buenos Aires, Losada, 1960, Balance del surrealismo, Santander, Isla de los Ratones, 1961; Direcciones del modernismo, Madrid, Gredos, 1963; Autobiografías de Unamuno, Madrid, Gredos, 1964; Relaciones entre Antonio Machado y Juan Ramón Jiménez, Florencia, Universitá di Pisa, 1964; Pitagorismo y modernismo, Santander, Bedia, 1967; El último Juan Ramón, Madrid, Alfaguara, 1968; La invención del 98 y otros ensayos, Madrid, Gredos, 1969; Una poética para Antonio Machado, Madrid, Gredos, 1970; García Márquez o el arte de contar, Madrid, Taurus, 1970; Técnicas de Galdós, Madrid, Taurus, 1970; Psicologías del autor y lógicas del personaje, Madrid, Taurus, 1979; Espacio y novela, Barcelona, Antoni Bosch, 1980; La novela lírica, Madrid, cátedra, 1984; La juventud de Leopoldo Panero, León, Diputación Provincial, 1985; Espacios poéticos de Antonio Machado, Juan March- Cátedra, 1987; Juan Ramón Jiménez: año de gracia de 1903, Madrid, Real Academia Española, 1990; (dir.), Diccionario de Literatura Española e Hispanoamericana, Madrid, Alianza Editorial, 1993, 2 vols.
Bibl.: B. Bockus Aponte, La obra crítica de Ricardo Gullón, Madrid, Ínsula, 1975; A. Cantalapiedra y P. Beltrán de Heredia (eds.), Los años santanderinos de Ricardo Gullón (1941-1953), Santander, Artes Gráficas Bedia, 1981; L. González del Valle y D. Villanueva, Estudios en honor a Ricardo Gullón, Lincoln, The University of Nebraska-Lincoln, 1984; J. Serrano y A. Campoamor González, Testimonio de amistad, Madrid, Casa León-Taller Artes Gráficas Fernández Ciudad, 1988; A. Brown, Ricardo Gullón (1908-1991) in memoriam, Melilla, Universidad Nacional de Educación a Distancia, 1992; A. López de Martínez (ed.), A Ricardo Gullón, sus discípulos, Eire, Pennsylvania, 1995.
Germán Gullón Palacio