Tordesillas, Rodrigo de. ?, s. xv – Segovia, 30.V.1520. Procurador por Segovia en las Cortes de La Coruña.
Fue, en primer lugar, tesorero del Alcázar y regidor de Segovia, una ciudad de apenas 13.500 habitantes, dedicada a la manufactura de paños y a la ganadería. Afectada por una grave crisis económica como el conjunto de las ciudades castellanas desde comienzos de siglo, Segovia sufría graves problemas internos. Los elevados impuestos, la forma de recaudarlos y las exenciones que disfrutan algunos linajes, la segregación de una parte de su tierra a manos de la nobleza, las luchas por alcanzar el poder entre facciones del patriciado urbano y las dificultades estructurales de su industria, junto con la competencia desleal en la exportación de lana por la burguesía burgalesa, generaron un malestar generalizado en la sociedad segoviana que acabaría por estallar en el contexto de las Comunidades.
Tras fracasar Carlos V en su intento de obtener de las Cortes de Santiago (marzo de 1520) el servicio necesario para alcanzar el Sacro Imperio, su acólito Chiévres recurrió a la política de ganarse a los procuradores mediante presiones, amenazas o mercedes, para volverlos a convocar, esta vez en La Coruña, en el mes de mayo. Rodrigo de Tordesillas fue designado procurador en una reunión muy controvertida del regimiento segoviano, que provocó después el cese de siete de los regidores que se opusieron al método propuesto por el corregidor a instancias del Monarca. En La Coruña el servicio obtuvo el voto favorable gracias, entre otros, a Rodrigo de Tordesillas previo soborno. Su compañero Juan Vázquez del Espinar recibiría 50.000 maravedís y el hijo de Tordesillas los 300 ducados ofrecidos a su padre junto con la tesorería del Alcázar y dos rentas.
El 20 de mayo de 1520 el Rey embarcó para Alemania dejando a Adriano de Utrecht como regente. Fue la señal de una agitación que empezó a extenderse como la pólvora por varias ciudades castellanas. Segovia será el escenario de los primeros y más violentos incidentes. Nueve días después de la partida del Monarca, tuvo lugar en la iglesia del Corpus Christi la reunión anual de los cuadrilleros que recaudaban los impuestos locales. En ella salieron a la luz los acontecimientos de La Coruña y se lanzaron duras críticas contra el corregidor, a quien se reprochaba su absentismo —se hallaba en Toledo (centro de la resistencia) defendiendo a los suyos frente a la acción de la Comunidad—, y a sus oficiales, más preocupados por procurarse cuantiosos beneficios que por administrar justicia. Nada había de nuevo en estas críticas, pero la reacción airada de un subalterno, Hernán López Melón, amenazando con denunciar estos discursos sediciosos como un crimen de lesa-majestad, provocó su linchamiento. Su cadáver acabó colgado en la Cruz del Mercado, junto al de otro compañero suyo que terminó corriendo la misma suerte.
Al día siguiente, Rodrigo de Tordesillas se dispuso a dar cuenta al regimiento segoviano de su actuación en las Cortes. En las proximidades de la iglesia de San Miguel una muchedumbre le increpó, acusándole de ser “enemigo de los pobres”. Tordesillas acabó estrangulado en plena calle y su cadáver colgado con los del día anterior. Se había plegado al servicio exigido por el Rey en contra de lo que previamente había jurado a Segovia. Y peor aún, no se opuso al nombramiento como conde de Chinchón de Fernando de Bobadilla, en cuyas manos paraba la tierra enajenada a la ciudad y cuya restitución a los segovianos debió reclamar al Rey en las mismas Cortes.
Partidario de usar la fuerza contra los agitadores de Segovia —que se había dotado de un gobierno popular—, el Consejo Real encargó al alcalde Ronquillo averiguar las circunstancias del asesinato del procurador. Pero nunca se llegó a esclarecer quién participó en los alborotos.
Bibl.: J. L. Gutiérrez Nieto, Las comunidades como movimiento antiseñorial, Barcelona, Planeta, 1973; J. A. Maravall, Las Comunidades de Castilla, Madrid, Alianza Editorial, 1979; A. García Sanz, “Posiciones económicas y actitudes políticas en el movimiento comunero: el caso de Segovia”, en VV. AA., V Symposium Toledo Renacentista, Toledo, Universidad Complutense, 1980, págs. 145-170; P. Álvarez de Frutos, La revolución comunera en tierras de Segovia, Segovia, Caja de Ahorros, 1987; J. Pérez, Los comuneros, Madrid, Historia 16, 1989.
Rosario Porres Marijuán
