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Alexandre de Ros i Gomar

Biografía

Ros i Gomar, Alexandre de. Lérida, 1598 – Madrid, 2.VI.1656. Polemista y memorialista.

De padres catalanes, y no italianos, como afirma Todà, los primeros años de la vida de Ros son los menos documentados; a ciencia cierta, se sabe tan sólo que ingresó en la Compañía de Jesús, y fue destinado a diversas casas de la provincia de Aragón, y que se doctoró en Teología. De 1633 data su primera obra conocida, un sermón predicado en su Colegio de Gerona.

En 1636 Ros aparece con fuerza en la vida pública del Principado gracias a su participación en el Concilio de la Tarraconense, en el que, bajo el seudónimo de Juan Goméz Adrín, defendió con determinación la predicación en castellano en Cataluña, en particular, en los sermones barrocos, ante audiencias lucidas. En 1638 se hallaba destinado en el Colegio de Barcelona, pero al año siguiente, 1639, se secularizó y se trasladó a Roma, donde publicó un panegírico de la casa Barberina. Aquel mismo año recibió de Urbano VIII el deanato de Tortosa, así como el título de protonotario apostólico. Durante la mayor parte de la Guerra de los Segadores, Ros residió en Nápoles, bajo la protección del virrey, Juan Alfonso Enríquez de Cabrera y se convirtió en la voz más destacada de los profilipistas catalanes. En 1645 publicó un panegírico a la muerte de la hija del virrey y, al año siguiente, su obra magna, Cataluña desengañada, discursos políticos (Nápoles, 1646), traducida al italiano en 1647. En este libro, Ros ataca duramente la actitud filofrancesa de la Generalitat así como la secesión de la Monarquía hispánica. Con motivo de la revuelta antifiscal napolitana de 1647, escribió un memorial, publicado en 1649, en defensa de los nobles fieles a Felipe IV, frente a las aspiraciones republicanas del pueblo. En dicho memorial, expone sus servicios a la Monarquia con “las armas de la pluma”, y en particular, a las órdenes de Juan José de Austria.

En 1649 Ros regresó a España y pasó a residir en la Corte, por haber caído Tortosa en manos francesas.

Al año siguiente, redactó un opúsculo sobre los medios para retornar Cataluña a la obediencia real, algunos de ellos realmente duros para con sus compatriotas.

En 1651 fue nombrado predicador real, pero, a su pesar, se le apremió que pasase a residir a Tortosa, recuperada ya por las armas españolas. A su llegada a Tortosa, el Cabildo y el Consell le emplearon como síndico, pero rápidamente Ros entró en la órbita de Juan José de Austria y el marqués de Mortara, que dirigieron el asalto final a Barcelona. Conquistada la capital catalana, la promoción social de Ros fue meteórica: se convirtió en el embajador de la nueva Generalitat en Madrid (1653), e incluso se le propuso para un obispado, que el mismo rechazó. Al acabar su embajada, Ros continuó residiendo en la Corte con el cargo honorífico de predicador real. Murió en Madrid en junio de 1656.

 

Obras de ~: Sermón que predicó el padre Alexandro de Ros, de la Compañía de Jesús, en su colegio de Gerona, en la fiesta que hizo al cabo de la octava del Corpus doña Leonor Agullana, Gerona, 1636; Abeja barberina. Panegírico a la santidad de N. Señor Urbano VIII, Roma, Luis Griñani, 1639; Sermón que predicó Don Alexandro de Ros deán, y canonigo de la Santa Iglesia de Tortosa, en la octava que hizo a Santa Teresa de Jesús, el convento del Carmen Calzado de los españoles en Nápoles, [s. l.], [1642]; Las dichas de una pena y los motivos de consuelo en la muerte de mi señora D. Francisca Mariana Henríquez de Cabrera y Sandoval, Nápoles, Egidio Longo, 1645; Cataluña desengañada, discursos políticos de D. Alexandro de Ros, Nápoles, Egidio Longo, 1646; [Memorial al rey en nombre de la nobleza napolitana, Madrid, Herederos de Andrés de Parra, 1649]; Discurso sobre la forma de reducir a la obediencia de Su Majestad a Barcelona y Cataluña, [s. l.], [1650]; Memorial de don Alexandro de Ros sobre que se continúe el drecho que llaman de guerra en la Deputación de Cataluña [s. l.], [1653]; Sermón de la purísima concepción de la Virgen nuestra señora, y en acción de gracias de la reducción de Cataluña a la obediencia de Su Majestad, Barcelona, Antonio Lacavallería, 1653.

 

Bibl.: E. Todà, Bibliografía espanyola d’Itàlia, vol. III, Castell de Sant Miquel d’Escornalbou, 1927-1931, pág. 513; E. Serra, “L’inici formal de la guerra contra el Rei: un censal de tres-centes mil lliures. Nota a un aspecte de la Guerra dels Segadors”, en El barroc cátala. Actes de les Jornades celebrades a Girona els dies 17, 18 i 19 de desembre de 1987, Barcelona, Quaderns Crema, 1987, págs. 89-135; M. Prats, Política lingüística de l’Església catalana (segles xvi-xvii), Vic, Eumo Editorial, 1995, págs. 87-116; E. Querol Coll, Tortosa, república literaria (1475-1800), Tortosa, Consell Comarcal del Baix Ebre, 1999, págs. 246-251; “Escrits polítics i propaganda a la Guerra dels Segadors: Vicent de Miravall i Alexandre de Ros”, en Recerca, 6 (2002), págs. 219-225; Estudis sobre la cultura literaria a Tortosa a l’edat moderna, Barcelona, Publicacions de l’Abadia de Montserrat, 2006, págs. 304-311.

 

Enric Querol Coll