Genserico (Geiserico). ¿Panonia (Hungría)?, c. 390 – Cartago (Túnez), 477. Rey de los vándalos y alanos.
Hijo del rey de los vándalos hasdingos Godegiselo y de una concubina, Genserico debió de nacer en Panonia (Hungría), antigua patria de los vándalos hasdingos.
A la muerte de su padre fue su medio hermano Gunderico quien heredó la soberanía sobre su pueblo.
No se tienen datos sobre este príncipe hasta que al morir su hermano en Sevilla en el 428 hereda a su vez el mando sobre el conjunto popular de los vándalos y alanos que en el año 419 se habían fusionado por medio de una etnogénesis bajo el dominio de Gunderico.
Con Genserico se lleva a cabo la gran aventura de los vándalos, el cruce a África desde Algeciras por el Estrecho de Gibraltar, de todo el conjunto de las ochenta mil personas que constituía el pueblo, y su posterior ruta hasta Numidia. Durante varios meses a lo largo del año 430 pusieron sitio a la ciudad de Hipona, en el asedio de la ciudad enfermó y murió su obispo, san Agustín. Posteriormente, en el 439 tomaron por sorpresa la ciudad de Cartago y establecieron un reino destinado a durar casi un siglo.
Son numerosas las fuentes que mencionan a Genserico, famoso y temido por la imposibilidad que encontró el Imperio Romano de impedir su avance o de vencerlo, por lo que, finalmente, el Emperador no tuvo más remedio que claudicar ante estos hechos y consensuar en el año 442 un tratado que intentaba salvaguardar al menos una parte de las provincias africanas y de las islas del Mediterráneo. Pero, tras el asesinato de Valentiniano III, en el 455, Genserico dio por concluidos todos los pactos existentes y se apoderó del resto de la diócesis de África, así como de Sicilia, Córcega, Cerdeña, las Baleares, y de Ceuta, que pertenecía a la diócesis de Hispania, por ser parte de la Mauritania Tingitana. El dominio vándalo sobre este importante enclave de la costa sur del Estrecho y sobre las islas Baleares perduró hasta la reconquista bizantina en el 535, cuando el general Belisario envió dos tribunos a reclamar para el Imperio dichos lugares.
La convocatoria de los representantes eclesiásticos de las sedes de Mallorca, Menorca, Ibiza, Ceuta y Melilla a la Conferencia de Cartago del 484 muestra la soberanía vándala sobre dichos territorios.
Consecuencia directa del asesinato de Valentiniano III fue la invasión de Roma por los vándalos.
Según la tradición bizantina, Genserico fue llamado en su auxilio por la emperatriz viuda Eudoxia. La incursión vándala condujo a la muerte del nuevo emperador Petronio Máximo y al saqueo de la ciudad.
Después, la Emperatriz y sus hijas, junto con numerosos prisioneros y un gran botín, fueron conducidas a Cartago. En la capital del reino vándalo, Eudoxia, la hija mayor de Valentiniano, contrajo matrimonio con Hunerico, hijo y heredero de Genserico, con quien tuvo descendencia.
A partir de la muerte de Valentiniano, las relaciones entre Genserico y el Imperio Romano fueron fluctuantes, aunque, en general, poco cordiales. Las diversas expediciones enviadas contra Cartago, tanto por la parte oriental como por la occidental, resultaron sendos fracasos; la ineptitud de los generales y las crisis de los diversos gobiernos tampoco permitían mayores avances. Tras una etapa de enfrentamiento que se plasmaba en frecuentes ataques a las costas de Italia se concluyó una paz con Occidente que llevó al trono a Olibrio, cuñado de Hunerico por su matrimonio con Placidia, la otra hija de Valentiniano. Con Oriente, la paz se consiguió finalmente en el reinado de Zenón y duró hasta que Justiniano decidió intervenir en los asuntos internos del reino vándalo, proclamándose defensor del depuesto Hilderico.
Genserico, además de por sus logros militares y diplomáticos, por la dureza con la que actuó en momentos de crisis interna, también pasó a la posteridad por su violento enfrentamiento con la Iglesia Católica africana. Numerosos autores se hicieron eco de su brutalidad tanto para con las jerarquías de la Iglesia como para con los católicos relacionados con el entorno regio que se negaban a convertirse al arrianismo, religión del Rey y del pueblo vándalo.
Genserico murió en Cartago en el año 477, tras un reinado de treinta y siete años. Su testamento establecía el sistema de sucesión por el que se iban a regir los vándalos en adelante, y dispuso que fuera el de mayor edad de cada generación, de entre sus descendientes, quien accediera al trono y después el siguiente hasta agotar dicha generación. Le sucedió su hijo Hunerico.
Genserico tuvo también otros hijos varones y al menos una hija.
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María Elvira Gil Egea