Hijo de un hidalgo trujillano, Sancho Delgadillo de Paredes, y de Juana de Torres. Ingresó a los catorce años en la milicia castellana junto a su hermano bastardo Álvaro y su escudero Tapia, participando en la guerra contra los franceses en el viejo reino de Nápoles. Recibió los sobrenombres del Bayardo español y Sansón extremeño, como egregia figura extremeña, prototipo y personificación del valor y la gloria militar, y circularon muchas leyendas populares acerca de su fuerza física y valor. Teatro de sus proezas fueron las campañas de Ronda, Baeza, Málaga, Granada, y sobre todo Nápoles, estando al servicio del papa Alejandro VI de Borgia y después a las órdenes del Gran Capitán, Gonzalo de Córdoba. El rey Fernando el Católico le armó caballero y depositó en él su confianza.

En 1502, España y Francia habían pactado el reparto de Nápoles. El cardenal de Santa Cruz y el embajador Francisco de Rojas reclutaron un ejército bajo las órdenes de García de Paredes, nombrándole coronel de los Tercios. Durante la fase de ocupación de la zona adjudicada a España en el reparto de Nápoles, García de Paredes tuvo actuaciones muy destacadas en Cosenza, Tarento, Manfredonia, Ceriñola y en la ribera del Garellano, poniendo fin a las aspiraciones francesas sobre Nápoles. [...]