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José de la Oliva Avilés

Biografía

Oliva Avilés, José de la. Torrubia del Campo (Cuenca), p. m. s. xviii – Salamanca, 1801. Religioso de la Orden de San Basilio (OSBas.), doctor en Teología, catedrático en la Universidad de Salamanca desde 1764 de diversas disciplinas, hasta su muerte.

Fue hijo de Gabriel de la Oliva y de María Avilés, él natural de Torrubia (Cuenca) y ella de Tribaldos (Cuenca). Siguiendo el estudio monográfico de Benito y Durán (1966), hay que decir que la vida de José de la Oliva en la Universidad de Salamanca ocupa casi medio siglo. Los libros de matrícula dan la inscripción del padre de la Oliva en los cursos 1756-1757, 1758-1759, 1761-1762, 1763-1764. Como se ve, hay algunos años que no asistió: se puede achacar a deberes de su estado religioso. El 25 de agosto de 1761 el maestro Andrés Iglesias dio el grado de bachiller en Artes a Oliva, y a partir del 16 de septiembre siguiente se sometió a las durísimas pruebas, que constan documentalmente, y desarrolló in extenso Benito y Durán (págs. 271-272) para la colación del grado de licenciado en Sagrada Teología. Debió de desarrollar, en latín, dos lecciones elegidas por el aspirante entre varios “piques” o puntos concretos del maestro de las Sentencias suscitados por el Tribunal, constituido por veintitrés catedráticos. El 25 de septiembre se hizo público el resultado de la votación de diecisiete jueces, todos coincidentes con una “A” (aprobatio), por lo que se le concedió la licenciatura en Teología nemine discrepante. Apenas un mes después, se volvieron a repetir pruebas “rigurosísimas” iniciadas el 29 de octubre de 1761 para la colación del grado de doctor. El 7 de noviembre se hizo un acto público en la nave del Evangelio de la Catedral, iniciado con una procesión del claustro, con sesenta y ocho asistentes, para otorgar “con pompa” el grado de doctor en Sagrada Teología al licenciado R. P. D. José de la Oliva.

El libro de “procesos de cátedras” muestra las duras oposiciones que se realizaban para proveerlas, teniendo en cuenta además que ninguna era en propiedad, sino que se concedían por un trienio, quedando vacante para nueva oposición consumidos los tres años. La primera Cátedra que consiguió el doctor de la Oliva fue la de Artes de Físicos (se refería a comentarios a los libros sobre Física de Aristóteles). Habían concurrido treinta y un opositores. Se le dio posesión el 5 de diciembre de 1764. Superado el trienio, vacó su Cátedra e hizo otras oposiciones que no aprobó, frente a unos veinte o hasta treinta participantes. Mientras, hacía sustituciones como la de la quinta Cátedra de Teología, que desempeñó desde 1773.

En enero de 1775 firmó la oposición a la Cátedra de Regencia de Teología. Opositaron dieciocho maestros. Enviado el expediente al Consejo Supremo de Castilla, éste remite a la Universidad la resolución del Rey nombrándole para dicha Cátedra, según la propuesta del Tribunal, y José de la Oliva se posesionó el 15 de noviembre de 1777. Encumbrado ya como catedrático eminente, formó parte en 1778 del Tribunal (cuatro miembros) de otra Cátedra de Regencia de Teología. En octubre de 1786 se convocó a oposición la Cátedra de Propiedad de Lugares Teológicos. En enero de 1787 efectuó una disputatio contra los argumentos de otros dos coopositores. Remitida en abril la propuesta del Tribunal al Consejo Real, el 3 de septiembre se recibió el nombramiento de catedrático a favor del padre de la Oliva, quien entró en el claustro el 19 de octubre.

Quedó vacante el 17 de diciembre de 1791 la Cátedra de Vísperas de Teología. Opositaron a la misma veintitrés maestros y el doctor de la Oliva salió propuesto por el Tribunal y fue nombrado por el Rey catedrático el 24 de octubre de 1792.

Le quedaba por desempeñar la reina de las cátedras: la de Prima de Teología, vacante por jubilación del maestro Antonio Muñoz. Se convocó el 19 de enero de 1801 y el 12 de mayo el Tribunal elevó propuesta de nombramiento a su favor, al que acompaña el siguiente curriculum: “Sus méritos: 48 años de estudios mayores. En su Religión 3 años Lector de Filosofía y 9 de Teología, en los que presidió ocho Actos Públicos. Fue catedrático, en la Universidad, de Filosofía, 15 años catedrático de curso de Teología, 5 de Lugares Teológicos, 9 de Vísperas”. El 12 de agosto Su Majestad el Rey, a propuesta del Tribunal, le nombró catedrático de Prima de Teología. Se posesionó el 19 de agosto de 1801.

Poco le duró el disfrute de esta Cátedra, pues en enero de 1802 el rector de la Universidad convocó oposiciones por fallecimiento de su catedrático, sin que se sepa el día y mes del óbito. Sin embargo, hasta el 20 de diciembre de 1802 (¿quizás en el I aniversario de su fallecimiento?) no se le hicieron honras fúnebres por la Universidad, al menos, publicadas en folleto, por el reverendo Toribio Mayo Aparicio.

El doctor José de la Oliva fue el cuarto y último monje basilio catedrático de Salamanca. Después de pasar las hordas napoleónicas por Salamanca y por España la Orden de los basilios se extinguía en España.

 

Obras de ~: El hombre: oracion funebre en las exequias que celebro la Universidad de Salamanca, en la Real Capilla de S. Geronymo a la piadosa memoria del Rmo, P. M. Fr. Manuel Portillo, de el Orden del Carmen [], dixola Joseph de la Oliva, de el Orden de G. P. S. Basilio [], en Salamanca, por Nicolàs Joseph Villargordo y Alcaràz, 1768; Oracion funebre que en las exequias celebradas por la Universidad de Salamanca a la buena memoria del Rmo. P. M. Fray Bernardo de Zamora, de el Orden de la Madre de Dios de el Carmen [] de el Gremio y Claustro de esta Universidad de Salamanca y su Catedrático de Lengua griega. Dixo el R. P. M. Jose de la Oliva, de el Orden de San Basilio: Dr. Theologo, de el Gremio y Claustro de dicha Universidad y Cathedratico de una de las de Theologia de ella, Salamanca, Imp. de Santa Cruz (1787).

 

Bibl.: T. Tamayo Aparicio, Oracion fúnebre, que en las solemnes exequias celebradas en la Universidad de Salamanca a la buena memoria del Rmo. P. Mtro. Don Josef de la Oliva [], el dia 20 de diciembre de 1802 dixo el R. P. Mtro. Fr. Toribio Moya Aparicio, en Salamanca, en la oficina de Maria Eugenia Villargordo, s. f. (¿1802?); E. Esperabé de Arteaga, Historia Pragmática é interna de la Universidad de Salamanca, vol. II, La Universidad de Salamanca. Maestros y alumnos más distinguidos, Salamanca, Imprenta y Librería de P. Muñoz Izquierdo, 1917, págs. 683, 685, 687, 690 y 716; A. Benito y Durán, “Los monjes basilios en la Universidad de Salamanca”, en Miscelánea Comillas, vol. 46 (1966), págs. 213-286; “P. José de la Oliva Avilés (1756-1801)”, en F. Aguilar Piñal, Bibliografía de autores españoles del siglo xviii, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1991, pág. 141, n.º 1062; H. Prieto Sánchez-Morate y J. A. Silva Herranz, Diccionario de personajes conquenses (nacidos antes del año 1900), Cuenca, Diputación Provincial, 2002, pág. 280.

 

Fernando Rodríguez de la Torre

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