Ruiz de Molina, Juan. El Caballero Viejo. Señor de Embid, El Pobo de las Dueñas, La Serna de la Solana, Guisema, La Torre de Antón Sánchez, Santiuste y Terzaguilla (Guadalajara). ?, c. 1370 – 1453-1454. Noble, señor.
Era tataranieto de Pedro González de Molina el Desheredado, el hijo del III señor de Molina de Aragón Gonzalo Pérez de Lara que fue apartado del señorío en favor de su hermana Mafalda de Lara, mujer del infante Alfonso de Molina. Sus padres fueron Gil Ruiz de Molina y María Sánchez. Además de guerrero fue bachiller en Leyes. Casó con Mari Díaz, hija de un don Lázaro vecino de Molina.
Elvira de Mendoza, hija de Pedro González de Mendoza el de Aljubarrota, había recibido Castilnuevo en dote por su matrimonio con Miguel de Gurrea a mediados de la década de 1380. El 21 de febrero de 1389 una sentencia obligó a deshacer esa dote porque Castilnuevo estaba vinculado al mayorazgo de los Mendoza que pertenecía a su hermano Diego Hurtado de Mendoza el Almirante; entre tanto Elvira había vendido Castilnuevo a Juan Ruiz de Molina.
Muchos años después, el 9 de agosto de 1413, Íñigo López de Mendoza, hermano de Diego quien le había cedido el señorío de Castilnuevo, vendió El Pobo de las Dueñas, La Serna de la Solana, varios tributos en Molina de Aragón y su parte en las salinas de Terzaga al Caballero Viejo por 5260 florines diciendo que si valiesen más, le perdonaba la demasía por haber aceptado revenderle Castilnuevo, a pesar de que valía mucho más, en el mismo importe que hubo pagado a Elvira.
El 14 de julio de 1420 el infante Enrique de Aragón se apoderó del Palacio Real de Tordesillas donde estaba Juan II y se hizo cargo del gobierno de Castilla.
Uno de los que acudieron a liberar al Rey fue el III conde de Medinaceli Luis de la Cerda y en su ejército iba Juan Ruiz de Molina con diez hombres de a caballo y diez ballesteros. El 7 de enero de 1426 el conde recompensó a don Juan cediéndole Embid. El Caballero Viejo tuvo que pleitear por este señorío con los Vera (a quienes se lo habían quitado los condes de Medinaceli) hasta que obtuvo un privilegio de Juan II en 1440 confirmándole la posesión tras comprar a Pedro de Vera los derechos que pudieran corresponderle.
El castillo de Embid era uno de los que vigilaban la frontera aragonesa y en 1452 fue ocupado por Alfonso Bellido, criado del infante don Juan de Aragón, que asoló desde allí las tierras cercanas. Al año siguiente el justicia mayor de Aragón Ferrer de Lanuza aconsejó al infante que devolviera la fortaleza a Juan Ruiz de Molina pero la restitución no se produjo hasta 1455, muerto ya el Caballero Viejo, cuando Enrique IV llegó a un acuerdo con el infante para comprar todos sus bienes en Castilla.
Más graves aún fueron los problemas en El Pobo de las Dueñas. Diego Hurtado de Mendoza el Loco, hijo de don Íñigo y primer conde de Priego, no aceptó la venta de 1413 y ocupó el lugar alegando que pertenecía a su mayorazgo y por tanto no podía venderse.
El Caballero Viejo protestó ante Juan II y obtuvo cartas en su favor que no se cumplieron como tampoco la sentencia de 1441 que las revalidaba, dada por la reina María de Aragón juntamente con el príncipe de Asturias Enrique, el almirante Fadrique Enríquez y el primer conde de Alba.
Por su testamento de 1453 el Caballero Viejo dividió la herencia entre cuatro de sus hijos: la casa de Teros y los derechos sobre El Pobo de las Dueñas pasaron al primogénito Diego Ruiz de Molina que debía recibir la ayuda de sus otros hermanos para recuperar este señorío (los pleitos, luchas y desafíos entre los condes de Priego y los Ruiz de Molina continuaron hasta que el 11 de octubre de 1488 los Reyes Católicos ratificaron mediante carta ejecutoria una sentencia de la Chancillería de Valladolid que ordenaba la reintegración de El Pobo en el señorío de Molina); el castillo y señorío de Santiuste, comprados en 1410 según una noticia recogida por Salazar y Castro, fueron para Pedro; Embid, Guisema (adquirida en 1425 de Diego Hurtado de Mendoza el Loco) y Terzaguilla para Alfonso, y La Serna de la Solana con La Torre de Antón Sánchez (comprada a Juan Sánchez de Alarte y al señor de Tartanedo Antón Sánchez) para Juan.
El testamento habla de otros hijos: Gil de quien su padre dice no tener noticia desde que se hizo fraile y que no sabe si estará vivo o muerto, Teresa y María ya difunta.
Francisco Layna Serrano dice que el Caballero Viejo murió en 1454, y María Elena Cortés Ruiz que en 1453. Desde luego ya había fallecido el 14 de noviembre de 1454 cuando los hijos presentaron su testamento ante el alcalde de Molina de Aragón Lope de Alcaraz. Luis de Salazar y Castro supone también que murió antes del 8 de mayo de 1454 pues ese día Juan II ordenó que Diego Hurtado de Mendoza restituyera a Diego, Pedro, Alfonso y Juan Ruiz de Molina un ganado que les había tomado, sin citar ya al padre.
Bibl.: L. de Salazar y Castro, Historia genealógica de la Casa de Lara justificada con instrumentos y escritores de inviolable fe, t. I, Madrid, 1696, págs. 270-273; F. Layna Serrano, Castillos de Guadalajara, Guadalajara, AACHE, 1994 (1933); P. Pérez Fuertes, Síntesis histórica-política y socio-económica del señorío y tierra de Molina, Guadalajara, Institución Provincial de Cultura Marqués de Santillana, 1983; A. Herrera Casado, Crónica y guía de la provincia de Guadalajara, Guadalajara, Diputación Provincial, 1988 (1983); C. Mignot, “Evolución de la estructura jurisdiccional en la región alcarreña (siglos XI-XV)”, Hispania, 163 (1986), págs. 245-281; M. E. Cortés Ruiz, Articulación jurisdiccional y estructura socioeconómica en la comarca de Molina de Aragón a lo largo de la Baja Edad Media, Madrid, tesis doctoral leída en la Universidad Complutense, 2000; N. Ávila Seoane, El proceso de señorialización de la extremadura castellana: el ejemplo de la provincia de Guadalajara (siglos XII a XVIII), Madrid, Editorial Complutense, 2006.
Nicolás Ávila Seoane
