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Diego de Argumosa y Obregón

Biografía

Argumosa y Obregón, Diego de. Villapresente (Cantabria), 10.VII.1792 – Torrelavega (Cantabria), 23.IV.1865. Médico, cirujano.

Hijo de médico con ejercicio en Suances a quien sus ideas liberales llevaron al exilio en Londres. Con estudios de Latín y Filosofía y los iniciales de Medicina Diego de Argumosa participa en la Guerra de la Independencia como voluntario, cumpliendo cometido sanitario. En 1814 inicia estudios de Medicina en la Universidad de Alcalá y el mismo año se incorpora al Colegio de Cirugía de Madrid; en 1817, es colegial interno, bachiller de Cirugía en 1819, obteniendo al siguiente año los grados de licenciado y doctor. En 1821 es nombrado catedrático supernumerario del Colegio de Cirugía de Burgos al tiempo que amplía su formación académica en la Escuela de Medicina Práctica de Madrid, graduándose como médico en 1822. En 1823, se instala como profesional en la Corte y contrae matrimonio en 1826.

En 1829, obtiene el puesto universitario de profesor de Disección Anatómica y en 1829 accede a la cátedra de Afectos Externos y Operaciones, cargo docente que obtuvo, venciendo contrarios favoritismos, escribió en carta privada, irónicamente, con el auxilio espiritual de santa Rita, “abogada de los liberales”.

Fue nombrado titular de la cátedra de Clínica Quirúrgica en 1845, con categoría de ascenso (1848), puesto académico que ocupa hasta su jubilación voluntaria en 1854.

Su labor académica y su pericia clínica como cirujano se la reconocieron con diversas distinciones: ingresa en la Real Academia de Medicina de Madrid en 1831; en 1834 en la Real Academia de Ciencias Naturales y en 1841 en la Real Academia de Medicina de Sevilla. La Gran Cruz de Carlos III le fue otorgada en 1852. Fiel a la línea ideológica de su padre, ocupó fugazmente puestos políticos, en el Ayuntamiento de Madrid y como diputado en 1836. Su carácter severo y orgulloso le llevó a protagonizar disputas académicas con su antiguo discípulo José Alarcón y Salcedo (1842) y con Joaquín Hysern (1848). Una crítica a la actuación de compañeros del claustro médico le envuelve en una denuncia sustanciada judicialmente por delito de calumnias que firmaron los profesores José María López y Manuel Soler; Argumosa, inicialmente condenado por sentencia de junio de 1851, demostrada la certeza de la denuncia, es absuelto por sentencia judicial de diciembre del mismo año. Un enfrentamiento con los alumnos de su cátedra, que derivó en tumultuosa protesta ante su domicilio y que se enlazó con desgracias familiares contribuyó a la decisión de abandonar Madrid refugiándose en Torrelavega, donde reside hasta su fallecimiento.

Argumosa participó en distintas actividades profesionales destacando su actuación en la epidemia de cólera de 1834, dolencia que le afectó. Por su prestigio académico fue nombrado miembro de una Comisión a la que se encomendó redactar reformas en los reglamentos del “arte de curar”. El episodio con mayor resonancia pública en su actividad como cirujano lo motivó la orden judicial de 11 de noviembre de 1835 para dictaminar, con el médico Mateo Seoane, la naturaleza de las lesiones ulcerosas que presentaba la monja sor Patrocinio, conocida como “la monja de las llagas”, a la que se atribuía participación política en el entorno cortesano de Isabel II; Argumosa declaró curable lo que era atribuido a intervención divina y por conseguirlo, lo relata el propio Argumosa, “le cerraron muchos devotos las puertas de sus casas y hasta... las del cielo”.

Diego de Argumosa, con su actividad docente y quirúrgica, es la más representativa figura de la Cirugía española en la primera mitad del siglo xix. Su preparación teórica es deudora de la medicina francesa y en su actuación profesional fue iniciador de una renovación del arte quirúrgico y creador de escuela. La contribución de Argumosa a la cirugía incluye originales procederes quirúrgicos y modificaciones instrumentales recogidas en publicaciones periódicas desde 1832. Ideó una técnica para el tratamiento del cáncer del párpado inferior, la blefaroplastia (1832), descrita el mismo año por Hysern y motivo de una disputa que retrata bien el carácter combativo de Argumosa; suya es una técnica para el tratamiento quirúrgico del cáncer labial y de métodos originales o rectificados para la extirpación de la lengua, el tratamiento quirúrgico del sarcocele y el hidrocele y la uretrostomía perineal, una modificación de la rinoplastia y la sutura intestinal que llamó de “colchonero”. En cirugía del aparato locomotor, propuso nuevo proceder en la ejecución de desarticulaciones en amputaciones de miembros. Como los grandes cirujanos europeos del siglo, Argumosa ideó instrumental para mejorar ciertas intervenciones quirúrgicas. En su labor como cirujano incorporó y supo utilizar con provecho sus conocimientos anatómicos, apoyándose en la orientación anatomolínica de la medicina francesa. Introductor temprano de la anestesia por inhalación de éter sulfúrico, Argumosa publica cuatro casos de su práctica en 1847; ideó un aparato para su mejor administración y más tarde fue también precoz su utilización del cloroformo.

Era proyecto de Argumosa recoger su dilatada experiencia clínica en un tratado quirúrgico. Su discípulo Alarcón y Salcedo se anticipó a aquel propósito y, sin su autorización, compuso con material de las explicaciones de cátedra de su maestro un Manual de Afectos Externos (1842); la denuncia publicada por Argumosa generó la polémica ya mencionada. Retirado del quehacer académico, Argumosa compuso una completa información de todo su saber como cirujano en un Resumen de Cirugía que ha sido valorado como el más importante tratado quirúrgico español de su tiempo.

 

Obras de ~: La filosofía médica militante: escaramuza repulsiva contra una salida impetuosa del Sr. Hisern, Madrid, Imprenta Delgras Hermanos, 1848; Resumen de Cirugía, Madrid, José María Alonso, 1850-1860, 2 vols.

 

Bibl.: J. Alarcón y Salcedo, El Doctor Argumosa pintado por sí mismo: o verdadero retrato de dicho señor [...], Madrid, Imprenta de Rufino de la Sota, 1843; A. del Busto y López, La cirugía del presente y los cirujanos del pasado: memoria [...] leída en el acto solemne de la coronación de una lápida conmemorativa en honor de los Directores D. Diego de Armumosa [...], Madrid, Imprenta y Litografía de los Huérfanos, 1892; J. García del Moral, Galería de escritores médicos montañeses. Ensayo bio-bibliográfico, Santander, Imprenta, Litografía y Encuadernación Viuda de F. Fons, 1906, págs. 9-30; L. Comenge, La Medicina en el siglo xix. Apuntes para la Historia de la cultura médica en España, Barcelona, José Espasa, 1914, págs. 593-602; A. Albarracín Teulon, Diego de Argumosa y Obregón. Cirujano español del siglo xix, Madrid, 1956; A. Perera y Prast, “La atormentada vida del Dr. Argumosa”, en Anales de la Real Academia Nacional de Medicina, 85 (1968), págs. 207-232; G. Sorni, La obra quirúrgica de Diego de Argumosa y Obregón, Barcelona, Científico-Médica, 1970.

 

Luis Sánchez Granjel